Puntos Sobresalientes de Génesis 6 a 10

Puntos Sobresalientes de Génesis 6 a 10

w04 1/1 págs. 29-30 Puntos sobresalientes del libro de Génesis (parte 1)

Respuestas a preguntas bíblicas:

6:6. ¿En qué sentido puede decirse que Jehová “sintió pesar” por haber hecho al hombre? La palabra hebrea que en este versículo se traduce “sintió pesar” se relaciona con un cambio de actitud o intención. Jehová es perfecto y, por lo tanto, no cometió ningún error cuando creó al hombre. Sin embargo, sí hubo un cambio en su actitud men-tal con respecto a la perversa generación antediluviana. Dios cambió su papel de Creador del hombre al de destructor de este por el desagrado que le causó la maldad de los seres humanos. El hecho de que protegió a algunas personas muestra que su pesar se limitó a los malvados (2 Pedro 2:5, 9).
7:2. ¿Sobre qué base se hacía la distinción entre los animales limpios y los inmundos? Parece ser que la base de la distinción tenía que ver con lo que se ofrecía en los sacrificios vinculados a la adoración, y no con lo que se podía o no se podía comer. Antes del Diluvio, la carne animal no figuraba en la dieta del hombre. Los términos “limpio” e “inmundo” referidos al alimento se utilizaron por primera vez en la Ley mosaica, y tales restricciones terminaron cuando esta fue abolida (Hechos 10:9-16; Efesios 2:15). Por lo visto, Noé sabía lo que era apropiado para un sacrificio de adoración a Jehová. En cuanto salió del arca, “empezó a edificar un altar a Jehová y a tomar algunas de todas las bestias limpias y de todas las criaturas voladoras limpias y a ofrecer ofrendas quemadas sobre el altar” (Génesis 8:20).
7:11. ¿De dónde provino el agua que causó el diluvio universal? Durante el segundo período o “día” creativo, cuando se formó “la expansión” atmosférica de la Tierra, había aguas “debajo de la expansión” y aguas “sobre la expansión” (Génesis 1:6, 7). Las aguas que se hallaban “debajo” ya estaban en la Tierra. Las que se hallaban “sobre la expansión” eran enormes cantidades de vapor de agua suspendidas muy por encima de la superficie terrestre, las cuales formaban una “vasta profundidad acuosa”. Estas aguas cayeron sobre la Tierra en los días de Noé.
8:11. Si el Diluvio arruinó los árboles, ¿dónde consiguió la paloma la hoja de olivo? Existen dos posibilidades. Puesto que el olivo es un árbol resistente, quizás permaneció vivo bajo el agua por algunos meses durante el Diluvio. Al bajar las aguas, el olivo que hubiera quedado sumergido volvería a estar en tierra firme y podría echar hojas. Por otra parte, la hoja de olivo que la paloma llevó a Noé también pudo provenir de un retoño bastante joven que brotó después de que las aguas bajaron.
9:20-25. ¿Por qué maldijo Noé a Canaán? Es muy probable que Canaán fuera culpable de algún abuso o perversión contra su abuelo Noé. Aunque Cam, el padre de Canaán, presenció lo ocurrido, no se opuso a ello, sino que al parecer lo difundió. No obstante, Sem y Jafet, los otros dos hijos de Noé, procedieron a cubrir a su padre; por eso fueron bendecidos. Pero Canaán fue maldecido, y Cam sufrió a causa de la vergüenza que aquel incidente trajo sobre su prole.
10:25. ¿Cómo “se dividió” la tierra en los días de Péleg? Péleg vivió desde 2269 has-ta 2030 a.E.C. Fue “en sus días” cuando Jehová provocó una notable división al confundir el lenguaje de los edificadores de Babel y esparcirlos sobre toda la superficie de la Tierra (Génesis 11:9). De este modo “se dividió la tierra”, es decir, la población del planeta, en los días de Péleg.

Lecciones para nosotros:

6:22. Aunque la construcción del arca requirió muchos años, Noé hizo precisamente lo que Dios le mandó. Por ello, él y su familia sobrevivieron al Diluvio. Jehová nos habla a través de su Palabra escrita y nos guía mediante su organización. Es por nuestro bien que debemos escucharlo y obedecerle.
7:21-24. Jehová no destruye a los justos junto con los inicuos.
9:1; 11:9. Ninguna treta ni esfuerzo humano puede frustrar el propósito de Jehová.
10:1-32. Los dos registros genealógicos correspondientes a antes y después del Dilu-vio, en los capítulos 5 y 10, conectan a todo el género humano con el primer hombre, Adán, mediante los tres hijos de Noé. Los asirios, los caldeos, los hebreos, los sirios y algunas tribus árabes son descendientes de Sem. Los etíopes, los egipcios, los cananeos y algunas tribus africanas y árabes son descendientes de Cam. Los indoeuropeos son des-cendientes de Jafet. Todos los seres humanos estamos emparentados y todos somos iguales a los ojos de Dios (Hechos 17:26). Esta verdad debe influir en el modo como ve-mos y tratamos a los demás.