Puntos sobresalientes de: Nehemías | Lectura de la Biblia

Puntos sobresalientes de la lectura de la Biblia: Nehemías | Textos explicados y lecciones prácticas

PUNTOS SOBRESALIENTES DE NEHEMÍAS

Hechos relacionados con la reconstrucción de los muros de Jerusalén y la posterior eliminación de las malas prácticas de los judíos
Abarca un período que comienza más de ochenta años después del regreso de los judíos de su exilio en Babilonia
Se reconstruyen los muros de Jerusalén a pesar de la oposición
Nehemías se entera en Susa de que el muro de Jerusalén está en ruinas; pide ayuda a Jehová en oración y solicita permiso al monarca persa Artajerjes para ir a reconstruir la ciudad y su muro; Artajerjes accede (Ne 1:1–2:9)
Nehemías llega e inspecciona por la noche el muro derruido; después notifica a los judíos su intención de reconstruirlo (2:11-18)
Sanbalat, Tobías y Guésem —extranjeros los tres— se oponen al proyecto; primero se mofan y después conspiran para pelear contra Jerusalén; Nehemías arma a los trabajadores y la obra prosigue (2:19–4:23)
Fracasan las conspiraciones contra el propio Nehemías; el muro se termina en cincuenta y dos días (6:1-19)
Se inaugura el muro; en la ceremonia dos coros y procesiones de acción de gracias marchan en dirección opuesta sobre el muro hasta converger en el templo; el pueblo rebosa de gozo (12:27-43)
Se ponen en orden ciertos asuntos en Jerusalén
Una vez que el muro está terminado, Nehemías asegura Jerusalén con puertas y asigna deberes a los porteros, cantores y levitas; deja la ciudad al cargo de Hananí y Hananías (7:1-3)
Nehemías comienza a hacer un registro genealógico del pueblo; encuentra el libro de registro genealógico de los que volvieron de Babilonia con Zorobabel; los sacerdotes que no pueden probar su genealogía quedan excluidos del sacerdocio ‘hasta que el sacerdote con Urim y Tumim se ponga de pie’ (7:5-73)
La población de Jerusalén es escasa, por lo que se designa por suertes a uno de cada diez del pueblo para que resida en la ciudad (7:4; 11:1, 2)
Se intenta mejorar la condición espiritual de los judíos
Los judíos más acaudalados concuerdan en restituir sus posesiones a sus hermanos más pobres, con los que han obrado mal al prestarles dinero con intereses (5:1-13)
En una asamblea pública, Esdras lee la Ley y algunos levitas toman parte en explicarla; el pueblo llora, pero se les anima a regocijarse porque es un día santo; también se regocijan porque entienden lo que se les ha leído (8:1-12)
Al día siguiente de haber leído la Ley, el pueblo se entera de que debe observar la fiesta de las cabañas; esta se celebra en un ambiente de gran regocijo (8:13-18)
Después se convoca al pueblo para que confiese los pecados de la nación y repase los tratos de Jehová con Israel; además, juran guardar la Ley, evitar los matrimonios con extranjeros y aceptar la obligación de mantener el templo y los servicios relacionados (9:1–10:39)
Tras la inauguración del muro, se vuelve a leer públicamente la Ley; cuando comprenden que los ammonitas y los moabitas no deberían entrar en la congregación, comienzan a separar de Israel a “toda la compañía mixta” (13:1-3)
Después de una prolongada ausencia, Nehemías regresa a Jerusalén y ve que la situación ha degenerado; limpia los comedores, ordena que se contribuya el diezmo para el sostenimiento de los levitas y cantores, obliga a que se guarde el sábado y censura a los que han contraído matrimonio con mujeres extranjeras (13:4-30)

1-7 de febrero de 2016
Nehemías 1 a 4

(NEHEMÍAS 1:1)

“Las palabras de Nehemías hijo de Hacalías: Ahora bien, aconteció en el mes de Kislev, en el año veinte, que yo mismo me hallaba en Susa el castillo.”

*** sgd pág. 64 19 El calendario hebreo ***
KISLEV noviembre—diciembre
25 Fiesta de la Dedicación
Aumentan las lluvias, hay heladas, y nieva en las montañas
Rebaños puestos a resguardo

*** w06 1/2 págs. 8-9 Puntos sobresalientes del libro de Nehemías ***
1:1; 2:1. ¿Se cuenta el “año veinte” al que hacen referencia estos dos versículos desde el mismo punto de referencia? Sí, se trata del año vigésimo del reinado de Artajerjes, aunque el sistema de cálculo utilizado en estos versículos varía. Las pruebas históricas señalan el 475 antes de nuestra era como el año en que Artajerjes ascendió al trono. Puesto que los escribas babilonios contaban los años de los reyes persas de nisán (marzo-abril) a nisán, el primer año de aquel monarca comenzó en nisán de 474; por lo tanto, el año veinte del que habla Nehemías 2:1 empezó en nisán de 455. El mes de kislev (noviembre-diciembre) mencionado en Nehemías 1:1 es, lógicamente, el del año anterior, el 456. Según Nehemías, ese mes también correspondió al año veinte del reinado de Artajerjes. Es probable que en este caso comenzara a contar desde la fecha en que el monarca heredó el trono, o que utilizara lo que los judíos llaman hoy el año civil, que comienza en el mes de tisri (septiembre-octubre). De cualquier modo, el año en que se emitió la orden de restaurar Jerusalén fue el 455 antes de nuestra era.

*** it-1 pág. 440 Castillo ***
“Susa el castillo”, situado a unos 360 Km. al E. de Babilonia, era una residencia temporal del rey persa, en la que Nehemías estuvo trabajando de copero real antes de partir hacia Jerusalén. (Ne 1:1.)

*** it-2 pág. 479 Nehemías, Libro de ***
Cuándo se escribió y tiempo que abarca. El mes de Kislev (noviembre-diciembre) de cierto año vigésimo es el punto de referencia con el que empieza la narración histórica. (Ne 1:1.) Según Nehemías 2:1, este año vigésimo debió ser el del reinado de Artajerjes. Obviamente, en este caso el año vigésimo no se calcula empezando en Nisán (marzo-abril), puesto que el Kislev del año vigésimo no podría entonces preceder a Nisán (mencionado en Ne 2:1) de ese mismo año. Por lo tanto, puede ser que Nehemías usase su propio cómputo de tiempo al calcular el año lunar, empezando con el mes de Tisri (septiembre-octubre), un mes que los judíos consideran, incluso en la actualidad, el primero de su año civil. Otra posibilidad es que se contase el reinado desde la misma fecha en que el monarca ascendía al trono. Esto pudo haber ocurrido así, aun a pesar de que los escribas babilonios continuaron, según su costumbre, contando los años del reinado de los reyes persas de Nisán a Nisán, como muestran sus tablillas cuneiformes.
Los datos históricos confiables y el cumplimiento de la profecía bíblica señalan que el mes de Nisán del año vigésimo del reinado de Artajerjes cayó en 455 a. E.C. (Véase PERSIA, PERSAS [Los reinados de Jerjes y Artajerjes].) Por consiguiente, el mes de Kislev que precedía al mes de Nisán de ese año vigésimo correspondía al año 456 a. E.C., y el año trigésimo segundo del reinado de Artajerjes (la última fecha mencionada en Nehemías [13:6]) incluiría parte del año 443 a. E.C. Por consiguiente, el libro de Nehemías abarca un período que va desde Kislev del año 456 a. E.C. hasta algún tiempo después del año 443 a. E.C.

*** it-2 págs. 1015-1016 Setenta semanas ***
No obstante, como prueba de que Nehemías pudo usar un calendario que iba de otoño a otoño en relación con ciertos acontecimientos, puede compararse Nehemías 1:1-3 con 2:1-8. En el primer pasaje se lee que recibió las malas noticias sobre el estado de Jerusalén en Kislev (tercer mes del calendario civil y noveno del sagrado) del año veinte de Artajerjes. En el segundo pasaje pide permiso al rey para ir a reedificar Jerusalén, y se le concede en el mes de Nisán (séptimo mes del calendario civil y primero del sagrado), pero aún en el año veinte de Artajerjes. De modo que es obvio que Nehemías no contó los años del reinado de Artajerjes de Nisán a Nisán.

*** w86 15/2 pág. 25 Triunfa la adoración verdadera ***
♦ 1:1—¿En qué año tuvieron lugar estos sucesos?
Fue en el año vigésimo del rey Artajerjes (Longimano) (2:1). Puesto que en esta narración primero se menciona el mes de Kislev (noviembre-diciembre) y luego el mes de Nisán (marzo-abril), parece que los reyes persas contaban cada año de su reinado de otoño a otoño, aunque también es posible que lo contaran desde el momento en que ascendían al trono. Tanto la evidencia histórica confiable como el cumplimiento de ciertas profecías bíblicas señalan que el mes de Nisán del año veinte de Artajerjes correspondió al del año 455 a. de la E.C. De modo que Nehemías comenzó su relato en el otoño de 456 a. de la E.C., y el decreto de reedificar el muro de Jerusalén se emitió en la primavera de 455 a. de la E.C.

(NEHEMÍAS 1:3)

“En conformidad, me dijeron: “Los que quedan, que han quedado del cautiverio, allí en el distrito jurisdiccional, están en una situación muy mala, y en oprobio; y el muro de Jerusalén está derribado, y sus mismísimas puertas han sido quemadas con fuego”.”

*** it-1 pág. 708 Distrito ***
Eran, al parecer, subdivisiones del “distrito jurisdiccional” o “provincia” de Judá bajo la administración persa. (Ne 1:3; MK, NM, Val.)

*** it-1 págs. 708-709 Distrito jurisdiccional ***
Quizás por haber vivido en el distrito jurisdiccional de Babilonia, a los judíos que volvieron del exilio se les llamó “hijos del distrito jurisdiccional”. (Esd 2:1; Ne 7:6.) O puede que esta designación haga alusión al hecho de que vivían en Judá, un distrito jurisdiccional medopersa. (Ne 1:3.)

(NEHEMÍAS 1:11)

“¡Ah!, Jehová, por favor, deja que tu oído se ponga atento a la oración de tu siervo y a la oración de tus siervos que se deleitan en temer tu nombre; y, por favor, otorga éxito a tu siervo hoy, sí, y hazlo objeto de piedad ante este hombre”. Ahora bien, yo mismo estaba de copero del rey.”

*** w10 1/7 pág. 9 ¿Lo sabía? ***
¿Qué significaba ser el copero del rey?
▪ El escritor bíblico Nehemías fue copero del rey persa Artajerjes (Nehemías 1:11). En los palacios del antiguo Oriente Medio, la persona que realizaba este trabajo no era un simple sirviente. De hecho, el copero era un funcionario de alto rango. Al examinar la literatura clásica y las muchas representaciones pictóricas en las que aparece la figura del copero, podemos llegar a ciertas conclusiones sobre la posición de Nehemías en la corte persa.
El copero tenía que ser un hombre en quien el monarca confiara totalmente, ya que antes de que le sirvieran el vino al rey, lo cataba para comprobar que no estuviera envenenado. Según el historiador Edwin M. Yamauchi, “las constantes conspiraciones dentro de la corte aqueménida [persa] hacían totalmente imprescindible contar con asistentes confiables”. Por lo general, el copero gozaba del favor especial del rey y tenía mucha influencia sobre este. Es posible que su contacto diario con el monarca le permitiera decidir quiénes podían obtener audiencia con él.
Seguramente fue gracias a su privilegiada posición que Nehemías obtuvo el permiso real para volver a Jerusalén a reconstruir las murallas. Sin duda, Artajerjes valoraba mucho a su copero y no quería prescindir de sus servicios durante mucho tiempo. Como señala The Anchor Bible Dictionary, ante la petición de Nehemías, “lo único que el rey le preguntó fue: ‘¿Cuándo volverás?’” (Nehemías 2:1-6).
[Ilustraciones de la página 9]
Relieve del palacio persa de Persépolis
[Ilustración]
(Para ver el texto en su formato original, consulte la publicación)
Copero
Jerjes, príncipe heredero
Darío el Grande
[Reconocimiento]
© The Bridgeman Art Library International

*** it-1 pág. 549 Copero ***
COPERO
Oficial de la corte real que servía el vino u otras bebidas al rey. (Gé 40:1, 2, 11; Ne 1:11; 2:1.) Uno de los deberes del copero principal era probar el vino antes de dárselo al monarca. Esta práctica se llevaba a cabo porque siempre cabía la posibilidad de que se atentara contra la vida del rey envenenando el vino.
Un requisito indispensable para ocupar este puesto era gozar de completa confianza, ya que la vida del rey estaba en juego. Su posición era una de las más honorables en la corte. El copero principal solía estar presente en las reuniones y en las conversaciones reales. Como su relación con el rey era estrecha y, por lo general, confidencial, a menudo tenía una influencia considerable sobre él. Fue el copero de Faraón quien recomendó a José. (Gé 41:9-13.) El rey Artajerjes de Persia tenía en alta estima a su copero Nehemías. (Ne 2:6-8.) Cuando este viajó a Jerusalén, Artajerjes le suministró una escolta militar. (Ne 2:9.)

(NEHEMÍAS 2:1)

“Y en el mes de Nisán, en el año veinte de Artajerjes el rey, aconteció que hubo vino delante de él, y yo como siempre alcé el vino y se lo di al rey. Pero yo nunca había estado triste delante de él.”

*** w06 1/2 págs. 8-9 Puntos sobresalientes del libro de Nehemías ***
1:1; 2:1. ¿Se cuenta el “año veinte” al que hacen referencia estos dos versículos desde el mismo punto de referencia? Sí, se trata del año vigésimo del reinado de Artajerjes, aunque el sistema de cálculo utilizado en estos versículos varía. Las pruebas históricas señalan el 475 antes de nuestra era como el año en que Artajerjes ascendió al trono. Puesto que los escribas babilonios contaban los años de los reyes persas de nisán (marzo-abril) a nisán, el primer año de aquel monarca comenzó en nisán de 474; por lo tanto, el año veinte del que habla Nehemías 2:1 empezó en nisán de 455. El mes de kislev (noviembre-diciembre) mencionado en Nehemías 1:1 es, lógicamente, el del año anterior, el 456. Según Nehemías, ese mes también correspondió al año veinte del reinado de Artajerjes. Es probable que en este caso comenzara a contar desde la fecha en que el monarca heredó el trono, o que utilizara lo que los judíos llaman hoy el año civil, que comienza en el mes de tisri (septiembre-octubre). De cualquier modo, el año en que se emitió la orden de restaurar Jerusalén fue el 455 antes de nuestra era.

*** dp cap. 11 pág. 197 Se revela el tiempo de la llegada del Mesías ***
[Ilustración y apartado de la página 197]
¿Cuándo comenzó el reinado de Artajerjes?
EL AÑO del ascenso al trono del rey persa Artajerjes es una cuestión debatida por los historiadores. Algunos sostienen que su reinado se inició en el año 465 a.E.C., debido a que su padre, Jerjes, subió al trono en 486 a.E.C. y murió en el vigésimo primer año de su mandato. No obstante, existen pruebas convincentes de que Artajerjes accedió al trono en 475 a.E.C. y de que su primer año reinante comenzó en 474 a.E.C.
Inscripciones y esculturas desenterradas en Persépolis, la antigua capital persa, indican que Jerjes y su padre, Darío I, fueron corregentes durante algún tiempo. Si esta corregencia duró diez años y Jerjes gobernó durante once años tras la muerte de Darío, acaecida en 486 a.E.C., entonces el primer año del reinado de Artajerjes sería el 474 a.E.C.
Una segunda línea argumental es la relativa al general ateniense Temístocles, que derrotó a las fuerzas de Jerjes en el año 480 a.E.C. y que posteriormente perdió el favor de los griegos y fue acusado de traición. Temístocles huyó y buscó asilo en la corte persa, donde se le dispensó una buena acogida. Según el historiador griego Tucídides, este hecho ocurrió cuando Artajerjes “reinaba desde hacía poco”. Otro cronista griego, Diodoro Sículo, fija la muerte de Temístocles en el año 471 a.E.C. Puesto que este solicitó un plazo de un año antes de comparecer ante el rey Artajerjes a fin de aprender el persa, tuvo que llegar a Asia Menor a más tardar en el año 473 a.E.C., fecha que Jerónimo confirma en su versión de la Crónica de Eusebio. En vista de que Artajerjes “reinaba desde hacía poco” cuando Temístocles llegó a Asia (en el año 473 a.E.C.), el erudito alemán Ernst Hengstenberg afirma en su obra Christology of the Old Testament que el reinado de Artajerjes comenzó en 474 a.E.C., y otras fuentes coinciden en ese dato. Dicho erudito añade: “El año vigésimo de Artajerjes es el año 455 antes de Cristo”.
[Ilustración]
Busto de Temístocles

*** it-1 pág. 216 Artajerjes ***
Durante el vigésimo año de su reinado (455 a. E.C.), Artajerjes Longimano otorgó permiso a Nehemías para regresar a Jerusalén con el fin de reedificar los muros y las puertas de la ciudad. (Ne 2:1-8.) Esta fecha es de singular importancia debido a que en Daniel 9:25 se relaciona el edicto supracitado con el cálculo del tiempo de la prometida venida del Mesías.

*** it-1 pág. 600 Cronología ***
La siguiente fecha de importancia fundamental es el vigésimo año de Artajerjes Longimano, el año en que Nehemías recibió permiso para reedificar Jerusalén. (Ne 2:1, 5-8.) Las razones por las que se favorece la fecha de 455 a. E.C. para este acontecimiento, con preferencia a la de 445 a. E.C. —que es más aceptada—, se analizan en el artículo PERSIA, PERSAS. Los sucesos de este año relacionados con la reconstrucción de Jerusalén y sus muros constituyen el punto de partida para la profecía de las “setenta semanas” de Daniel 9:24-27.

*** it-2 pág. 479 Nehemías, Libro de ***
Cuándo se escribió y tiempo que abarca. El mes de Kislev (noviembre-diciembre) de cierto año vigésimo es el punto de referencia con el que empieza la narración histórica. (Ne 1:1.) Según Nehemías 2:1, este año vigésimo debió ser el del reinado de Artajerjes. Obviamente, en este caso el año vigésimo no se calcula empezando en Nisán (marzo-abril), puesto que el Kislev del año vigésimo no podría entonces preceder a Nisán (mencionado en Ne 2:1) de ese mismo año. Por lo tanto, puede ser que Nehemías usase su propio cómputo de tiempo al calcular el año lunar, empezando con el mes de Tisri (septiembre-octubre), un mes que los judíos consideran, incluso en la actualidad, el primero de su año civil. Otra posibilidad es que se contase el reinado desde la misma fecha en que el monarca ascendía al trono. Esto pudo haber ocurrido así, aun a pesar de que los escribas babilonios continuaron, según su costumbre, contando los años del reinado de los reyes persas de Nisán a Nisán, como muestran sus tablillas cuneiformes.
Los datos históricos confiables y el cumplimiento de la profecía bíblica señalan que el mes de Nisán del año vigésimo del reinado de Artajerjes cayó en 455 a. E.C. (Véase PERSIA, PERSAS [Los reinados de Jerjes y Artajerjes].) Por consiguiente, el mes de Kislev que precedía al mes de Nisán de ese año vigésimo correspondía al año 456 a. E.C., y el año trigésimo segundo del reinado de Artajerjes (la última fecha mencionada en Nehemías [13:6]) incluiría parte del año 443 a. E.C. Por consiguiente, el libro de Nehemías abarca un período que va desde Kislev del año 456 a. E.C. hasta algún tiempo después del año 443 a. E.C.

*** it-2 págs. 1015-1016 Setenta semanas ***
¿Cuándo empezaron las “setenta semanas” proféticas?
Nehemías recibió el permiso del rey Artajerjes de Persia para reedificar el muro y la ciudad de Jerusalén en el mes de Nisán del vigésimo año de su reinado. (Ne 2:1, 5, 7, 8.) Nehemías al parecer utilizó un año que empezaba el mes de Tisri (septiembre-octubre), como el actual año judío civil, y terminaba el mes de Elul (agosto-septiembre) como el mes duodécimo. Se desconoce si lo hizo por iniciativa propia o si era la costumbre seguida en Persia para ciertos propósitos.
Puede que algunos objeten a lo antedicho y que se apoyen en Nehemías 7:73, donde dice que Israel se puso a morar en sus ciudades en el mes séptimo (contando el año de Nisán a Nisán). No obstante, Nehemías copió este dato del “libro del registro genealógico de los que subieron al principio” con Zorobabel, en 537 a. E.C. (Ne 7:5.) Nehemías vuelve a decir que en su día la fiesta de las cabañas se celebró en el séptimo mes. (Ne 8:9, 13-18.) No obstante, esto se debe a que el relato dice que hallaron el mandato de Jehová “escrito en la ley”, y esa ley decía en Levítico 23:39-43 que la fiesta de las cabañas tenía que celebrarse en el “séptimo mes” (es decir, del calendario sagrado, que iba de Nisán a Nisán).
No obstante, como prueba de que Nehemías pudo usar un calendario que iba de otoño a otoño en relación con ciertos acontecimientos, puede compararse Nehemías 1:1-3 con 2:1-8. En el primer pasaje se lee que recibió las malas noticias sobre el estado de Jerusalén en Kislev (tercer mes del calendario civil y noveno del sagrado) del año veinte de Artajerjes. En el segundo pasaje pide permiso al rey para ir a reedificar Jerusalén, y se le concede en el mes de Nisán (séptimo mes del calendario civil y primero del sagrado), pero aún en el año veinte de Artajerjes. De modo que es obvio que Nehemías no contó los años del reinado de Artajerjes de Nisán a Nisán.
Para fijar la fecha del año veinte de Artajerjes, tenemos que retroceder al final del reinado de su padre y predecesor, Jerjes, quien murió en la última parte del año 475 a. E.C. El año de ascenso de Artajerjes empezó, pues, en 475 a. E.C., y su primer año reinante debe contarse a partir de 474 a. E.C., como muestran otros datos históricos. Por lo tanto, el año veinte del reinado de Artajerjes correspondió a 455 a. E.C. (Véase PERSIA, PERSAS [Los reinados de Jerjes y Artajerjes].)

*** w90 15/10 pág. 10 párr. 2 Entendimiento de por qué había de venir el Mesías ***
Habían pasado precisamente 483 años desde que el rey persa Artajerjes había dado el mandato de reconstruir Jerusalén, en el año vigésimo de su reinado, 455 a.E.C.. (Nehemías 2:1-8.)

*** w86 15/1 pág. 7 “Puntos sobresalientes de la Biblia” que suministrarán mayor perspicacia ***
474-423 Artajerjes I Artajerjes Esdras 6:14;
(Longimano) 7:1-26;
Nehemías 2:1-18

(NEHEMÍAS 2:4)

“A su vez el rey me dijo: “¿Qué es esto que tratas de conseguir?”. Al instante oré al Dios de los cielos.”

*** w87 15/7 pág. 12 párr. 10 ¿Cuán significativas son sus oraciones? ***
Es verdad que puede haber ocasiones en que tengamos poco tiempo. Por ejemplo, cuando el rey Artajerjes preguntó a su copero, Nehemías: “¿Qué es esto que tratas de conseguir?”. Nehemías ‘al instante oró al Dios de los cielos’. (Nehemías 2:4.) Puesto que el rey esperaba una respuesta inmediata, Nehemías no podía dedicar mucho tiempo a aquella oración. Pero podemos estar seguros de que la oración fue significativa y vino del corazón, porque Jehová la contestó inmediatamente. (Nehemías 2:5, 6.)

*** w86 15/2 pág. 25 Triunfa la adoración verdadera ***
♦ 2:4—¿Fue esta una oración repentina debido a su desesperación?
No, pues la condición devastada de Jerusalén había sido tema de las oraciones de Nehemías “día y noche” por algún tiempo (1:4, 6). Cuando se le dio la oportunidad de hablar con el rey Artajerjes acerca de su deseo de reedificar los muros de Jerusalén, Nehemías volvió a orar, como tantas veces lo había hecho antes. La respuesta favorable de Jehová resultó en que recibiera la comisión de reedificar los muros de la ciudad.

(NEHEMÍAS 2:5)

“Después dije al rey: “Si al rey de veras le parece bien, y si tu siervo parece bueno ante ti, que me envíes a Judá, a la ciudad de las sepulturas de mis antepasados, para que la reedifique”.”

*** it-1 pág. 600 Cronología ***
La siguiente fecha de importancia fundamental es el vigésimo año de Artajerjes Longimano, el año en que Nehemías recibió permiso para reedificar Jerusalén. (Ne 2:1, 5-8.) Las razones por las que se favorece la fecha de 455 a. E.C. para este acontecimiento, con preferencia a la de 445 a. E.C. —que es más aceptada—, se analizan en el artículo PERSIA, PERSAS. Los sucesos de este año relacionados con la reconstrucción de Jerusalén y sus muros constituyen el punto de partida para la profecía de las “setenta semanas” de Daniel 9:24-27.

*** it-2 pág. 1016 Setenta semanas ***
En Nisán (marzo-abril) del año veinte del reinado de Artajerjes (455 a. E.C.), Nehemías le pidió al rey: “Si tu siervo parece bueno ante ti, que me envíes a Judá, a la ciudad de las sepulturas de mis antepasados, para que la reedifique”. (Ne 2:1, 5.)

(NEHEMÍAS 2:7)

“Y pasé a decir al rey: “Si al rey de veras le parece bien, que se me den cartas [dirigidas] a los gobernadores de más allá del Río, para que me dejen pasar hasta que llegue a Judá;”

*** it-1 pág. 728 Éber ***
La expresión hebrea ʽé•ver han•na•hár (más allá del Río) se usa a veces para referirse a la región situada al O. del Éufrates. (Ne 2:7, 9; 3:7.)

(NEHEMÍAS 2:8)

“también una carta [dirigida] a Asaf el guarda del parque que pertenece al rey, a fin de que me dé árboles para edificar con maderas las puertas del Castillo que pertenece a la casa, y para el muro de la ciudad y para la casa en que he de entrar”. De modo que el rey me [las] dio, conforme a la buena mano de mi Dios sobre mí.”

*** it-1 pág. 146 Antonia, Fortaleza ***
La Fortaleza Antonia estaba ubicada en el extremo NO. del patio del templo, probablemente en el mismo lugar donde tiempo atrás Nehemías había construido el castillo (o fortaleza) mencionado en Nehemías 2:8.

*** it-1 pág. 216 Artajerjes ***
Durante el vigésimo año de su reinado (455 a. E.C.), Artajerjes Longimano otorgó permiso a Nehemías para regresar a Jerusalén con el fin de reedificar los muros y las puertas de la ciudad. (Ne 2:1-8.) Esta fecha es de singular importancia debido a que en Daniel 9:25 se relaciona el edicto supracitado con el cálculo del tiempo de la prometida venida del Mesías.

*** it-1 pág. 223 Asaf ***
4. “El guarda del parque” que pertenecía al rey Artajerjes al tiempo del regreso de Nehemías a Jerusalén (455 a. E.C.). (Ne 2:8.) Este parque era una región boscosa, tal vez ubicada en el Líbano, que también se hallaba bajo el control del gobierno persa. Puede ser que con la referencia al nombre hebreo del guarda se quisiera indicar que, así como Nehemías había ocupado un puesto de relativa importancia como copero del rey, había otro judío en la corte a cargo de un puesto oficial. (Ne 1:11.)

*** it-1 pág. 440 Castillo ***
Nehemías construyó un castillo o fortaleza justo al NO. del templo reconstruido, el lado más vulnerable de la ciudad. (Ne 2:8; 7:2.) Por lo visto, los Macabeos levantaron otro castillo en el mismo lugar, más tarde reconstruido por Herodes el Grande y llamado Fortaleza Antonia. En este castillo el comandante militar romano interrogó a Pablo. (Hch 21:31, 32, 37; 22:24; véase ANTONIA, FORTALEZA.)

(NEHEMÍAS 2:13)

“Y procedí a salir de noche por la Puerta del Valle e [ir] enfrente de la Fuente de la Culebra Grande y a la Puerta de los Montones de Ceniza, y estuve constantemente examinando los muros de Jerusalén, cómo estaban derribados; y las puertas habían sido comidas por el fuego.”

*** it-1 pág. 876 Estiércol ***
Una de las puertas de Jerusalén era la “Puerta de los Montones de Ceniza”, llamada normalmente “Puerta del Estiércol”. (Ne 2:13; 3:13, 14; 12:31.) Estaba situada a mil codos (445 m.) al E. de la Puerta del Valle y, por lo tanto, al S. del monte Sión. Es probable que recibiese este nombre debido a los desperdicios que se amontonaban en el valle de Hinón, al que se salía por esta puerta; quizás también se sacara por ella la basura de la ciudad.

*** it-1 págs. 974-975 Fuente de la Culebra Grande ***
FUENTE DE LA CULEBRA GRANDE
La expresión hebrea transmite la idea de una fuente, manantial o pozo de un monstruo terrestre o marino, y se traduce de diversas maneras: “fuente del Dragón” (BAS, NC, Val), “fuente del Cocodrilo” (MK), “fuente del monstruo marino” (Mod, nota), “Fuente de la Culebra Grande” (NM). Sin embargo, la Versión de los Setenta griega lo traduce como “Fuente de las Higueras”.
Esta fuente de agua estaba situada en la ruta que Nehemías tomó en su primera inspección de los muros derruidos de Jerusalén. (Ne 2:12, 13.) Ya que no se vuelve a mencionar este nombre en las Escrituras, si se hace referencia a esta fuente o pozo en otro lugar, es con un nombre diferente. Se cree que En-roguel es otra designación de esta misma fuente. Probablemente sea así, porque aunque En-roguel está a una distancia considerable del valle de Cedrón, el relato solo dice que Nehemías pasó “en frente de la Fuente”, y eso podría aludir a la esquina del muro que miraba a En-roguel, que tenía la fuente a la vista, aunque a cierta distancia. (Véase EN-ROGUEL.)

*** it-2 pág. 760 Puerta, paso de entrada ***
Puerta del Valle. La Puerta del Valle, situada en la esquina sudoccidental del muro de la ciudad, también daba al valle de Hinón. Puede que la “puerta de los esenios” que menciona Josefo estuviera en ese mismo lugar o cerca. (La Guerra de los Judíos, libro V, cap. IV, sec. 2.) Cuando Uzías fortificó la ciudad, edificó una torre junto a la Puerta del Valle. (2Cr 26:9.) Nehemías salió de esta puerta para inspeccionar el muro dañado, cabalgó hacia el E. por el valle de Hinón, luego subió por el valle de Cedrón y finalmente volvió a entrar a la ciudad por la misma puerta. (Ne 2:13-15.)

*** it-2 pág. 760 Puerta, paso de entrada ***
Puerta de los Montones de Ceniza. A esta puerta también se la conoce como la Puerta de los Tiestos, aunque por lo general se la llama la Puerta del Estiércol. (Ne 2:13; 12:31.) Según el relato de Nehemías, estaba 1.000 codos (445 m.) al E. de la Puerta del Valle (Ne 3:13, 14),

(NEHEMÍAS 2:14)

“Y fui pasando hasta la Puerta de la Fuente y al Estanque del Rey, y no había lugar por donde el animal doméstico [que tenía] debajo de mí pudiera pasar.”

*** it-1 pág. 870 Estanque ***
Es posible que el “Estanque del Rey” estuviese entre la Puerta de los Montones de Ceniza y la Puerta de la Fuente. (Ne 2:13-15.) Quizás sea el estanque mencionado en Nehemías 3:16.

*** it-2 págs. 760-761 Puerta, paso de entrada ***
Puerta de la Fuente. Esta puerta se llamaba así porque daba acceso a un manantial o fuente cercano, posiblemente En-roguel, que estaba por debajo de la confluencia del valle de Cedrón con el valle de Hinón. Probablemente se hallaba en el extremo S. de la colina oriental de la ciudad (es decir, al S. de la “Ciudad de David”). (Ne 2:14; 3:15; 12:37.) Por la Puerta de la Fuente podían salir a En-roguel los que vivían en la Ciudad de David, mientras que la Puerta de los Montones de Ceniza, al SO., era la salida más conveniente para los residentes del valle de Tiropeón y de la colina sudoccidental de la ciudad.

(NEHEMÍAS 2:16)

“Y los gobernantes diputados mismos no supieron adónde había ido yo ni qué estaba haciendo; y a los judíos y a los sacerdotes y a los nobles y a los gobernantes diputados y a los demás hacedores del trabajo yo todavía no había informado cosa alguna.”

*** it-1 pág. 1023 Gobernantes diputados ***
GOBERNANTES DIPUTADOS
Esta expresión, de la forma plural hebrea segha•ním, aparece diecisiete veces en la Biblia, como, por ejemplo, en Esdras 9:2; Nehemías 2:16; Isaías 41:25; Jeremías 51:23 y Ezequiel 23:6. Se emplea con referencia a gobernantes subordinados u oficiales de poca importancia, a diferencia de nobles, príncipes y gobernadores. También se ha traducido “oficiales” (BAS, Val), aunque no de manera uniforme.

(NEHEMÍAS 2:17)

“Finalmente les dije: “Ustedes están viendo la mala situación en que estamos, cómo Jerusalén está devastada y sus puertas han sido quemadas con fuego. Vengan y reedifiquemos el muro de Jerusalén, para que ya no continuemos siendo un oprobio”.”

*** it-2 pág. 1016 Setenta semanas ***
El rey le dio permiso, y Nehemías realizó el largo viaje de Susa a Jerusalén. Alrededor del 4 de Ab (julio-agosto), después de hacer una inspección nocturna de los muros, Nehemías ordenó a los judíos: “Vengan y reedifiquemos el muro de Jerusalén, para que ya no continuemos siendo un oprobio”. (Ne 2:11-18.) De modo que Nehemías llevó a efecto aquel mismo año ‘la palabra que salió’ de la boca de Artajerjes para reedificar Jerusalén. Esto prueba claramente que las setenta semanas empezaron a contar a partir del año 455 a. E.C.

(NEHEMÍAS 2:19)

“Ahora bien, cuando Sanbalat el horonita y Tobías el siervo, el ammonita, y Guésem el árabe oyeron de ello, empezaron a escarnecernos y a mirarnos con desprecio y a decir: “¿Qué es esta cosa que ustedes están haciendo? ¿Contra el rey se están rebelando?”.”

*** it-1 pág. 167 Arabia ***
Durante el siglo V a. E.C. Palestina estuvo sujeta a una considerable influencia de Arabia, como se ve por las referencias a “Guésem el árabe” en Nehemías 2:19 y 6:1-7.

*** it-2 pág. 770 Quedar ***
Un tazón de plata (fechado del siglo V a. E.C.) hallado en Tell el-Maskhuta (Egipto) lleva la inscripción aramea: “Qanu el hijo de Guésem, el rey de Quedar”. El Guésem que se menciona en este caso puede ser “Guésem el árabe”, quien se opuso a la obra de reedificar el muro de Jerusalén en los días de Nehemías. (Ne 2:19; 6:1, 2, 6.)

*** it-2 pág. 1139 Tobías ***
2. Opositor de Nehemías. Tobías era “el siervo”, probablemente algún oficial, del rey persa. (Ne 2:19.)

(NEHEMÍAS 3:1)

“Y Eliasib el sumo sacerdote y sus hermanos, los sacerdotes, procedieron a levantarse y a edificar la Puerta de las Ovejas. Ellos mismos la santificaron y se pusieron a colocar sus hojas; y hasta la Torre de Meah la santificaron, hasta la Torre de Hananel.”

*** it-1 pág. 350 Betzata ***
La ubicación del estanque se determina por la clara referencia a la “Puerta de las Ovejas” (aunque en el griego original la palabra “puerta” tiene que añadirse). Por lo general se ha ubicado esta puerta en la parte septentrional de Jerusalén. Nehemías 3:1 muestra que fueron los sacerdotes quienes construyeron dicha puerta, de lo que se deduce que era una entrada cercana al recinto del templo.

*** it-2 pág. 758 Puerta, paso de entrada ***
Puerta de las Ovejas. El sumo sacerdote Eliasib y los sacerdotes que estaban con él reedificaron La Puerta de las Ovejas (Ne 3:1, 32; 12:39), lo que parece indicar que estaba cerca del recinto del templo. Probablemente estaba ubicada en el muro del segundo barrio, en la parte que Manasés edificó (véase a continuación “Puerta del Pescado”), cerca o en la misma esquina nororiental de la ciudad. Su nombre tal vez se debía a que se pasaba por ella con las ovejas y las cabras que se llevaban al sacrificio, o quizás a algún mercado cercano. La “puerta de las ovejas” mencionada en Juan 5:2 probablemente fuera esta misma o una posterior construida en el mismo lugar, cerca del estanque de Betzata.

*** it-2 pág. 1145 Torre ***
hacia el E., cerca de ella y de la Puerta de las Ovejas, la Torre de Meah. Tampoco se sabe por qué se llamaba Meah, que significa “Centenar”. (Ne 3:1; 12:39.)

(NEHEMÍAS 3:3)

“Y la Puerta del Pescado fue lo que los hijos de Hasenaá edificaron; ellos mismos la enmaderaron y entonces colocaron sus hojas, sus cerrojos y sus barras.”

*** it-2 pág. 757 Puerta, paso de entrada ***
Allí estaban ubicados los mercados, y algunas de las puertas de Jerusalén debieron recibir el nombre de las mercancías que se vendían cerca de ellas, como, por ejemplo, la Puerta del Pescado. (Ne 3:3.)

*** it-2 pág. 759 Puerta, paso de entrada ***
El relato de Nehemías sobre la reconstrucción del muro y la marcha inaugural sitúa la Puerta del Pescado al O. de la Puerta de las Ovejas, probablemente cerca del extremo N. del valle de Tiropeón. (Ne 3:3; 12:39.)

(NEHEMÍAS 3:5)

“Y al lado de ellos los teqoítas hicieron trabajo de reparaciones; pero sus majestuosos mismos no pusieron su cerviz al servicio de sus amos.”

*** w06 1/2 págs. 9-10 Puntos sobresalientes del libro de Nehemías ***
3:5, 27. No debemos considerar degradante el trabajo manual que se realiza en favor de la adoración verdadera, como hicieron los “majestuosos” de los teqoítas; más bien, debemos imitar a los teqoítas comunes que trabajaron con gusto.

*** w86 15/2 pág. 25 Triunfa la adoración verdadera ***
♦ 3:5—¿Quiénes fueron los “majestuosos”?
Eran judíos prominentes de entre los habitantes o anteriores residentes de Teqoa, una ciudad ubicada a unos 16 kilómetros (10 millas) al sur de Jerusalén. Probablemente estos “majestuosos” eran muy orgullosos para humillarse bajo el mando de los superintendentes que Nehemías había nombrado. (Compárese con Jeremías 27:11.)

(NEHEMÍAS 3:6)

“Y la Puerta de la [Ciudad] Vieja fue lo que Joiadá hijo de Paséah y Mesulam hijo de Besodeya repararon; ellos mismos la enmaderaron, y entonces colocaron sus hojas y sus cerrojos y sus barras.”

*** it-2 págs. 759-760 Puerta, paso de entrada ***
Puerta de la Ciudad Vieja. La Puerta de la Ciudad Vieja estaba situada en el lado noroccidental de la ciudad, entre la Puerta del Pescado y la Puerta de Efraín. (Ne 3:6; 12:39.) En hebreo su nombre es solo “Puerta de la Vieja”, al que algunos traductores añaden la palabra “ciudad”. Se cree que se llamaba así por haber sido la entrada principal a la ciudad vieja desde el N. Debió estar en la unión del Muro Ancho (el límite septentrional de la ciudad vieja) con el muro occidental del segundo barrio. Algunos comentaristas creen que esta puerta es aquella a la que Zacarías llama “Primera Puerta” en un comentario, al parecer, alusivo a los límites oriental y occidental de la ciudad, en el que menciona las puertas que había “desde [1] la Puerta de Benjamín hasta el mismo lugar de [2] la Primera Puerta, hasta la misma [3] Puerta de la Esquina”, y de ahí hacia los límites septentrional y meridional “desde la Torre de Hananel hasta las mismas tinas de lagar del rey”. (Zac 14:10.) Otros relacionan la Puerta de la Ciudad Vieja con la “Puerta del Medio” mencionada en Jeremías 39:3. Hay quien llama a la Puerta de la Ciudad Vieja “puerta Mishneh”, y la ubica en el muro occidental del segundo barrio.

(NEHEMÍAS 3:9)

“Y al lado de ellos Refayá hijo de Hur, un príncipe de la mitad del distrito de Jerusalén, hizo trabajo de reparaciones.”

*** it-1 pág. 708 Distrito ***
DISTRITO
Unidad administrativa, determinada zona de una ciudad o demarcación territorial.
Cuando Nehemías organizó la reconstrucción de los muros de Jerusalén, asignó porciones a los cabezas o príncipes y a los habitantes de ciertos ‘distritos’. Estos distritos tenían el nombre de la ciudad principal de la demarcación, y algunos (Jerusalén, Bet-zur, Queilá) estaban divididos en dos secciones. (Ne 3:9, 12, 14-18.) Eran, al parecer, subdivisiones del “distrito jurisdiccional” o “provincia” de Judá bajo la administración persa. (Ne 1:3; MK, NM, Val.) Se cree que la palabra hebrea con la que se designaban estos distritos (pé•lekj) se deriva de la voz acádica pilku, lo que parece indicar que fueron los babilonios quienes crearon estas demarcaciones después de la caída de Jerusalén. (Véase DISTRITO JURISDICCIONAL.)

(NEHEMÍAS 3:11)

“Otra sección medida fue lo que Malkiya hijo de Harim y Hasub hijo de Pahat-moab repararon, y también la Torre de los Hornos de Cocer.”

*** it-1 pág. 1176 Horno ***
“La Torre de los Hornos de Cocer” de Jerusalén se reparó bajo la dirección de Nehemías durante la restauración de los muros de la ciudad. (Ne 3:11; 12:38.) El origen del nombre es incierto, pero se ha comentado que la torre se llamó así debido a que en sus cercanías había hornos comerciales.

*** it-2 pág. 593 Panadero ***
Años más tarde, cuando se reedificaron los muros de Jerusalén bajo la supervisión de Nehemías, también se reparó “la Torre de los Hornos de Cocer”. (Ne 3:11; 12:38.) No se sabe exactamente la razón de que la torre recibiera ese nombre tan poco común, pero es posible que se debiera a que allí estaban situados los hornos de los panaderos.

*** it-2 pág. 760 Puerta, paso de entrada ***
Uzías edificó una torre junto a esta puerta, aunque no se especifica si era la Torre de los Hornos de Cocer. (2Cr 26:9.) Tanto Jeremías como Zacarías parece que sitúan la Puerta de la Esquina en el límite occidental de la ciudad. (Jer 31:38; Zac 14:10.)
No se menciona ninguna otra puerta en el muro occidental, entre la Puerta de la Esquina y la Puerta del Valle, que se hallaba en el muro SO., sin duda debido a la escarpada pendiente del valle de Hinón, que hacía impracticable esa sección de la muralla. La Puerta de la Esquina no se menciona en el relato de Nehemías, y puede ser que también se deba a que apenas necesitó reparaciones. Sin embargo, sí menciona que se restauró la Torre de los Hornos de Cocer, que al parecer era parte de la Puerta de la Esquina o se hallaba cerca de esta. (Ne 3:11.)

*** it-2 pág. 1145 Torre ***
Las torres de Jerusalén. La Torre de los Hornos de Cocer estaba situada en el extremo NO. de la ciudad, cerca o al lado de la Puerta de la Esquina. (Ne 3:11; 12:38.) No se sabe con seguridad por qué se le dio ese nombre, pero es muy posible que se deba a que los panaderos estaban por aquellos alrededores. Puede que haya sido una de las torres que Uzías edificó durante su reinado en Jerusalén, de 829 a 778 a. E.C. (2Cr 26:9.)

(NEHEMÍAS 3:13)

“La Puerta del Valle fue lo que Hanún y los habitantes de Zanóah repararon; ellos mismos la edificaron y entonces colocaron sus hojas, sus cerrojos y sus barras, también mil codos en el muro hasta la Puerta de los Montones de Ceniza.”

*** it-1 pág. 876 Estiércol ***
Una de las puertas de Jerusalén era la “Puerta de los Montones de Ceniza”, llamada normalmente “Puerta del Estiércol”. (Ne 2:13; 3:13, 14; 12:31.) Estaba situada a mil codos (445 m.) al E. de la Puerta del Valle y, por lo tanto, al S. del monte Sión. Es probable que recibiese este nombre debido a los desperdicios que se amontonaban en el valle de Hinón, al que se salía por esta puerta; quizás también se sacara por ella la basura de la ciudad.

*** it-2 pág. 760 Puerta, paso de entrada ***
Puerta de los Montones de Ceniza. A esta puerta también se la conoce como la Puerta de los Tiestos, aunque por lo general se la llama la Puerta del Estiércol. (Ne 2:13; 12:31.) Según el relato de Nehemías, estaba 1.000 codos (445 m.) al E. de la Puerta del Valle (Ne 3:13, 14),

(NEHEMÍAS 3:14)

“Y la Puerta de los Montones de Ceniza fue lo que Malkiya hijo de Recab, un príncipe del distrito de Bet-hakerem, reparó; él mismo se puso a edificarla y a colocar sus hojas, sus cerrojos y sus barras.”

*** jr cap. 13 pág. 160 párr. 13 “Jehová ha hecho lo que tenía pensado” ***
Por la fidelidad de los recabitas a Jehová y a los mandatos de su padre, Dios dijo que sobrevivirían a la caída de Jerusalén. Y fue cierto. La posterior mención de “Malkiya hijo de Recab”, quien colaboró en la reconstrucción de Jerusalén durante el mandato del gobernador Nehemías, puede ser prueba de ello (Neh. 3:14; Jer. 35:18, 19).

*** it-1 pág. 708 Distrito ***
DISTRITO
Unidad administrativa, determinada zona de una ciudad o demarcación territorial.
Cuando Nehemías organizó la reconstrucción de los muros de Jerusalén, asignó porciones a los cabezas o príncipes y a los habitantes de ciertos ‘distritos’. Estos distritos tenían el nombre de la ciudad principal de la demarcación, y algunos (Jerusalén, Bet-zur, Queilá) estaban divididos en dos secciones. (Ne 3:9, 12, 14-18.) Eran, al parecer, subdivisiones del “distrito jurisdiccional” o “provincia” de Judá bajo la administración persa. (Ne 1:3; MK, NM, Val.) Se cree que la palabra hebrea con la que se designaban estos distritos (pé•lekj) se deriva de la voz acádica pilku, lo que parece indicar que fueron los babilonios quienes crearon estas demarcaciones después de la caída de Jerusalén. (Véase DISTRITO JURISDICCIONAL.)

*** it-1 pág. 876 Estiércol ***
Una de las puertas de Jerusalén era la “Puerta de los Montones de Ceniza”, llamada normalmente “Puerta del Estiércol”. (Ne 2:13; 3:13, 14; 12:31.) Estaba situada a mil codos (445 m.) al E. de la Puerta del Valle y, por lo tanto, al S. del monte Sión. Es probable que recibiese este nombre debido a los desperdicios que se amontonaban en el valle de Hinón, al que se salía por esta puerta; quizás también se sacara por ella la basura de la ciudad.

*** it-2 pág. 760 Puerta, paso de entrada ***
Puerta de los Montones de Ceniza. A esta puerta también se la conoce como la Puerta de los Tiestos, aunque por lo general se la llama la Puerta del Estiércol. (Ne 2:13; 12:31.) Según el relato de Nehemías, estaba 1.000 codos (445 m.) al E. de la Puerta del Valle (Ne 3:13, 14),

*** it-2 pág. 793 Recab ***
3. Padre o antepasado de Malkiya, quien colaboró con Nehemías en la reparación de una puerta del muro de Jerusalén. (Ne 3:14.) Si se trata del mismo Recab que el núm. 2, la presencia de Malkiya confirma el cumplimiento de la promesa que Jehová hizo a los recabitas y que aparece registrada en Jeremías 35:19.

*** it-2 pág. 793 Recabitas ***
A Jehová le complació la obediencia respetuosa que mostraron. Su inquebrantable obediencia a un padre terrestre contrastaba con la desobediencia de los judaítas a su Creador. (Jer 35:12-16.) Dios dio a los recabitas la alentadora promesa: “No será cortado de Jonadab hijo de Recab un hombre que siempre esté de pie delante de mí”. (Jer 35:19.)
Después del exilio, durante la gobernación de Nehemías, “Malkiya hijo de Recab” reparó la Puerta de los Montones de Ceniza. Si se trataba del mismo Recab que fue padre o antepasado de Jehonadab, los recabitas sobrevivieron al exilio y regresaron al país. (Ne 3:14.)

(NEHEMÍAS 3:15)

“Y la Puerta de la Fuente fue lo que Salún hijo de Colhozé, un príncipe del distrito de Mizpá, reparó; él mismo procedió a edificarla y techarla y colocar sus hojas, sus cerrojos y sus barras, y también el muro del Estanque del Canal hasta el Jardín del Rey, y llegando hasta la Escalera que baja de la Ciudad de David.”

*** it-1 pág. 870 Estanque del Canal ***
ESTANQUE DEL CANAL
Estanque o embalse de agua que al parecer se encontraba al S. de la Ciudad de David, donde se juntan el valle de Hinón y el valle central de Tiropeón. (Ne 3:15.) Parece ser que también se le llamaba “estanque inferior”. (Isa 22:9.)
En Nehemías 3:15 el texto masorético lo llama “Estanque de Selá”. Algunos eruditos creen que “Selá” debería corregirse a “Siloé”, que significa “El Que Envía” y que aplica a un canal o conducto que envía agua a un estanque. (Isa 8:6.) Así, aunque algunas versiones de la Biblia dejan la expresión sin traducir, la Biblia de Jerusalén la traduce “alberca del canal” y la Traducción del Nuevo Mundo y la versión Levoratti-Trusso leen “Estanque del Canal”.
Se han hallado restos de un canal que iba hacia el S. desde la fuente de Guihón, bordeando las laderas del Cedrón y terminando en un antiguo embalse que en la actualidad se llama Birket el-Hamra. Algunas secciones del canal estaban cubiertas con losas de piedra, pero parece que había aberturas para sacar el agua a fin de regar ciertas partes del valle. Tal vez se haga referencia a la pendiente gradual de este canal con las palabras “las aguas del Siloé, que están yendo apaciblemente”. (Isa 8:6.) La ubicación de Birket el-Hamra encaja con la descripción que hace Nehemías del Estanque del Canal, que estaba cerca del Jardín del Rey y de la Escalera que baja desde el extremo S. de la Ciudad de David.

*** it-1 pág. 870 Estanque ***
Las referencias bíblicas al “estanque viejo” (Isa 22:11), “estanque superior” (2Re 18:17; Isa 7:3; 36:2) y “estanque inferior” (Isa 22:9) no dan ninguna indicación acerca de su posición exacta con relación a la ciudad de Jerusalén. Por lo general los eruditos creen que el “estanque inferior” (quizás el “Estanque del Canal” mencionado en Ne 3:15) puede identificarse con Birket el-Hamra, en el extremo meridional del valle de Tiropeón. Hay menos consenso en cuanto al emplazamiento del “estanque superior”. (Véase ESTANQUE DEL CANAL.)

*** it-2 pág. 17 Jardín ***
El jardín del Rey, situado cerca del lugar por donde Sedequías y sus hombres intentaron escapar de Jerusalén durante el sitio caldeo, probablemente estaba situado junto a la parte exterior del muro sudoriental de aquella ciudad. (2Re 25:4; Ne 3:15.)

*** it-2 págs. 760-761 Puerta, paso de entrada ***
Puerta de la Fuente. Esta puerta se llamaba así porque daba acceso a un manantial o fuente cercano, posiblemente En-roguel, que estaba por debajo de la confluencia del valle de Cedrón con el valle de Hinón. Probablemente se hallaba en el extremo S. de la colina oriental de la ciudad (es decir, al S. de la “Ciudad de David”). (Ne 2:14; 3:15; 12:37.) Por la Puerta de la Fuente podían salir a En-roguel los que vivían en la Ciudad de David, mientras que la Puerta de los Montones de Ceniza, al SO., era la salida más conveniente para los residentes del valle de Tiropeón y de la colina sudoccidental de la ciudad.

(NEHEMÍAS 3:16)

“Después de él, Nehemías hijo de Azbuq, un príncipe de la mitad del distrito de Bet-zur, hizo trabajo de reparaciones hasta enfrente de las Sepulturas de David y hasta el estanque que se había hecho y hasta la Casa de los Poderosos.”

*** it-1 pág. 870 Estanque ***
Es posible que el “Estanque del Rey” estuviese entre la Puerta de los Montones de Ceniza y la Puerta de la Fuente. (Ne 2:13-15.) Quizás sea el estanque mencionado en Nehemías 3:16.

*** it-2 pág. 1008 Sepultura ***
No se ha determinado el emplazamiento de estas sepulturas reales. Basándose en la referencia a “las Sepulturas de David”, en Nehemías 3:16, y en la alusión a “la subida a las sepulturas de los hijos de David”, en 2 Crónicas 32:33, hay quien cree que su ubicación más probable es la colina sudoriental de la ciudad, cerca del valle de Cedrón. En esa zona se han hallado lo que parecen ser tumbas subterráneas labradas en la roca, con conductos rectangulares que penetran hacia el interior. No obstante, no pueden identificarse con certeza, y cualquier intento de hacerlo se ve complicado, no solo por la destrucción que sufrió la ciudad en los años 70 E.C. y 135 E.C., sino porque los romanos utilizaron la sección meridional de la ciudad como cantera. Por ello, las tumbas mencionadas se hallan muy deterioradas.

(NEHEMÍAS 3:26)

“Y los netineos mismos se hallaban como moradores de Ofel; [ellos hicieron trabajo de reparaciones] hasta enfrente de la Puerta del Agua al oriente y la torre saliente.”

*** it-2 pág. 761 Puerta, paso de entrada ***
Puerta del Agua. El nombre de esta puerta puede haberse derivado de su proximidad o al menos su acceso al manantial de Guihón, que estaba hacia la mitad del lado oriental de la ciudad. Se hallaba cerca de Ofel, no lejos del recinto del templo. (Ne 3:26.)

(NEHEMÍAS 3:28)

“Más arriba de la Puerta de los Caballos los sacerdotes hicieron trabajo de reparaciones, cada uno enfrente de su propia casa.”

*** it-2 pág. 761 Puerta, paso de entrada ***
Puerta de los Caballos. “Más arriba de la Puerta de los Caballos los sacerdotes hicieron trabajo de reparaciones”, lo que implica que estaba ubicada cerca del templo. (Ne 3:28.)

(NEHEMÍAS 3:29)

“Después de ellos, Sadoc hijo de Imer hizo trabajo de reparaciones enfrente de su propia casa. Y después de él, Semaya hijo de Secanías, el guarda de la Puerta Oriental, hizo trabajo de reparaciones.”

*** it-2 pág. 762 Puerta, paso de entrada ***
Puertas del templo. Puerta Oriental. El relato de la reconstrucción que efectuó Nehemías dice que el guarda de la Puerta Oriental participó en el “trabajo de reparaciones”. (Ne 3:29.) De manera que no se considera que la Puerta Oriental fuera una puerta del muro de Jerusalén, como algunos han pensado. Puede que haya estado más o menos enfrente de la Puerta de la Inspección. Debía ser la puerta a la que en 1 Crónicas 9:18 se llama “la puerta del rey hacia el oriente”, y por ella el rey entraba y salía del templo.

(NEHEMÍAS 3:31)

“Después de él, Malkiya, miembro del gremio de los orfebres, hizo trabajo de reparaciones hasta la casa de los netineos y de los comerciantes, enfrente de la Puerta de la Inspección y hasta la cámara del techo de la esquina.”

*** it-2 pág. 761 Puerta, paso de entrada ***
Puerta de la Inspección. Hay quien llama a la Puerta de la Inspección (heb. ham•mif•qádh) la “puerta de las Revistas”. (Ne 3:31, DK.) En Ezequiel 43:21 se traduce mif•qádh (la misma palabra hebrea sin el artículo ha) por “lugar señalado”. Se cree que se trataba de la Puerta de la Guardia. El que Nehemías la haya mencionado en el relato sobre la reedificación parecería respaldar la idea de que se hallaba en el muro oriental de la ciudad, frente al recinto del templo y al N. de la Puerta de los Caballos. (Ne 3:27-31.) La referencia de Nehemías a la existencia de un ángulo en la muralla pasada la Puerta de la Inspección, contribuye a situar esta puerta en el muro oriental, al S. del punto donde la muralla gira (seguramente en dirección NO.).
El relato indica que las obras de reparación se efectuaron “enfrente de la Puerta de la Inspección”. Se ha interpretado que este comentario indica que se hicieron obras de reparación en el muro de la ciudad enfrente de una puerta del templo que tenía este nombre, pero esta no parece ser una interpretación acertada, porque la misma expresión se usa con respecto a la Puerta del Agua, y se reconoce que esta se hallaba en la muralla de la ciudad. (Ne 3:26, 31.) Si la Puerta de la Inspección no se menciona en el relato de la procesión, seguramente es debido a que esta no pasó por la muralla que quedaba al E. del templo.

(NEHEMÍAS 3:32)

“Y entre la cámara del techo de la esquina y la Puerta de las Ovejas los orfebres y los comerciantes hicieron trabajo de reparaciones.”

*** it-2 pág. 758 Puerta, paso de entrada ***
Puerta de las Ovejas. El sumo sacerdote Eliasib y los sacerdotes que estaban con él reedificaron La Puerta de las Ovejas (Ne 3:1, 32; 12:39), lo que parece indicar que estaba cerca del recinto del templo. Probablemente estaba ubicada en el muro del segundo barrio, en la parte que Manasés edificó (véase a continuación “Puerta del Pescado”), cerca o en la misma esquina nororiental de la ciudad. Su nombre tal vez se debía a que se pasaba por ella con las ovejas y las cabras que se llevaban al sacrificio, o quizás a algún mercado cercano. La “puerta de las ovejas” mencionada en Juan 5:2 probablemente fuera esta misma o una posterior construida en el mismo lugar, cerca del estanque de Betzata.

(NEHEMÍAS 4:1)

“Ahora bien, aconteció que, tan pronto como Sanbalat oyó que estábamos reedificando el muro, se encolerizó y se ofendió sumamente, y siguió escarneciendo a los judíos.”

*** it-1 pág. 778 Egipto, egipcio ***
Debido a este hecho, hubo una colonia judía en Elefantina (Yeb, en egipcio), isla del Nilo cercana a Asuán, a unos 690 Km. al S. de El Cairo. Un valioso hallazgo de papiros revela las condiciones existentes en ese lugar durante el siglo V a. E.C., cuando Esdras y Nehemías cumplían con su comisión en Jerusalén. Estos documentos, escritos en arameo, contienen el nombre de Sanbalat de Samaria (Ne 4:1, 2)

(NEHEMÍAS 4:17)

“En cuanto a los edificadores en el muro y los que llevaban la carga de cargadores, [cada] uno estaba activo en la obra con una mano, mientras la otra [mano] tenía asido el proyectil.”

*** w06 1/2 pág. 9 Puntos sobresalientes del libro de Nehemías ***
4:17, 18. ¿Cómo podía un hombre trabajar en la reconstrucción con una sola mano? Para los que cargaban materiales, esto no representaría ningún problema. Una vez puesta la carga sobre la cabeza o los hombros, podrían sujetarla fácilmente con una mano “mientras la otra mano tenía asido el proyectil”. Los constructores, que necesitaban ambas manos para trabajar, “estaban ceñidos, cada cual con su espada sobre la cadera, mientras edificaban”. Todos estaban listos para repeler en cualquier momento un ataque del enemigo.

*** w86 15/2 pág. 25 Triunfa la adoración verdadera ***
♦ 4:17—¿En qué sentido trabajaron con una sola mano?
Los albañiles tendrían que utilizar ambas manos a fin de efectuar su trabajo. Por eso llevaban las armas en la cadera (4:18). Los que llevaban las cargas podían fácilmente sostener una espada en la mano y a la vez cargar receptáculos de tierra o escombros sobre el hombro o la cabeza. (Génesis 24:15, 45.)

(NEHEMÍAS 4:18)

“Y los edificadores estaban ceñidos, cada cual con su espada sobre la cadera, mientras edificaban; y el que había de tocar el cuerno estaba a mi lado.”

*** w06 1/2 pág. 9 Puntos sobresalientes del libro de Nehemías ***
4:17, 18. ¿Cómo podía un hombre trabajar en la reconstrucción con una sola mano? Para los que cargaban materiales, esto no representaría ningún problema. Una vez puesta la carga sobre la cabeza o los hombros, podrían sujetarla fácilmente con una mano “mientras la otra mano tenía asido el proyectil”. Los constructores, que necesitaban ambas manos para trabajar, “estaban ceñidos, cada cual con su espada sobre la cadera, mientras edificaban”. Todos estaban listos para repeler en cualquier momento un ataque del enemigo.

8-14 de febrero de 2016
Nehemías 5 a 8

(NEHEMÍAS 5:7)

“De modo que mi corazón se dio a consideración dentro de mí, y empecé a señalar faltas a los nobles y a los gobernantes diputados, y pasé a decirles: “Usura es lo que ustedes están exigiendo, cada uno de su propio hermano”. Además, hice los arreglos para una gran asamblea a causa de ellos.”

*** w06 1/2 pág. 9 Puntos sobresalientes del libro de Nehemías ***
5:7. ¿En qué sentido empezó Nehemías “a señalar faltas a los nobles y a los gobernantes diputados”? Estos hombres estaban prestando con usura a sus hermanos judíos en contra de lo dispuesto en la Ley mosaica (Levítico 25:36; Deuteronomio 23:19). El interés que exigían era muy alto. Si se pagaba mensualmente, “la centésima” equivaldría al 12% anual (Nehemías 5:11). Era una crueldad imponer semejante carga al pueblo, que ya de por sí estaba agobiado por los impuestos y la escasez de alimentos. Nehemías les ‘señaló sus faltas’ a los ricos al emplear la Ley de Dios para reprenderlos con severidad y denunciar su mal proceder.

*** w86 15/2 pág. 25 Triunfa la adoración verdadera ***
♦ 5:7—¿Por qué estaba mal la usura?
Era una violación directa de la ley de Jehová. (Levítico 25:36; Deuteronomio 23:19.) “La centésima”, si se cobraba mensualmente, ascendería a un 12% al año (5:11). El pueblo ya estaba en un terrible aprieto debido a la escasez de alimento y a la elevada tributación persa (5:3, 4). Y aún así, los ricos cobraban despiadadamente altos intereses de sus hermanos pobres.

(NEHEMÍAS 5:11)

“Por favor, restitúyanles hoy mismo sus campos, sus viñas, sus olivares y sus casas, y la centésima del dinero y del grano, del vino nuevo y del aceite que ustedes les están exigiendo como interés”.”

*** it-1 pág. 281 Banco, banquero ***
A algunos de los israelitas que regresaron de Babilonia a la tierra de Judá se les condenó por sus exigencias bancarias a sus hermanos necesitados, pues requerían como avales sus casas, tierras, viñas e incluso sus hijos, y aplicaban un interés del 12% anual (un 1% mensual). Como consecuencia, los deudores que no podían pagar debido a insolvencia sufrían la pérdida de sus propiedades. (Ne 5:1-11.)

(NEHEMÍAS 5:13)

“También, sacudí mi seno y entonces dije: “De esta manera sacuda el Dios [verdadero] de su casa y de su propiedad adquirida a todo hombre que no ponga por obra esta palabra; y de esta manera quede sacudido y vacío”. A esto toda la congregación dijo: “¡Amén!”. Y se pusieron a alabar a Jehová. Y el pueblo procedió a hacer conforme a esta palabra.”

*** it-2 pág. 691 Posturas y ademanes ***
Cuando Nehemías sacudió su “seno”, es decir, el seno de su prenda de vestir, dio a entender que Dios iba a rechazar a quien no obrara de acuerdo con su palabra. (Ne 5:13.)

(NEHEMÍAS 6:1)

“Ahora bien, aconteció que, tan pronto como se informó a Sanbalat y Tobías y a Guésem el árabe y a los demás de nuestros enemigos que yo había reedificado el muro y que no había quedado en él brecha alguna (aunque hasta ese tiempo yo no había colocado las hojas mismas en las puertas),”

*** it-2 pág. 770 Quedar ***
Un tazón de plata (fechado del siglo V a. E.C.) hallado en Tell el-Maskhuta (Egipto) lleva la inscripción aramea: “Qanu el hijo de Guésem, el rey de Quedar”. El Guésem que se menciona en este caso puede ser “Guésem el árabe”, quien se opuso a la obra de reedificar el muro de Jerusalén en los días de Nehemías. (Ne 2:19; 6:1, 2, 6.)

(NEHEMÍAS 6:2)

“Sanbalat y Guésem inmediatamente enviaron a decirme: “Ven, sí, y reunámonos por cita en las aldeas de la llanura-valle de Onó”. Pero tramaban hacerme daño.”

*** w07 1/7 pág. 30 párr. 13 “Sigue venciendo el mal con el bien” ***
En primer lugar, intentaron engañar a Nehemías diciéndole: “Ven, sí, y reunámonos [...] en las aldeas [...] de Onó”. Dado que la llanura de Onó estaba situada entre Jerusalén y Samaria, lo que en realidad le estaban proponiendo era reunirse con ellos en un punto intermedio para llegar a un acuerdo. Nehemías pudo haber pensado: “Me parece buena idea; al fin y al cabo, es mejor hablar que pelear”. Pero no aceptó. ¿Por qué? Porque, como él mismo explicó, “tramaban hacer[le] daño”. Intuyendo que era una trampa, no se dejó engañar y cuatro veces les respondió lo mismo: “No puedo bajar. ¿Por qué debe cesar la obra mientras yo [bajo a reunirme con] ustedes?”. Los enemigos no lograron que Nehemías cediera en su postura, y este siguió centrado en la reconstrucción (Nehemías 6:1-4).

*** it-2 págs. 551-552 Onó ***
“La llanura-valle de Onó” (Ne 6:2) posiblemente se refiera al ancho valle en el que yace Kafr ʽAna. Esta “llanura-valle” también se ha vinculado al “valle de los artífices [gueh ha•jara•schím]”. (Ne 11:35.) No obstante, algunos eruditos entienden que gueh ha•jara•schím se refiere en hebreo a otra localidad, y transliteran la expresión como un nombre propio, “Gue-hajarasim”, u otra grafía similar. (BC; CI; compárese con 1Cr 4:14.)

(NEHEMÍAS 6:5)

“Finalmente Sanbalat me envió su servidor con la misma palabra por quinta vez, con una carta abierta en la mano.”

*** w07 1/7 pág. 30 párr. 14 “Sigue venciendo el mal con el bien” ***
En segundo lugar, los adversarios difundieron falsos rumores sobre Nehemías, acusándolo de que estaba “tramando rebelarse” contra el rey Artajerjes. Una vez más le hicieron esta invitación: “Consultemos juntos”. Percibiendo sus intenciones, volvió a rechazarla. “Todos ellos trataban de infundirnos miedo —explica Nehemías—, pues decían: ‘Dejarán caer sus manos de la obra, de manera que no se hará’.” Esta vez, sin embargo, decidió responder a las acusaciones del enemigo: “Cosas tales como las que tú estás diciendo no se han efectuado, sino que de tu propio corazón las estás inventando”. Además, imploró la ayuda de Jehová. “Fortalece mis manos”, le suplicó, sabiendo que con su apoyo podría burlar aquel malvado plan y seguir adelante con la obra (Nehemías 6:5-9).

*** w06 1/2 pág. 9 Puntos sobresalientes del libro de Nehemías ***
6:5. Puesto que las cartas confidenciales solían ir en bolsas selladas, ¿por qué envió Sanbalat “una carta abierta” a Nehemías? Quizás la intención de Sanbalat era divulgar las acusaciones falsas que esta contenía. Tal vez esperaba que Nehemías se enojara tanto que interrumpiera la construcción para ir a defenderse personalmente. O puede que haya pensado que su contenido alarmaría tanto a los judíos que estos detendrían las obras por completo. Pero Nehemías no se intimidó y prosiguió con calma la obra encomendada por Dios.

*** it-1 pág. 436 Cartas ***
Las cartas confidenciales solían ir selladas. (1Re 21:8.) La acción irrespetuosa de Sanbalat de enviar una carta abierta a Nehemías es posible que tuviera la intención de que los cargos falsos que contenía llegaran a ser de conocimiento público. (Ne 6:5.)

*** w86 15/2 pág. 25 Triunfa la adoración verdadera ***
♦ 6:5—¿Por qué le enviaron una “carta abierta”?
Las cartas confidenciales se solían colocar en bolsas selladas cuidadosamente. Por consiguiente, Sanbalat pudo haber enviado una “carta abierta” a Nehemías a modo de insulto. O, puesto que otros podrían leer la acusación presentada en esa “carta abierta”, quizás esperaba que Nehemías saliera de Jerusalén para defenderse de las acusaciones que se habían levantado contra él. También es posible que Sanbalat haya esperado que la carta alarmara tanto a los judíos que como resultado abandonarían la obra.

(NEHEMÍAS 6:6)

“En ella estaba escrito: “Entre las naciones se ha oído, y Guésem [lo] está diciendo, que tú y los judíos están tramando rebelarse. Por eso estás edificando el muro; y vas a llegar a ser rey de ellos, según estas palabras.”

*** w07 1/7 pág. 30 párr. 14 “Sigue venciendo el mal con el bien” ***
En segundo lugar, los adversarios difundieron falsos rumores sobre Nehemías, acusándolo de que estaba “tramando rebelarse” contra el rey Artajerjes. Una vez más le hicieron esta invitación: “Consultemos juntos”. Percibiendo sus intenciones, volvió a rechazarla. “Todos ellos trataban de infundirnos miedo —explica Nehemías—, pues decían: ‘Dejarán caer sus manos de la obra, de manera que no se hará’.” Esta vez, sin embargo, decidió responder a las acusaciones del enemigo: “Cosas tales como las que tú estás diciendo no se han efectuado, sino que de tu propio corazón las estás inventando”. Además, imploró la ayuda de Jehová. “Fortalece mis manos”, le suplicó, sabiendo que con su apoyo podría burlar aquel malvado plan y seguir adelante con la obra (Nehemías 6:5-9).

*** it-1 pág. 1063 Guésem ***
GUÉSEM
(posiblemente: Aguacero; Lluvia Intensa).
Árabe que junto con Sanbalat y Tobías se opuso a que Nehemías reedificara el muro de Jerusalén. Estos enemigos primero se burlaron de Nehemías y sus colaboradores (Ne 2:19) y más tarde conspiraron y urdieron un complot contra él aunque sin resultado. (Ne 6:1-4.) Finalmente, Sanbalat le envió una carta en la que le comunicaba la acusación de Guésem, según la cual Nehemías y los judíos tramaban rebelarse y el propio Nehemías iba a hacerse rey. No obstante, volvieron a fracasar. (Ne 6:5-7.) El que Sanbalat mencionara a Guésem en la carta parece indicar que era un hombre de influencia. Se ha podido constatar que la corte persa y las tribus árabes disfrutaron de buenas relaciones después de la invasión persa de Egipto.

(NEHEMÍAS 6:10)

“Y yo mismo entré en la casa de Semaya hijo de Delayá hijo de Mehetabel, mientras él estaba encerrado. Y él procedió a decir: “Encontrémonos por cita en la casa del Dios [verdadero], dentro del templo, y cerremos las puertas del templo; porque van a venir para matarte, aun de noche van a venir para matarte”.”

*** w07 1/7 pág. 30 párr. 15 “Sigue venciendo el mal con el bien” ***
Por último, le pidieron al israelita Semaya que engañara a Nehemías para que desobedeciera la Ley de Dios. Aquel traidor le dijo: “Encontrémonos [...] en la casa del Dios verdadero, dentro del templo, y cerremos las puertas del templo; porque van a venir para matarte”. En otras palabras, recomendó a Nehemías que corriera a esconderse en el templo para que no lo asesinaran. Pero como Nehemías no era sacerdote, ocultarse en la casa de Dios habría sido un pecado. ¿Violaría la Ley divina con tal de salvarse? No, sino que respondió: “[¿]Pudiera entrar [yo] en el templo y vivir? ¡No entraré!”. ¿Por qué no cayó Nehemías en la trampa? Porque sabía que aunque Semaya era su hermano judío, “no era Dios quien lo había enviado”; un verdadero profeta jamás le habría aconsejado desobedecer la Ley de Jehová. Así, Nehemías volvió a evitar que sus malévolos adversarios lo vencieran. Poco después dio este informe: “Por fin el muro quedó completo el día veinticinco de Elul, en cincuenta y dos días” (Nehemías 6:10-15; Números 1:51; 18:7).

(NEHEMÍAS 6:14)

“Acuérdate, sí, oh Dios mío, de Tobías y de Sanbalat, conforme a estas acciones de [cada] uno, y también de Noadías la profetisa y de los demás profetas que de continuo estuvieron tratando de infundirme miedo.”

*** it-2 pág. 729 Profetisa ***
Nehemías no habla de manera favorable de la profetisa Noadías, pues junto con “los demás profetas” intentó atemorizarle a fin de impedir la reconstrucción de los muros de Jerusalén. (Ne 6:14.) El que actuara en contra de la voluntad de Dios no tiene por qué significar que antes no hubiera disfrutado de una posición acepta.

(NEHEMÍAS 6:15)

“Por fin el muro quedó completo el [día] veinticinco de Elul, en cincuenta y dos días.”

*** sgd pág. 64 19 El calendario hebreo ***
ELUL agosto—septiembre

Continúa el calor
Dátiles, higos y uvas

(NEHEMÍAS 7:1)

“Y aconteció que, tan pronto como el muro hubo sido reedificado, en seguida coloqué las puertas. Entonces fueron nombrados los porteros y los cantores y los levitas.”

*** it-2 pág. 444 Música ***
Estos hechos ayudan a entender por qué aunque todos los cantores eran levitas, la Biblia se refiere a ellos como un grupo especial: “los cantores y los levitas”. (Ne 7:1; 13:10.)

(NEHEMÍAS 7:2)

“Y pasé a poner al mando de Jerusalén a Hananí mi hermano y a Hananías el príncipe del Castillo, porque era un hombre muy fidedigno y temía al Dios [verdadero] más que muchos otros.”

*** it-1 pág. 440 Castillo ***
Nehemías construyó un castillo o fortaleza justo al NO. del templo reconstruido, el lado más vulnerable de la ciudad. (Ne 2:8; 7:2.) Por lo visto, los Macabeos levantaron otro castillo en el mismo lugar, más tarde reconstruido por Herodes el Grande y llamado Fortaleza Antonia. En este castillo el comandante militar romano interrogó a Pablo. (Hch 21:31, 32, 37; 22:24; véase ANTONIA, FORTALEZA.)

(NEHEMÍAS 7:6)

“Estos son los hijos del distrito jurisdiccional que subieron del cautiverio del pueblo desterrado a quienes Nabucodonosor el rey de Babilonia había llevado al destierro y que más tarde volvieron a Jerusalén y a Judá, cada uno a su propia ciudad;”

*** it-1 págs. 708-709 Distrito jurisdiccional ***
Quizás por haber vivido en el distrito jurisdiccional de Babilonia, a los judíos que volvieron del exilio se les llamó “hijos del distrito jurisdiccional”. (Esd 2:1; Ne 7:6.) O puede que esta designación haga alusión al hecho de que vivían en Judá, un distrito jurisdiccional medopersa. (Ne 1:3.)

*** w86 15/2 pág. 26 Triunfa la adoración verdadera ***
♦ 7:6—¿Por qué difiere esta lista de la de Esdras?
Ambos relatos concuerdan con el hecho de que, aparte de los esclavos y cantores, la cantidad total de los que regresaron fue de 42.360. (Esdras 2:64, 65; Nehemías 7:66, 67.) Pero existe una diferencia en el número de los que regresaron según las familias en particular. Es muy probable que Esdras y Nehemías hayan utilizado diferentes métodos para compilar sus listas. Por ejemplo, es posible que uno haya alistado a los que se registraron para regresar, mientras que el otro sólo a los que realmente regresaron. Algunos sacerdotes, y posiblemente otras personas, no pudieron demostrar su linaje (7:64). Esto pudiera explicar por qué la suma total de las listas individuales no corresponde con el total general de 42.360.

(NEHEMÍAS 7:7)

“los que vinieron con Zorobabel: Jesúa, Nehemías, Azarías, Raamías, Nahamaní, Mardoqueo, Bilsán, Mispéret, Bigvai, Nehúm, Baanah. El número de los hombres del pueblo de Israel:”

*** it-1 págs. 260-261 Azarías ***
22. Uno de los que en 537 a. E.C. regresaron a Jerusalén con Zorobabel del cautiverio babilonio. (Ne 7:6, 7.) En Esdras 2:2 se le llama Seraya.

(NEHEMÍAS 7:15)

“los hijos de Binuí, seiscientos cuarenta y ocho;”

*** it-1 pág. 282 Baní ***
4. Cabeza de familia cuyos descendientes, más de 600, regresaron a Jerusalén con Zorobabel. (Esd 2:1, 10.) Se le llama Binuí en Nehemías 7:15. (Véase núm. 3.)

(NEHEMÍAS 7:21)

“los hijos de Ater, de Ezequías, noventa y ocho;”

*** it-1 pág. 249 Ater ***
ATER
(Cerrado; Obstruido).
1. Israelita; noventa y ocho de sus hijos o descendientes regresaron del exilio en Babilonia con Zorobabel en 537 a. E.C. (Esd 2:1, 2, 16; Ne 7:21.) El registro dice: “Los hijos de Ater, de Ezequías, noventa y ocho”, lo que quiere decir, quizás, que eran descendientes de Ater, quien a su vez descendía de un tal Ezequías (probablemente no el rey Ezequías de Judá), o que eran descendientes de Ater por medio de cierto Ezequías. Puede que uno de los cabezas del pueblo que autenticaron por sello el “arreglo fidedigno” de los días de Nehemías fuese un descendiente de este Ater. (Ne 9:38; 10:1, 17.)

(NEHEMÍAS 7:33)

“los hombres de la otra Nebo, cincuenta y dos;”

*** it-2 pág. 471 Nebo ***
2. Ciudad de la que procedían algunos de los que regresaron del exilio babilonio. (Esd 2:1, 29.) En el tiempo de Esdras, algunos de los “hijos [probablemente habitantes] de Nebo” despidieron a sus esposas extranjeras. (Esd 10:43, 44.) Al parecer a esta Nebo se la llama la “otra Nebo” para distinguirla de la anterior. (Ne 7:33.) Como posible identificación de Nebo, se ha presentado la moderna Nuba, situada a unos 11 Km. al NO. de Hebrón.

(NEHEMÍAS 7:46)

“Los netineos: Los hijos de Zihá, los hijos de Hasufá, los hijos de Tabaot,”

*** w92 15/4 págs. 13-17 La “gente dada”... provisión de Jehová ***
También regresan no israelitas
8 Cuando se hizo la llamada para que los amadores de Jehová que estaban en Babilonia regresaran a la Tierra Prometida, miles de no israelitas respondieron. En las listas que proveyeron Esdras y Nehemías se menciona a los “netineos” (que significa “los dados [gente dada]”) y “los hijos de los siervos de Salomón”, que en conjunto eran 392 personas. Los relatos también mencionan a más de 7.500 personas adicionales: ‘esclavos y esclavas’, así como “cantores y cantoras” no levitas. (Esdras 2:43-58, 65; Nehemías 7:46-60, 67.) ¿Qué impulsó a tantos no israelitas a regresar?
9 Esdras 1:5 menciona a “todo aquel cuyo espíritu el Dios verdadero había despertado, para subir y reedificar la casa de Jehová”. Sí, Jehová impulsó a todos los que regresaron. Estimuló su espíritu, es decir, su inclinación mental dominante. Aun desde los cielos, Dios pudo hacer aquello mediante su espíritu santo, su fuerza activa. Así, el ‘espíritu de Dios’ ayudó a todos los que se levantaron “para subir y reedificar la casa de Jehová”. (Zacarías 4:1, 6; Ageo 1:14.)
Paralelo en tiempos modernos
10 ¿A quiénes prefiguraron los no israelitas que regresaron de Babilonia? Puede que muchos cristianos contesten: ‘Los netineos corresponden a las “otras ovejas” hoy día’. Es cierto, pero no solo los netineos; pues todos los no israelitas que regresaron representan a los cristianos de la actualidad que no son del Israel espiritual.
11 En el libro Usted puede sobrevivir al Armagedón y entrar en el nuevo mundo de Dios se hizo la siguiente observación: “Los 42,360 israelitas que componían el resto no fueron los únicos que salieron de Babilonia con el gobernador Zorobabel [...] Millares de no israelitas volvieron con ellos [...] Además de los netineos había otros no israelitas, los esclavos, los cantantes profesionales, varones y hembras, y los descendientes de los siervos del rey Salomón”. El libro pasó a explicar: “Los netineos, los esclavos, los cantantes y los hijos de los siervos de Salomón, todos personas que no eran israelitas, dejaron la tierra de cautiverio y volvieron con el resto israelita [...] De modo que ¿es correcto pensar que hoy en día gente de diferentes nacionalidades, personas que no fueran israelitas espirituales, se asociarían con el resto del Israel espiritual y promoverían con ellos la adoración de Jehová Dios? Sí”. Esas personas ‘han llegado a ser netineos, cantantes e hijos de los siervos de Salomón antitípicos de la actualidad’.
12 Como en el modelo antiguo, Dios también da su espíritu a los que esperan vivir para siempre en la Tierra. Es cierto que ellos no nacen de nuevo. Cada uno de los 144.000 pasa por la experiencia singular de nacer de nuevo como hijo espiritual de Dios y ser ungido con espíritu santo. (Juan 3:3, 5; Romanos 8:16; Efesios 1:13, 14.) Por supuesto, tal ungimiento es una manifestación extraordinaria del espíritu de Dios a favor del rebaño pequeño. Pero el espíritu de Dios también es necesario para cumplir su voluntad. Por eso Jesús dijo: ‘El Padre en el cielo da espíritu santo a los que le piden’. (Lucas 11:13.) Prescindiendo de si el que pide tiene esperanza celestial o es de las otras ovejas, el espíritu de Jehová está disponible en abundancia para efectuar Su voluntad.
13 Tal como el espíritu de Dios impelió tanto a israelitas como a no israelitas a regresar a Jerusalén, así también fortalece y ayuda a todos sus siervos leales hoy. Sea que Dios le haya dado a un cristiano la esperanza de vivir en el cielo o vivir en la Tierra, este tiene que predicar las buenas nuevas, y el espíritu santo le ayuda a ser fiel al respecto. Cada uno de nosotros —prescindiendo de nuestra esperanza— debe cultivar los frutos del espíritu, los cuales necesitamos a plenitud. (Gálatas 5:22-26.)
Gente dada para servicio especial
14 Entre los miles de no israelitas a quienes el espíritu impulsó a regresar había dos grupitos que la Palabra de Dios distinguió de los demás: los netineos y los hijos de los siervos de Salomón. ¿Quiénes eran ellos? ¿Qué hicieron? ¿Y qué significado pudiera tener eso en nuestros días?
15 Los netineos eran un grupo de origen no israelita que tenía el privilegio de ministrar junto con los levitas. Recordemos a los cananeos de Gabaón que llegaron a ser “recogedores de leña y sacadores de agua para la asamblea y para el altar de Jehová”. (Josué 9:27.) Es probable que algunos de sus descendientes hayan estado entre los netineos que regresaron de Babilonia, así como otros que fueron añadidos como netineos durante el reinado de David y en otros tiempos. (Esdras 8:20.) ¿Qué hacían los netineos? Los levitas fueron dados para ayudar a los sacerdotes, y después los netineos fueron dados para ayudar a los levitas. Aquello era un privilegio hasta para extranjeros circuncisos.
16 Entre el grupo que regresó de Babilonia había pocos levitas en comparación con los sacerdotes, los netineos y los “hijos de los siervos de Salomón”. (Esdras 8:15-20.) El Dictionary of the Bible, por el Dr. James Hastings, hace esta observación: “Después de algún tiempo hallamos [a los netineos] tan completamente establecidos como clase sagrada oficial que se les conceden privilegios”. La publicación erudita Vetus Testamentum hace notar lo siguiente: “Hubo un cambio. Después del Regreso del Destierro, a aquellos [extranjeros] ya no se les consideraba esclavos del Templo, sino ministros en él, pues ocupaban una posición similar a la de los demás cuerpos que oficiaban en el Templo”. (Véase el recuadro “Un cambio de posición social”.)
17 Claro está que los netineos no llegaron a ser iguales a los sacerdotes y los levitas. Estos últimos grupos eran israelitas a quienes Jehová mismo había escogido, y no había de sustituírseles por no israelitas. Con todo, la Biblia indica que, dado que había pocos levitas, los netineos recibieron más asignaciones en el servicio a Dios. Recibieron viviendas cerca del templo. En los días de Nehemías trabajaron con sacerdotes en la reparación de los muros cerca del templo. (Nehemías 3:22-26.) Y el rey de Persia decretó que a los netineos se les eximiera de pagar impuestos, tal como los levitas estaban exentos por su servicio en el templo. (Esdras 7:24.) Eso indica cuán estrechamente relacionada estaba aquella “gente dada” (los levitas y los netineos) con asuntos espirituales, y cuánto aumentaron las asignaciones de los netineos de acuerdo con la necesidad, aunque nunca se les contó como levitas. Más tarde, cuando Esdras juntó a los desterrados que iban a regresar, no había ningún levita entre ellos al principio. Así que intensificó los esfuerzos por juntar a algunos. Como resultado, 38 levitas y 220 netineos regresaron para servir como “ministros para la casa de nuestro Dios”. (Esdras 8:15-20.)
18 Un segundo grupo de no israelitas que se distinguió fue el de los hijos de los siervos de Salomón. La Biblia da pocos detalles sobre ellos. Algunos eran “los hijos de Soféret”. Esdras añade un artículo definido a ese nombre y lo convierte en Has•so•fé•reth, que posiblemente significa “el escriba”. (Esdras 2:55; Nehemías 7:57.) Por lo tanto, puede que hayan sido un grupo de escribas o copistas, tal vez escribas administrativos o del templo. Aunque eran de origen extranjero, los hijos de los siervos de Salomón demostraron su devoción a Jehová al salir de Babilonia y regresar para participar en la restauración de Su adoración.
Cómo podemos darnos en el servicio a Dios hoy
19 En nuestros tiempos Dios ha utilizado poderosamente al resto ungido para encabezar la adoración pura y declarar las buenas nuevas. (Marcos 13:10.) ¡Cuánto se han regocijado los del resto ungido al ver a decenas de miles, centenares de miles, y luego a millones de otras ovejas unirse a ellos en su adoración a Dios! ¡Y qué excelente cooperación ha habido entre el resto y las otras ovejas! (Juan 10:16.)
20 Todos los no israelitas que regresaron del destierro en la antigua Babilonia son un paralelo de las otras ovejas que sirven ahora con el resto del Israel espiritual. Sin embargo, ¿qué se puede decir sobre el hecho de que la Biblia singulariza a los netineos y a los hijos de los siervos de Salomón? En el modelo los netineos y los hijos de los siervos de Salomón recibieron privilegios mayores que los que recibieron los demás no israelitas que regresaron. Aquello bien pudiera prefigurar que Dios ha extendido privilegios y deberes adicionales hoy día a algunos de entre las otras ovejas que son maduros y que tienen la debida disposición.
21 Los privilegios adicionales de los netineos tuvieron que ver directamente con actividades espirituales. Parece que los hijos de los siervos de Salomón recibieron responsabilidades administrativas. Hoy, también, Jehová ha bendecido a su pueblo con “dádivas en hombres” para que atiendan las necesidades de este. (Efesios 4:8, 11, 12.) Esta provisión incluye a muchos centenares de hermanos maduros y experimentados que participan en ‘pastorear los rebaños’ al servir de superintendentes de circuito y de distrito y en Comités de Sucursales en las 98 sucursales de la Sociedad Watch Tower. (Isaías 61:5.) Hombres capaces reciben adiestramiento para ayudar a preparar los víveres espirituales en la sede mundial de la Sociedad, bajo la dirección del “mayordomo fiel” y su Cuerpo Gobernante. (Lucas 12:42.) Otros voluntarios dedicados de mucha experiencia han sido adiestrados para encargarse del manejo de hogares Betel y fábricas y para supervisar, por toda la Tierra, programas de construcción de nuevas sucursales y salones para la adoración cristiana. Han sobresalido en colaborar estrechamente con el resto ungido, que constituye parte del sacerdocio real. (Compárese con 1 Corintios 4:17; 14:40; 1 Pedro 2:9.)
22 Allá en la antigüedad los sacerdotes y los levitas continuaron sirviendo entre los judíos. (Juan 1:19.) No obstante, hoy día el número de los del resto del Israel espiritual en la Tierra tiene que seguir disminuyendo. (Contrástese con Juan 3:30.) Finalmente, después de la destrucción de Babilonia la Grande, todo el grupo de 144.000 “sellados” estarán en el cielo para las bodas del Cordero. (Revelación 7:1-3; 19:1-8.) Pero ahora la cantidad de las otras ovejas tiene que seguir aumentando. El hecho de que algunos de entre estas ovejas —comparables a los netineos y a los hijos de los siervos de Salomón— reciban ahora responsabilidades de peso bajo la supervisión del resto ungido no hace que sean presuntuosos ni que se consideren muy importantes. (Romanos 12:3.) Esto nos hace confiar en que cuando el pueblo de Dios ‘salga de la gran tribulación’ habrá hombres experimentados —“príncipes”— que estarán preparados para llevar la delantera entre las otras ovejas. (Revelación 7:14; Isaías 32:1; compárese con Hechos 6:2-7.)
23 Todos los que regresaron de Babilonia estuvieron dispuestos a trabajar duro y demostrar que lo más importante en su mente y corazón era la adoración de Jehová. Lo mismo sucede hoy. Junto con el resto ungido, ‘extraños realmente están allí y pastorean los rebaños’. (Isaías 61:5.) Por eso, prescindiendo de la esperanza que Dios nos haya dado, y sin importar qué privilegios reciban los ancianos nombrados por espíritu antes del día de la vindicación de Jehová en Armagedón, que todos cultivemos un espíritu abnegado, sano y de darnos en el servicio a Él. Aunque nunca podremos pagar a Jehová por todos los magníficos beneficios que nos ha dado, sirvamos de toda alma en cualquier asignación que tengamos en su organización. (Salmo 116:12-14; Colosenses 3:23.) Como se ve, todos podemos dar de lo que somos y tenemos a favor de la adoración verdadera a medida que las otras ovejas sirven estrechamente con los ungidos, quienes han de “reinar sobre la tierra”. (Revelación 5:9, 10.)

(NEHEMÍAS 7:57)

“Los hijos de los siervos de Salomón: Los hijos de Sotai, los hijos de Soféret, los hijos de Peridá,”

*** w92 15/4 págs. 13-17 La “gente dada”... provisión de Jehová ***
También regresan no israelitas
8 Cuando se hizo la llamada para que los amadores de Jehová que estaban en Babilonia regresaran a la Tierra Prometida, miles de no israelitas respondieron. En las listas que proveyeron Esdras y Nehemías se menciona a los “netineos” (que significa “los dados [gente dada]”) y “los hijos de los siervos de Salomón”, que en conjunto eran 392 personas. Los relatos también mencionan a más de 7.500 personas adicionales: ‘esclavos y esclavas’, así como “cantores y cantoras” no levitas. (Esdras 2:43-58, 65; Nehemías 7:46-60, 67.) ¿Qué impulsó a tantos no israelitas a regresar?
9 Esdras 1:5 menciona a “todo aquel cuyo espíritu el Dios verdadero había despertado, para subir y reedificar la casa de Jehová”. Sí, Jehová impulsó a todos los que regresaron. Estimuló su espíritu, es decir, su inclinación mental dominante. Aun desde los cielos, Dios pudo hacer aquello mediante su espíritu santo, su fuerza activa. Así, el ‘espíritu de Dios’ ayudó a todos los que se levantaron “para subir y reedificar la casa de Jehová”. (Zacarías 4:1, 6; Ageo 1:14.)
Paralelo en tiempos modernos
10 ¿A quiénes prefiguraron los no israelitas que regresaron de Babilonia? Puede que muchos cristianos contesten: ‘Los netineos corresponden a las “otras ovejas” hoy día’. Es cierto, pero no solo los netineos; pues todos los no israelitas que regresaron representan a los cristianos de la actualidad que no son del Israel espiritual.
11 En el libro Usted puede sobrevivir al Armagedón y entrar en el nuevo mundo de Dios se hizo la siguiente observación: “Los 42,360 israelitas que componían el resto no fueron los únicos que salieron de Babilonia con el gobernador Zorobabel [...] Millares de no israelitas volvieron con ellos [...] Además de los netineos había otros no israelitas, los esclavos, los cantantes profesionales, varones y hembras, y los descendientes de los siervos del rey Salomón”. El libro pasó a explicar: “Los netineos, los esclavos, los cantantes y los hijos de los siervos de Salomón, todos personas que no eran israelitas, dejaron la tierra de cautiverio y volvieron con el resto israelita [...] De modo que ¿es correcto pensar que hoy en día gente de diferentes nacionalidades, personas que no fueran israelitas espirituales, se asociarían con el resto del Israel espiritual y promoverían con ellos la adoración de Jehová Dios? Sí”. Esas personas ‘han llegado a ser netineos, cantantes e hijos de los siervos de Salomón antitípicos de la actualidad’.
12 Como en el modelo antiguo, Dios también da su espíritu a los que esperan vivir para siempre en la Tierra. Es cierto que ellos no nacen de nuevo. Cada uno de los 144.000 pasa por la experiencia singular de nacer de nuevo como hijo espiritual de Dios y ser ungido con espíritu santo. (Juan 3:3, 5; Romanos 8:16; Efesios 1:13, 14.) Por supuesto, tal ungimiento es una manifestación extraordinaria del espíritu de Dios a favor del rebaño pequeño. Pero el espíritu de Dios también es necesario para cumplir su voluntad. Por eso Jesús dijo: ‘El Padre en el cielo da espíritu santo a los que le piden’. (Lucas 11:13.) Prescindiendo de si el que pide tiene esperanza celestial o es de las otras ovejas, el espíritu de Jehová está disponible en abundancia para efectuar Su voluntad.
13 Tal como el espíritu de Dios impelió tanto a israelitas como a no israelitas a regresar a Jerusalén, así también fortalece y ayuda a todos sus siervos leales hoy. Sea que Dios le haya dado a un cristiano la esperanza de vivir en el cielo o vivir en la Tierra, este tiene que predicar las buenas nuevas, y el espíritu santo le ayuda a ser fiel al respecto. Cada uno de nosotros —prescindiendo de nuestra esperanza— debe cultivar los frutos del espíritu, los cuales necesitamos a plenitud. (Gálatas 5:22-26.)
Gente dada para servicio especial
14 Entre los miles de no israelitas a quienes el espíritu impulsó a regresar había dos grupitos que la Palabra de Dios distinguió de los demás: los netineos y los hijos de los siervos de Salomón. ¿Quiénes eran ellos? ¿Qué hicieron? ¿Y qué significado pudiera tener eso en nuestros días?
15 Los netineos eran un grupo de origen no israelita que tenía el privilegio de ministrar junto con los levitas. Recordemos a los cananeos de Gabaón que llegaron a ser “recogedores de leña y sacadores de agua para la asamblea y para el altar de Jehová”. (Josué 9:27.) Es probable que algunos de sus descendientes hayan estado entre los netineos que regresaron de Babilonia, así como otros que fueron añadidos como netineos durante el reinado de David y en otros tiempos. (Esdras 8:20.) ¿Qué hacían los netineos? Los levitas fueron dados para ayudar a los sacerdotes, y después los netineos fueron dados para ayudar a los levitas. Aquello era un privilegio hasta para extranjeros circuncisos.
16 Entre el grupo que regresó de Babilonia había pocos levitas en comparación con los sacerdotes, los netineos y los “hijos de los siervos de Salomón”. (Esdras 8:15-20.) El Dictionary of the Bible, por el Dr. James Hastings, hace esta observación: “Después de algún tiempo hallamos [a los netineos] tan completamente establecidos como clase sagrada oficial que se les conceden privilegios”. La publicación erudita Vetus Testamentum hace notar lo siguiente: “Hubo un cambio. Después del Regreso del Destierro, a aquellos [extranjeros] ya no se les consideraba esclavos del Templo, sino ministros en él, pues ocupaban una posición similar a la de los demás cuerpos que oficiaban en el Templo”. (Véase el recuadro “Un cambio de posición social”.)
17 Claro está que los netineos no llegaron a ser iguales a los sacerdotes y los levitas. Estos últimos grupos eran israelitas a quienes Jehová mismo había escogido, y no había de sustituírseles por no israelitas. Con todo, la Biblia indica que, dado que había pocos levitas, los netineos recibieron más asignaciones en el servicio a Dios. Recibieron viviendas cerca del templo. En los días de Nehemías trabajaron con sacerdotes en la reparación de los muros cerca del templo. (Nehemías 3:22-26.) Y el rey de Persia decretó que a los netineos se les eximiera de pagar impuestos, tal como los levitas estaban exentos por su servicio en el templo. (Esdras 7:24.) Eso indica cuán estrechamente relacionada estaba aquella “gente dada” (los levitas y los netineos) con asuntos espirituales, y cuánto aumentaron las asignaciones de los netineos de acuerdo con la necesidad, aunque nunca se les contó como levitas. Más tarde, cuando Esdras juntó a los desterrados que iban a regresar, no había ningún levita entre ellos al principio. Así que intensificó los esfuerzos por juntar a algunos. Como resultado, 38 levitas y 220 netineos regresaron para servir como “ministros para la casa de nuestro Dios”. (Esdras 8:15-20.)
18 Un segundo grupo de no israelitas que se distinguió fue el de los hijos de los siervos de Salomón. La Biblia da pocos detalles sobre ellos. Algunos eran “los hijos de Soféret”. Esdras añade un artículo definido a ese nombre y lo convierte en Has•so•fé•reth, que posiblemente significa “el escriba”. (Esdras 2:55; Nehemías 7:57.) Por lo tanto, puede que hayan sido un grupo de escribas o copistas, tal vez escribas administrativos o del templo. Aunque eran de origen extranjero, los hijos de los siervos de Salomón demostraron su devoción a Jehová al salir de Babilonia y regresar para participar en la restauración de Su adoración.
Cómo podemos darnos en el servicio a Dios hoy
19 En nuestros tiempos Dios ha utilizado poderosamente al resto ungido para encabezar la adoración pura y declarar las buenas nuevas. (Marcos 13:10.) ¡Cuánto se han regocijado los del resto ungido al ver a decenas de miles, centenares de miles, y luego a millones de otras ovejas unirse a ellos en su adoración a Dios! ¡Y qué excelente cooperación ha habido entre el resto y las otras ovejas! (Juan 10:16.)
20 Todos los no israelitas que regresaron del destierro en la antigua Babilonia son un paralelo de las otras ovejas que sirven ahora con el resto del Israel espiritual. Sin embargo, ¿qué se puede decir sobre el hecho de que la Biblia singulariza a los netineos y a los hijos de los siervos de Salomón? En el modelo los netineos y los hijos de los siervos de Salomón recibieron privilegios mayores que los que recibieron los demás no israelitas que regresaron. Aquello bien pudiera prefigurar que Dios ha extendido privilegios y deberes adicionales hoy día a algunos de entre las otras ovejas que son maduros y que tienen la debida disposición.
21 Los privilegios adicionales de los netineos tuvieron que ver directamente con actividades espirituales. Parece que los hijos de los siervos de Salomón recibieron responsabilidades administrativas. Hoy, también, Jehová ha bendecido a su pueblo con “dádivas en hombres” para que atiendan las necesidades de este. (Efesios 4:8, 11, 12.) Esta provisión incluye a muchos centenares de hermanos maduros y experimentados que participan en ‘pastorear los rebaños’ al servir de superintendentes de circuito y de distrito y en Comités de Sucursales en las 98 sucursales de la Sociedad Watch Tower. (Isaías 61:5.) Hombres capaces reciben adiestramiento para ayudar a preparar los víveres espirituales en la sede mundial de la Sociedad, bajo la dirección del “mayordomo fiel” y su Cuerpo Gobernante. (Lucas 12:42.) Otros voluntarios dedicados de mucha experiencia han sido adiestrados para encargarse del manejo de hogares Betel y fábricas y para supervisar, por toda la Tierra, programas de construcción de nuevas sucursales y salones para la adoración cristiana. Han sobresalido en colaborar estrechamente con el resto ungido, que constituye parte del sacerdocio real. (Compárese con 1 Corintios 4:17; 14:40; 1 Pedro 2:9.)
22 Allá en la antigüedad los sacerdotes y los levitas continuaron sirviendo entre los judíos. (Juan 1:19.) No obstante, hoy día el número de los del resto del Israel espiritual en la Tierra tiene que seguir disminuyendo. (Contrástese con Juan 3:30.) Finalmente, después de la destrucción de Babilonia la Grande, todo el grupo de 144.000 “sellados” estarán en el cielo para las bodas del Cordero. (Revelación 7:1-3; 19:1-8.) Pero ahora la cantidad de las otras ovejas tiene que seguir aumentando. El hecho de que algunos de entre estas ovejas —comparables a los netineos y a los hijos de los siervos de Salomón— reciban ahora responsabilidades de peso bajo la supervisión del resto ungido no hace que sean presuntuosos ni que se consideren muy importantes. (Romanos 12:3.) Esto nos hace confiar en que cuando el pueblo de Dios ‘salga de la gran tribulación’ habrá hombres experimentados —“príncipes”— que estarán preparados para llevar la delantera entre las otras ovejas. (Revelación 7:14; Isaías 32:1; compárese con Hechos 6:2-7.)
23 Todos los que regresaron de Babilonia estuvieron dispuestos a trabajar duro y demostrar que lo más importante en su mente y corazón era la adoración de Jehová. Lo mismo sucede hoy. Junto con el resto ungido, ‘extraños realmente están allí y pastorean los rebaños’. (Isaías 61:5.) Por eso, prescindiendo de la esperanza que Dios nos haya dado, y sin importar qué privilegios reciban los ancianos nombrados por espíritu antes del día de la vindicación de Jehová en Armagedón, que todos cultivemos un espíritu abnegado, sano y de darnos en el servicio a Él. Aunque nunca podremos pagar a Jehová por todos los magníficos beneficios que nos ha dado, sirvamos de toda alma en cualquier asignación que tengamos en su organización. (Salmo 116:12-14; Colosenses 3:23.) Como se ve, todos podemos dar de lo que somos y tenemos a favor de la adoración verdadera a medida que las otras ovejas sirven estrechamente con los ungidos, quienes han de “reinar sobre la tierra”. (Revelación 5:9, 10.)

(NEHEMÍAS 7:60)

“Todos los netineos y los hijos de los siervos de Salomón fueron trescientos noventa y dos.”

*** w92 15/4 págs. 13-17 La “gente dada”... provisión de Jehová ***
También regresan no israelitas
8 Cuando se hizo la llamada para que los amadores de Jehová que estaban en Babilonia regresaran a la Tierra Prometida, miles de no israelitas respondieron. En las listas que proveyeron Esdras y Nehemías se menciona a los “netineos” (que significa “los dados [gente dada]”) y “los hijos de los siervos de Salomón”, que en conjunto eran 392 personas. Los relatos también mencionan a más de 7.500 personas adicionales: ‘esclavos y esclavas’, así como “cantores y cantoras” no levitas. (Esdras 2:43-58, 65; Nehemías 7:46-60, 67.) ¿Qué impulsó a tantos no israelitas a regresar?
9 Esdras 1:5 menciona a “todo aquel cuyo espíritu el Dios verdadero había despertado, para subir y reedificar la casa de Jehová”. Sí, Jehová impulsó a todos los que regresaron. Estimuló su espíritu, es decir, su inclinación mental dominante. Aun desde los cielos, Dios pudo hacer aquello mediante su espíritu santo, su fuerza activa. Así, el ‘espíritu de Dios’ ayudó a todos los que se levantaron “para subir y reedificar la casa de Jehová”. (Zacarías 4:1, 6; Ageo 1:14.)
Paralelo en tiempos modernos
10 ¿A quiénes prefiguraron los no israelitas que regresaron de Babilonia? Puede que muchos cristianos contesten: ‘Los netineos corresponden a las “otras ovejas” hoy día’. Es cierto, pero no solo los netineos; pues todos los no israelitas que regresaron representan a los cristianos de la actualidad que no son del Israel espiritual.
11 En el libro Usted puede sobrevivir al Armagedón y entrar en el nuevo mundo de Dios se hizo la siguiente observación: “Los 42,360 israelitas que componían el resto no fueron los únicos que salieron de Babilonia con el gobernador Zorobabel [...] Millares de no israelitas volvieron con ellos [...] Además de los netineos había otros no israelitas, los esclavos, los cantantes profesionales, varones y hembras, y los descendientes de los siervos del rey Salomón”. El libro pasó a explicar: “Los netineos, los esclavos, los cantantes y los hijos de los siervos de Salomón, todos personas que no eran israelitas, dejaron la tierra de cautiverio y volvieron con el resto israelita [...] De modo que ¿es correcto pensar que hoy en día gente de diferentes nacionalidades, personas que no fueran israelitas espirituales, se asociarían con el resto del Israel espiritual y promoverían con ellos la adoración de Jehová Dios? Sí”. Esas personas ‘han llegado a ser netineos, cantantes e hijos de los siervos de Salomón antitípicos de la actualidad’.
12 Como en el modelo antiguo, Dios también da su espíritu a los que esperan vivir para siempre en la Tierra. Es cierto que ellos no nacen de nuevo. Cada uno de los 144.000 pasa por la experiencia singular de nacer de nuevo como hijo espiritual de Dios y ser ungido con espíritu santo. (Juan 3:3, 5; Romanos 8:16; Efesios 1:13, 14.) Por supuesto, tal ungimiento es una manifestación extraordinaria del espíritu de Dios a favor del rebaño pequeño. Pero el espíritu de Dios también es necesario para cumplir su voluntad. Por eso Jesús dijo: ‘El Padre en el cielo da espíritu santo a los que le piden’. (Lucas 11:13.) Prescindiendo de si el que pide tiene esperanza celestial o es de las otras ovejas, el espíritu de Jehová está disponible en abundancia para efectuar Su voluntad.
13 Tal como el espíritu de Dios impelió tanto a israelitas como a no israelitas a regresar a Jerusalén, así también fortalece y ayuda a todos sus siervos leales hoy. Sea que Dios le haya dado a un cristiano la esperanza de vivir en el cielo o vivir en la Tierra, este tiene que predicar las buenas nuevas, y el espíritu santo le ayuda a ser fiel al respecto. Cada uno de nosotros —prescindiendo de nuestra esperanza— debe cultivar los frutos del espíritu, los cuales necesitamos a plenitud. (Gálatas 5:22-26.)
Gente dada para servicio especial
14 Entre los miles de no israelitas a quienes el espíritu impulsó a regresar había dos grupitos que la Palabra de Dios distinguió de los demás: los netineos y los hijos de los siervos de Salomón. ¿Quiénes eran ellos? ¿Qué hicieron? ¿Y qué significado pudiera tener eso en nuestros días?
15 Los netineos eran un grupo de origen no israelita que tenía el privilegio de ministrar junto con los levitas. Recordemos a los cananeos de Gabaón que llegaron a ser “recogedores de leña y sacadores de agua para la asamblea y para el altar de Jehová”. (Josué 9:27.) Es probable que algunos de sus descendientes hayan estado entre los netineos que regresaron de Babilonia, así como otros que fueron añadidos como netineos durante el reinado de David y en otros tiempos. (Esdras 8:20.) ¿Qué hacían los netineos? Los levitas fueron dados para ayudar a los sacerdotes, y después los netineos fueron dados para ayudar a los levitas. Aquello era un privilegio hasta para extranjeros circuncisos.
16 Entre el grupo que regresó de Babilonia había pocos levitas en comparación con los sacerdotes, los netineos y los “hijos de los siervos de Salomón”. (Esdras 8:15-20.) El Dictionary of the Bible, por el Dr. James Hastings, hace esta observación: “Después de algún tiempo hallamos [a los netineos] tan completamente establecidos como clase sagrada oficial que se les conceden privilegios”. La publicación erudita Vetus Testamentum hace notar lo siguiente: “Hubo un cambio. Después del Regreso del Destierro, a aquellos [extranjeros] ya no se les consideraba esclavos del Templo, sino ministros en él, pues ocupaban una posición similar a la de los demás cuerpos que oficiaban en el Templo”. (Véase el recuadro “Un cambio de posición social”.)
17 Claro está que los netineos no llegaron a ser iguales a los sacerdotes y los levitas. Estos últimos grupos eran israelitas a quienes Jehová mismo había escogido, y no había de sustituírseles por no israelitas. Con todo, la Biblia indica que, dado que había pocos levitas, los netineos recibieron más asignaciones en el servicio a Dios. Recibieron viviendas cerca del templo. En los días de Nehemías trabajaron con sacerdotes en la reparación de los muros cerca del templo. (Nehemías 3:22-26.) Y el rey de Persia decretó que a los netineos se les eximiera de pagar impuestos, tal como los levitas estaban exentos por su servicio en el templo. (Esdras 7:24.) Eso indica cuán estrechamente relacionada estaba aquella “gente dada” (los levitas y los netineos) con asuntos espirituales, y cuánto aumentaron las asignaciones de los netineos de acuerdo con la necesidad, aunque nunca se les contó como levitas. Más tarde, cuando Esdras juntó a los desterrados que iban a regresar, no había ningún levita entre ellos al principio. Así que intensificó los esfuerzos por juntar a algunos. Como resultado, 38 levitas y 220 netineos regresaron para servir como “ministros para la casa de nuestro Dios”. (Esdras 8:15-20.)
18 Un segundo grupo de no israelitas que se distinguió fue el de los hijos de los siervos de Salomón. La Biblia da pocos detalles sobre ellos. Algunos eran “los hijos de Soféret”. Esdras añade un artículo definido a ese nombre y lo convierte en Has•so•fé•reth, que posiblemente significa “el escriba”. (Esdras 2:55; Nehemías 7:57.) Por lo tanto, puede que hayan sido un grupo de escribas o copistas, tal vez escribas administrativos o del templo. Aunque eran de origen extranjero, los hijos de los siervos de Salomón demostraron su devoción a Jehová al salir de Babilonia y regresar para participar en la restauración de Su adoración.
Cómo podemos darnos en el servicio a Dios hoy
19 En nuestros tiempos Dios ha utilizado poderosamente al resto ungido para encabezar la adoración pura y declarar las buenas nuevas. (Marcos 13:10.) ¡Cuánto se han regocijado los del resto ungido al ver a decenas de miles, centenares de miles, y luego a millones de otras ovejas unirse a ellos en su adoración a Dios! ¡Y qué excelente cooperación ha habido entre el resto y las otras ovejas! (Juan 10:16.)
20 Todos los no israelitas que regresaron del destierro en la antigua Babilonia son un paralelo de las otras ovejas que sirven ahora con el resto del Israel espiritual. Sin embargo, ¿qué se puede decir sobre el hecho de que la Biblia singulariza a los netineos y a los hijos de los siervos de Salomón? En el modelo los netineos y los hijos de los siervos de Salomón recibieron privilegios mayores que los que recibieron los demás no israelitas que regresaron. Aquello bien pudiera prefigurar que Dios ha extendido privilegios y deberes adicionales hoy día a algunos de entre las otras ovejas que son maduros y que tienen la debida disposición.
21 Los privilegios adicionales de los netineos tuvieron que ver directamente con actividades espirituales. Parece que los hijos de los siervos de Salomón recibieron responsabilidades administrativas. Hoy, también, Jehová ha bendecido a su pueblo con “dádivas en hombres” para que atiendan las necesidades de este. (Efesios 4:8, 11, 12.) Esta provisión incluye a muchos centenares de hermanos maduros y experimentados que participan en ‘pastorear los rebaños’ al servir de superintendentes de circuito y de distrito y en Comités de Sucursales en las 98 sucursales de la Sociedad Watch Tower. (Isaías 61:5.) Hombres capaces reciben adiestramiento para ayudar a preparar los víveres espirituales en la sede mundial de la Sociedad, bajo la dirección del “mayordomo fiel” y su Cuerpo Gobernante. (Lucas 12:42.) Otros voluntarios dedicados de mucha experiencia han sido adiestrados para encargarse del manejo de hogares Betel y fábricas y para supervisar, por toda la Tierra, programas de construcción de nuevas sucursales y salones para la adoración cristiana. Han sobresalido en colaborar estrechamente con el resto ungido, que constituye parte del sacerdocio real. (Compárese con 1 Corintios 4:17; 14:40; 1 Pedro 2:9.)
22 Allá en la antigüedad los sacerdotes y los levitas continuaron sirviendo entre los judíos. (Juan 1:19.) No obstante, hoy día el número de los del resto del Israel espiritual en la Tierra tiene que seguir disminuyendo. (Contrástese con Juan 3:30.) Finalmente, después de la destrucción de Babilonia la Grande, todo el grupo de 144.000 “sellados” estarán en el cielo para las bodas del Cordero. (Revelación 7:1-3; 19:1-8.) Pero ahora la cantidad de las otras ovejas tiene que seguir aumentando. El hecho de que algunos de entre estas ovejas —comparables a los netineos y a los hijos de los siervos de Salomón— reciban ahora responsabilidades de peso bajo la supervisión del resto ungido no hace que sean presuntuosos ni que se consideren muy importantes. (Romanos 12:3.) Esto nos hace confiar en que cuando el pueblo de Dios ‘salga de la gran tribulación’ habrá hombres experimentados —“príncipes”— que estarán preparados para llevar la delantera entre las otras ovejas. (Revelación 7:14; Isaías 32:1; compárese con Hechos 6:2-7.)
23 Todos los que regresaron de Babilonia estuvieron dispuestos a trabajar duro y demostrar que lo más importante en su mente y corazón era la adoración de Jehová. Lo mismo sucede hoy. Junto con el resto ungido, ‘extraños realmente están allí y pastorean los rebaños’. (Isaías 61:5.) Por eso, prescindiendo de la esperanza que Dios nos haya dado, y sin importar qué privilegios reciban los ancianos nombrados por espíritu antes del día de la vindicación de Jehová en Armagedón, que todos cultivemos un espíritu abnegado, sano y de darnos en el servicio a Él. Aunque nunca podremos pagar a Jehová por todos los magníficos beneficios que nos ha dado, sirvamos de toda alma en cualquier asignación que tengamos en su organización. (Salmo 116:12-14; Colosenses 3:23.) Como se ve, todos podemos dar de lo que somos y tenemos a favor de la adoración verdadera a medida que las otras ovejas sirven estrechamente con los ungidos, quienes han de “reinar sobre la tierra”. (Revelación 5:9, 10.)

(NEHEMÍAS 7:65)

“Por consiguiente, el Tirsatá les dijo que no comieran de las cosas santísimas hasta que el sacerdote con Urim y Tumim se pusiera de pie.”

*** it-2 págs. 1175-1176 Urim y Tumim ***
Su uso cesó en el año 607 a. E.C. Según la tradición judía, el uso del Urim y el Tumim cesó cuando los ejércitos babilonios mandados por el rey Nabucodonosor desolaron Jerusalén y destruyeron su templo en el año 607 a. E.C. (Talmud de Babilonia, Sotá 48b.) Esta opinión está apoyada por lo que leemos con respecto a estos objetos en los libros de Esdras y Nehemías. Allí se dijo a ciertos hombres que afirmaban ser de la línea sacerdotal pero que no podían hallar sus nombres en el registro público, que no podían comer de las cosas santísimas provistas para el sacerdocio hasta que un sacerdote se levantase con el Urim y el Tumim, pero no hay prueba escrita alguna de que se usasen por entonces, y la Biblia ya no vuelve a hacer más referencia a estos objetos sagrados. (Esd 2:61-63; Ne 7:63-65.)

(NEHEMÍAS 7:66)

“La congregación entera, como un solo grupo, era de cuarenta y dos mil trescientos sesenta,”

*** it-2 pág. 481 Nehemías, Libro de ***
Tanto el libro de Esdras (2:1-67) como el libro de Nehemías (7:6-69) incluyen una lista del número de los hombres de las diversas familias o casas que regresaron del exilio babilonio con Zorobabel. Los relatos concuerdan en la misma cantidad total: 42.360 hombres regresaron del exilio, aparte de los esclavos y los cantores. (Esd 2:64; Ne 7:66.) Sin embargo, hay algunas diferencias entre los números dados para cada familia o casa, y en ambas listas las cantidades individuales suman un total de bastante menos de 42.360. Muchos doctos atribuyen estas variaciones a errores de los escribas, y aunque esta explicación no puede descartarse totalmente, hay otras explicaciones posibles para esas diferencias.
Puede ser que Esdras y Nehemías basasen sus registros en fuentes distintas. Por ejemplo, Esdras pudo haber empleado un documento que recogiera a aquellos que se inscribieron para regresar a su tierra natal, mientras que Nehemías tal vez copiara los datos de un registro que incluía a los que realmente regresaron. Puesto que hubo sacerdotes que no pudieron establecer su genealogía (Esd 2:61-63; Ne 7:63-65), no es irrazonable llegar a la conclusión de que muchos otros israelitas se enfrentaran al mismo problema. Por consiguiente, los 42.360 hombres pudieron haber sido el total combinado del número de cada familia más muchos otros que no pudieron establecer su ascendencia. Sin embargo, algunos quizás pudieron averiguar después su genealogía, lo que explicaría diferencias numéricas entre estos dos relatos, aunque ambos coinciden en el mismo total.

(NEHEMÍAS 7:68)

“Sus caballos eran setecientos treinta y seis, sus mulos doscientos cuarenta y cinco.]”

*** it-1 pág. 379 Caballo ***
Isaías menciona a los caballos entre las bestias de carga que llevarían de vuelta a Jerusalén al pueblo dispersado de Dios. (Isa 66:20.) Por lo tanto, es de destacar que en el primer cumplimiento de las profecías de restauración, los judíos que regresaron llevaron 736 caballos. (Esd 2:1, 66; Ne 7:68.)

(NEHEMÍAS 7:69)

“Los camellos eran cuatrocientos treinta y cinco. Los asnos eran seis mil setecientos veinte.”

*** it-1 pág. 401 Camello ***
También se menciona a los camellos entre las bestias de carga que transportarían a los hermanos de los siervos de Dios de entre todas las naciones hacia Jerusalén “como regalo a Jehová”. (Isa 60:6; 66:20.) Es de interés que en el primer cumplimiento de la profecía de restauración de Isaías, había 435 camellos entre los animales que llevaban los judíos que regresaron de Babilonia en 537 a. E.C. (Esd 2:67; Ne 7:69.)

(NEHEMÍAS 7:70)

“Y hubo una parte de los cabezas de las casas paternas que dieron para la obra. El Tirsatá mismo dio al tesoro mil dracmas de oro, cincuenta tazones, quinientos treinta trajes talares de sacerdote.”

*** it-1 pág. 722 Dracma ***
No hay que confundir el dracma griego de plata con el “dracma” de oro (dar•kemóhn) de las Escrituras Hebreas, una moneda que normalmente se equiparaba al dárico persa, que pesaba 8,4 g. (c. 0,27 onzas troy; 94,50 dólares [E.U.A.], según valor actual). (Esd 2:69; Ne 7:70-72.)

(NEHEMÍAS 8:2)

“En conformidad, Esdras el sacerdote trajo la ley delante de la congregación de hombres así como de mujeres y de todos los de suficiente inteligencia como para escuchar, el primer día del séptimo mes.”

*** w98 15/10 pág. 20 Una Jerusalén fiel a su nombre ***
Un maravilloso día de asamblea
4 El muro de Jerusalén se terminó justo a tiempo para el importante mes festivo de Tisri, el séptimo mes del calendario religioso de Israel. El primer día de Tisri era una fiesta especial de la luna nueva llamada fiesta del Toque de Trompeta. Ese día los sacerdotes tocaban las trompetas mientras se ofrecían los sacrificios a Jehová (Números 10:10; 29:1). La ocasión preparaba a los israelitas para el Día de Expiación anual, el 10 de Tisri, y la alegre fiesta de la Recolección, que se celebraba del 15 al 21 del mismo mes.
5 En “el primer día del séptimo mes”, “todo el pueblo” se reunió, posiblemente a instancias de Nehemías y Esdras. Se convocó a hombres, mujeres y “todos los de suficiente inteligencia como para escuchar”. De modo que hubo niños presentes y atentos mientras Esdras leyó la Ley de pie en una tribuna “desde el amanecer hasta el mediodía” (Nehemías 8:1-4).

(NEHEMÍAS 8:3)

“Y continuó leyendo de ella en voz alta delante de la plaza pública que está delante de la Puerta del Agua, desde el amanecer hasta el mediodía, enfrente de los hombres y de las mujeres y de los demás inteligentes; y los oídos de todo el pueblo estaban [atentos] al libro de la ley.”

*** w13 15/10 pág. 21 párr. 2 Lecciones de una oración bien preparada ***
De modo que el primer día de tisri fueron a la plaza pública para escuchar a Esdras y a otros levitas leer y explicar la Ley de Dios (vea la ilustración 1). Familias enteras, incluso los niños con edad suficiente para entender lo que se decía, estuvieron allí de pie, prestando atención “desde el amanecer hasta el mediodía”. ¡Qué buen ejemplo! Hoy, por lo general, nos reunimos en cómodos Salones del Reino, pero aun así a veces nos distraemos y pensamos en cosas menos importantes. ¿Le ha pasado a usted? En ese caso, fíjese en lo que hicieron aquellos israelitas: no solo escucharon, sino que dejaron que las palabras les llegaran al corazón. Tanto es así que comenzaron a llorar al darse cuenta de que habían estado desobedeciendo la Ley (Neh. 8:1-9).

(NEHEMÍAS 8:6)

“Entonces Esdras bendijo a Jehová el Dios [verdadero], el Grande, a lo que todo el pueblo contestó: “¡Amén! ¡Amén!”, con el alzamiento de las manos. Entonces se inclinaron y se postraron ante Jehová, rostros a tierra.”

*** it-2 pág. 687 Posturas y ademanes ***
La idea de postrarse se comunica a menudo en las Escrituras con expresiones como “caer” o “caer rostro a tierra”, lo que por lo general se hacía cayendo a tierra sobre las rodillas e inclinándose hacia adelante para apoyarse sobre las manos, o, más frecuentemente, apoyándose sobre los antebrazos y tocando el suelo con la cabeza. (Gé 24:26, 48; Ne 8:6; Nú 16:22, 45; Mt 26:39.) Si la persona estaba apesadumbrada u oraba con gran fervor, solía echarse con el rostro a tierra y el cuerpo estirado.

(NEHEMÍAS 8:7)

“Y Jesúa y Baní y Serebías, Jamín, Aqub, Sabetai, Hodías, Maaseya, Quelitá, Azarías, Jozabad, Hanán, Pelayá, aun los levitas, estaban explicando la ley al pueblo, mientras el pueblo estaba en postura enhiesta.”

*** it-1 pág. 819 Entendimiento ***
Sin embargo, aunque la persona pueda comprender básicamente lo que se le ha dicho, el entendimiento es capaz de ir más allá de una simple comprensión. Supone obtener el verdadero significado y sentido del mensaje, con la capacidad de evaluarlo, beneficiarse de él y saber la acción que este exige. Cuando el sacerdote Esdras leyó la Ley delante del pueblo en Jerusalén, se reunió a “todos los de suficiente inteligencia [del heb. bin] como para escuchar”, pero aunque la mente de estos era madura, capaz de entender todas las palabras, los levitas “estaban explicando la ley al pueblo [instruyendo al pueblo en la Ley, o dando entendimiento (forma de bin)], [...] leyendo en voz alta del libro, de la ley del Dios verdadero, la cual se exponía, y había el ponerle significado; y continuaron dando entendimiento en la lectura”. (Ne 8:2, 3, 7, 8.)

(NEHEMÍAS 8:8)

“Y continuaron leyendo en voz alta del libro, de la ley del Dios [verdadero], la cual se exponía, y había el poner[le] significado; y continuaron dando entendimiento en la lectura.”

*** w06 1/2 pág. 11 Puntos sobresalientes del libro de Nehemías ***
8:8. Como maestros que somos de la Palabra de Dios, le ‘ponemos significado’ cuando articulamos bien las palabras y les damos el debido énfasis, así como cuando explicamos correctamente el sentido de las Escrituras y su aplicación práctica.

*** w96 15/5 pág. 16 párr. 2 Leamos la Palabra de Dios y sirvámosle en verdad ***
Leemos: “Continuaron leyendo en voz alta del libro, de la ley del Dios verdadero, la cual se exponía, y había el ponerle significado; y continuaron dando entendimiento en la lectura”. (Nehemías 8:8.) Algunos piensan que los judíos no entendían bien el hebreo y necesitaban de una paráfrasis en arameo. Sin embargo, el texto no indica que se tratara de una simple aclaración de términos lingüísticos. Esdras y sus acompañantes expusieron la Ley de suerte que el pueblo entendiera sus principios y los pusiera por obra. De la misma manera, las publicaciones y reuniones cristianas sirven para ‘ponerle significado’ a la Palabra de Dios; igual propósito cumplen los ancianos nombrados, que están ‘capacitados para enseñar’. (1 Timoteo 3:1, 2; 2 Timoteo 2:24.)

*** it-1 pág. 171 Arameo ***
Algunos años después del regreso de los judíos del exilio en Babilonia, el sacerdote Esdras leyó el libro de la Ley a los judíos congregados en Jerusalén y varios levitas se lo fueron explicando al pueblo, tal como dice Nehemías 8:8: “Continuaron leyendo en voz alta del libro, de la ley del Dios verdadero, la cual se exponía, y había el ponerle significado; y continuaron dando entendimiento en la lectura”. Esta exposición o interpretación quizás haya supuesto parafrasear el texto hebreo en arameo, posiblemente debido a que los hebreos habían adoptado el idioma arameo durante su estancia en Babilonia. No obstante, también debió incluir un comentario del texto, de modo que los judíos, aun en el caso de que entendieran el hebreo, comprendieran mejor el significado profundo de lo que se estaba leyendo.

*** it-1 pág. 1102 Hebreo, II ***
En Nehemías 8:8 se dice que cuando se leyó la Ley al pueblo se le ‘puso significado’ y se le ‘dio entendimiento’. Se ha sugerido que esto se debió a que los repatriados no entendían muy bien el hebreo y fue necesario parafrasear la Ley en arameo. Sin embargo, el propio texto parece referirse más a una explicación de sentido y aplicación de lo que la Ley enseñaba que a alguna aclaración lingüística o gramatical. (Compárese con Mt 13:14, 51, 52; Lu 24:27; Hch 8:30, 31.)

*** si pág. 89 párr. 10 Libro bíblico número 16: Nehemías ***
Se convoca entonces una asamblea de ocho días en la plaza pública junto a la Puerta del Agua. Esdras empieza el programa desde una tribuna de madera. Bendice a Jehová y luego lee del libro de la Ley de Moisés desde el amanecer hasta el mediodía. Le ayudan hábilmente otros levitas, quienes explican la Ley al pueblo y siguen ‘leyendo en voz alta del libro, de la Ley del Dios verdadero, la cual se expone, y a la cual se pone significado; y continúan dando entendimiento en la lectura’ (8:8).

*** w86 15/2 pág. 26 Triunfa la adoración verdadera ***
♦ 8:8—¿De qué manera ‘se puso significado’ a la Ley?
Parece que, además de leer con énfasis y una buena pronunciación, Esdras y sus ayudantes expusieron y aplicaron los principios de la Ley de manera que el pueblo pudiera entenderlos mejor. Las publicaciones y reuniones bíblicas de los testigos de Jehová también sirven para “ponerle significado” a la Palabra de Dios.

(NEHEMÍAS 8:10)

“Y pasó a decirles: “Vayan, coman las cosas grasas y beban las cosas dulces, y envíen porciones a aquel para quien nada ha sido preparado; porque este día es santo a nuestro Señor, y no se sientan heridos, porque el gozo de Jehová es su plaza fuerte”.”

*** w13 15/10 pág. 22 párr. 3 Lecciones de una oración bien preparada ***
Sin embargo, ese no era el momento de confesar públicamente los pecados. Se trataba de un día festivo, un día para adorar a Jehová con alegría (Núm. 29:1; vea la ilustración 2). Por eso Nehemías le dijo al pueblo: “Vayan, coman las cosas grasas y beban las cosas dulces, y envíen porciones a aquel para quien nada ha sido preparado; porque este día es santo a nuestro Señor, y no se sientan heridos, porque el gozo de Jehová es su plaza fuerte”. ¿Cómo reaccionó el pueblo? Hizo caso, y su tristeza se transformó en “un gran regocijo” (Neh. 8:10-12).

*** w08 15/12 pág. 32 Preguntas de los lectores ***
Preguntas de los lectores
En Nehemías 8:10 se manda a los judíos que “coman las cosas grasas”, mientras que en Levítico 3:17 aparece esta prohibición de la Ley: “No deben comer grasa alguna”. ¿Cómo se explica esta aparente contradicción?
La palabra hebrea que se traduce “las cosas grasas” en Nehemías 8:10 es diferente de la que se traduce “grasa” en Levítico 3:17. En este último versículo aparece la palabra hebrea jélev, la cual se refiere tanto a la grasa animal como a la humana (Lev. 3:3; Jue. 3:22). El contexto del versículo 17 demuestra que los israelitas no debían comer la grasa que rodeaba los intestinos, los riñones y los lomos de los sacrificios animales, pues “toda la grasa pertenece a Jehová” (Lev. 3:14-16). Como vemos, no se podía comer la grasa de los animales que se iban a ofrecer a Jehová.
Por otro lado, la palabra que se traduce “las cosas grasas” en Nehemías 8:10 es maschmanním, y esta es la única vez que aparece en las Escrituras Hebreas. Este término se deriva del verbo schamén, que significa “estar gordo, engordar”. Parece que el sentido básico de las palabras relacionadas con este verbo es el de prosperidad y bienestar (compárese con Isaías 25:6). Uno de los derivados más comunes de este verbo es el sustantivo schémen, que a menudo se traduce “aceite”, como en la expresión “aceite de oliva” (Deu. 8:8; Lev. 24:2). Tal como se emplea en Nehemías 8:10, parece que maschmanním se refiere a una comida preparada con mucho aceite que quizás incluía carne con muy poca grasa.
Aunque los israelitas tenían prohibido comer la capa de grasa del animal, sí podían comer alimentos sabrosos. Algunos platillos, como las tortas de cereal, no se cocinaban con grasa animal, sino con aceite vegetal, que a menudo era de oliva (Lev. 2:7). De ahí que la obra Perspicacia para comprender las Escrituras explique que “‘las cosas grasas’ es una expresión que hace referencia a las porciones suculentas, a las cosas que no estaban desprovistas de carne o eran secas, sino, más bien, sustanciosas, entre las que estaban los platos sabrosos que se preparaban con aceites vegetales”.
Por supuesto, los cristianos sabemos que la prohibición de comer grasa era parte de la Ley y que nosotros no estamos sujetos a ella ni a sus normas relacionadas con los sacrificios animales (Rom. 3:20; 7:4, 6; 10:4; Col. 2:16, 17).

*** w98 15/10 pág. 20 párr. 6 Una Jerusalén fiel a su nombre ***
6 Pero ese no era el tiempo de lamentarse ni de llorar. Era una fiesta, y el pueblo había terminado la reconstrucción del muro de Jerusalén. Por tanto, Nehemías lo ayudó a alcanzar el debido estado de ánimo con estas palabras: “Vayan, coman las cosas grasas y beban las cosas dulces, y envíen porciones a aquel para quien nada ha sido preparado; porque este día es santo a nuestro Señor, y no se sientan heridos, porque el gozo de Jehová es su plaza fuerte”. El pueblo obedeció y “se fue a comer y beber y a enviar porciones y a tener un gran regocijo, porque habían entendido las palabras que se les habían dado a conocer” (Nehemías 8:10-12).

*** w95 15/1 pág. 11 párr. 3 El gozo de Jehová es nuestra plaza fuerte ***
El gozo que Jehová da es una plaza fuerte segura para los que andan en integridad en Su camino. (Proverbios 2:6-8; 10:29.) Desde luego, para tener ese gozo es necesario hacer la voluntad divina. A este respecto, fíjese en lo que ocurrió en Jerusalén en los días de Esdras. El copista Esdras y otros siervos de Dios ayudaron a que se entendiera la lectura de la Ley poniéndole significado. Luego exhortaron al pueblo: “Vayan, coman las cosas grasas y beban las cosas dulces, y envíen porciones a aquel para quien nada ha sido preparado; porque este día es santo a nuestro Señor, y no se sientan heridos, porque el gozo de Jehová es su plaza fuerte”. Cuando los judíos pusieron en práctica el conocimiento que consiguieron, sintieron un “gran regocijo” y celebraron la gozosa fiesta de las Cabañas. (Nehemías 8:1-12.) Los que tuvieron el ‘gozo de Jehová como su plaza fuerte’ cobraron vigor para adorarlo y servirle.

*** w94 1/9 pág. 14 párr. 2 ¡Regocijémonos en Jehová! ***
“El gozo de Jehová es su plaza fuerte”, o según la versión Levoratti-Trusso: “La alegría en el Señor es la Fortaleza de ustedes”. (Nehemías 8:10.) El gozo da fortaleza y es como una plaza fuerte en la que se puede recibir consuelo y protección. Hasta Jesús, que era perfecto, derivó del gozo la fuerza que contribuyó a que aguantara. “Por el gozo que fue puesto delante de él aguantó un madero de tormento, despreciando la vergüenza, y se ha sentado a la diestra del trono de Dios.” (Hebreos 12:2.) Obviamente, el poder regocijarnos cuando afrontamos dificultades es vital para la salvación.

*** w92 15/3 pág. 19 La libertad que Dios nos da trae gozo ***
El gozo de Jehová es nuestra plaza fuerte
3 Durante aquella fiesta, los judíos se dieron cuenta de la veracidad de estas palabras: “El gozo de Jehová es su plaza fuerte”. (Nehemías 8:10.) Ese gozo es nuestra plaza fuerte también si estamos firmemente de parte de la libertad que Dios nos da siendo Testigos dedicados y bautizados de Jehová. Entre nosotros hay quienes han sido ungidos con espíritu santo y adoptados en la familia de Dios como coherederos celestiales con Cristo. (Romanos 8:15-23.) La gran mayoría de nosotros hoy día esperamos vivir en un paraíso terrestre. (Lucas 23:43.) ¡Cuánto gozo debemos manifestar!

*** it-1 pág. 1040 Grasa ***
El que la prohibición aplicase a toda la grasa no se contradice con el texto de Deuteronomio 32:14, que dice que Jehová dio a Israel “grasa de carneros” para comer. Esta es una expresión figurativa que hace referencia a lo mejor del rebaño o, tal como traduce la frase la Versión Popular, “lo mejor de los corderos”. (Véanse también BR, Mod, TA.) Este sentido poético se indica además en las expresiones que vienen a continuación en este mismo versículo, referentes a “la grasa de los riñones del trigo” y la “sangre de la uva”. Lo mismo sucede en Nehemías 8:10, donde se le manda al pueblo: “Vayan, coman las cosas grasas”. Por esta declaración no podemos concluir que consumieron literalmente grasa. “Las cosas grasas” es una expresión que hace referencia a las porciones suculentas, a las cosas que no estaban desprovistas de carne o eran secas, sino, más bien, sustanciosas, entre las que estaban los platos sabrosos que se preparaban con aceites vegetales. Por eso, otras versiones muestran que se les animaba a comer “buenas tajadas” (NBE), “ricos manjares” (Val, 1989) o “buenos platos” (EMN, 1988).

(NEHEMÍAS 8:13)

“Y al segundo día los cabezas de los padres de todo el pueblo, los sacerdotes y los levitas, se reunieron [en torno] a Esdras el copista, aun para adquirir perspicacia en las palabras de la ley.”

*** w98 15/10 págs. 20-21 Una Jerusalén fiel a su nombre ***
Otra reunión alegre
8 El segundo día de ese mes especial “los cabezas de los padres de todo el pueblo, los sacerdotes y los levitas, se reunieron en torno a Esdras el copista, aun para adquirir perspicacia en las palabras de la ley” (Nehemías 8:13). Esdras estaba cualificado para dirigir aquella reunión, pues “había preparado su corazón para consultar la ley de Jehová y para ponerla por obra y para enseñar en Israel disposiciones reglamentarias y justicia” (Esdras 7:10). En ella posiblemente se destacaron facetas en las que el pueblo de Dios tenía que cumplir mejor el pacto de la Ley. De interés inmediato eran los preparativos para la cercana celebración de la fiesta de las Cabañas.

(NEHEMÍAS 8:14)

“Entonces hallaron escrito en la ley que Jehová había mandado por medio de Moisés que los hijos de Israel deberían morar en cabañas durante la fiesta del séptimo mes,”

*** it-1 pág. 932 Fiesta de las cabañas ***
Durante los siete días de la fiesta, todos los asistentes tenían que morar en cabañas (heb. suk•kóhth). Por lo general, había una cabaña para cada familia. (Éx 34:23; Le 23:42.) Estas cabañas se levantaban en los patios de las casas, en los techos de las moradas, en los atrios del templo, en las plazas públicas y en los caminos, a una distancia de la ciudad que no excediera el camino de un sábado. Tenían que hacerlas del “fruto de árboles espléndidos”, frondas de palmeras, ramas mayores de árboles frondosos y álamos. (Le 23:40.) En los días de Esdras las cabañas se hicieron con hojas de olivo y de árboles oleíferos, hojas de mirto (muy aromáticas), hojas de palma y de árboles ramosos. El hecho de que todo el pueblo, ricos y pobres por igual, morasen en cabañas y hasta comiesen durante siete días en ellas, y el que todas estuviesen hechas de los mismos materiales, llevados de los valles y montañas del país, realzaba la absoluta igualdad que todos compartían en la fiesta. (Ne 8:14-16.)

(NEHEMÍAS 8:15)

“y que deberían hacer una proclamación y hacer pasar un pregón por todas sus ciudades y por toda Jerusalén, y decir: “Salgan a la región montañosa y traigan hojas de olivo y las hojas de árboles oleíferos y hojas de mirto y hojas de palma y las hojas de árboles ramosos para hacer cabañas, conforme a lo que está escrito”.”

*** it-1 pág. 932 Fiesta de las cabañas ***
Durante los siete días de la fiesta, todos los asistentes tenían que morar en cabañas (heb. suk•kóhth). Por lo general, había una cabaña para cada familia. (Éx 34:23; Le 23:42.) Estas cabañas se levantaban en los patios de las casas, en los techos de las moradas, en los atrios del templo, en las plazas públicas y en los caminos, a una distancia de la ciudad que no excediera el camino de un sábado. Tenían que hacerlas del “fruto de árboles espléndidos”, frondas de palmeras, ramas mayores de árboles frondosos y álamos. (Le 23:40.) En los días de Esdras las cabañas se hicieron con hojas de olivo y de árboles oleíferos, hojas de mirto (muy aromáticas), hojas de palma y de árboles ramosos. El hecho de que todo el pueblo, ricos y pobres por igual, morasen en cabañas y hasta comiesen durante siete días en ellas, y el que todas estuviesen hechas de los mismos materiales, llevados de los valles y montañas del país, realzaba la absoluta igualdad que todos compartían en la fiesta. (Ne 8:14-16.)

(NEHEMÍAS 8:16)

“Y el pueblo procedió a salir y a traer[las] y a hacerse cabañas, cada uno sobre su propio techo y en sus patios y en los patios de la casa del Dios [verdadero] y en la plaza pública de la Puerta del Agua y en la plaza pública de la Puerta de Efraín.”

*** it-1 pág. 932 Fiesta de las cabañas ***
Durante los siete días de la fiesta, todos los asistentes tenían que morar en cabañas (heb. suk•kóhth). Por lo general, había una cabaña para cada familia. (Éx 34:23; Le 23:42.) Estas cabañas se levantaban en los patios de las casas, en los techos de las moradas, en los atrios del templo, en las plazas públicas y en los caminos, a una distancia de la ciudad que no excediera el camino de un sábado. Tenían que hacerlas del “fruto de árboles espléndidos”, frondas de palmeras, ramas mayores de árboles frondosos y álamos. (Le 23:40.) En los días de Esdras las cabañas se hicieron con hojas de olivo y de árboles oleíferos, hojas de mirto (muy aromáticas), hojas de palma y de árboles ramosos. El hecho de que todo el pueblo, ricos y pobres por igual, morasen en cabañas y hasta comiesen durante siete días en ellas, y el que todas estuviesen hechas de los mismos materiales, llevados de los valles y montañas del país, realzaba la absoluta igualdad que todos compartían en la fiesta. (Ne 8:14-16.)

15-21 de febrero de 2016
Nehemías 9 a 11

(NEHEMÍAS 9:1)

“Y el día veinticuatro de este mes los hijos de Israel se reunieron con ayuno, y con saco y tierra sobre sí.”

*** w86 15/2 pág. 26 Triunfa la adoración verdadera ***
♦ 9:1—¿Por qué se vistieron de saco y tierra los israelitas?
El que se vistieran de saco —una prenda de vestir de color oscuro hecha de tejidos de pelo de cabra— era una señal de tristeza. De manera similar, el poner tierra o ceniza sobre su cabeza o cuerpo significaba gran lamento o humillación. (1 Samuel 4:12; 2 Samuel 13:19.) Los judíos lo hicieron para demostrar el reconocimiento doloroso y humilde de sus pecados. Después de esto hicieron un ‘contrato’ de confesión, “un arreglo fidedigno” (9:38). Del mismo modo, humildemente debemos reconocer y confesar nuestros pecados para poder conservar nuestra relación con Dios. (1 Juan 1:6-9.)

(NEHEMÍAS 9:3)

“Entonces se levantaron en su lugar y leyeron en voz alta del libro de la ley de Jehová su Dios una cuarta parte del día; y otra cuarta parte estuvieron haciendo confesión e inclinándose ante Jehová su Dios.”

*** w13 15/10 pág. 22 Lecciones de una oración bien preparada ***
UN DÍA PARA CONFESAR
5 Finalmente, dos días después de terminada la fiesta, el 24 de tisri, llegó el momento de que la nación confesara públicamente que había desobedecido la Ley. Ahora no se trataba de un día para comer y festejar. Los israelitas ayunaron y se vistieron con tela áspera en señal de duelo. Por la mañana se volvió a leer la Ley de Dios durante unas tres horas y por la tarde “estuvieron haciendo confesión e inclinándose ante Jehová su Dios” (vea la ilustración 5). Fue entonces cuando los levitas, en nombre de todo el pueblo, le dirigieron a Jehová la memorable oración que mencionamos al principio (Neh. 9:1-4; vea la ilustración 6).

(NEHEMÍAS 9:5)

“Y los levitas Jesúa y Qadmiel, Baní, Hasabneya, Serebías, Hodías, Sebanías [y] Petahías pasaron a decir: “Levántense, bendigan a Jehová su Dios desde tiempo indefinido hasta tiempo indefinido. Y que bendigan tu glorioso nombre, que es ensalzado sobre toda bendición y alabanza.”

*** w13 15/10 pág. 21 párr. 1 Lecciones de una oración bien preparada ***
“LEVÁNTENSE, bendigan a Jehová su Dios desde tiempo indefinido hasta tiempo indefinido.” Con esta entusiasta invitación, los levitas convocaron al pueblo de Israel para dirigirle a Jehová una oración, una de las más largas que aparecen en la Biblia (Neh. 9:4, 5). La reunión tuvo lugar en Jerusalén el día 24 de tisri (el séptimo mes judío) del año 455 antes de nuestra era.

*** w13 15/10 pág. 23 Lecciones de una oración bien preparada ***
ALABARON EL GLORIOSO NOMBRE DE DIOS
8 Aunque los levitas habían pensado muy bien su oración, desde el comienzo reconocieron humildemente que sus palabras no bastarían para alabar a Jehová como se merece. Así es, cuando le pidieron que le permitiera al pueblo alabarlo, dijeron que el glorioso nombre de Dios está muy por encima de “toda bendición y alabanza” (Neh. 9:5).

(NEHEMÍAS 9:6)

“”Tú eres Jehová, tú solo; tú mismo has hecho los cielos, [aun] el cielo de los cielos, y todo su ejército, la tierra y todo lo que hay sobre ella, los mares y todo lo que hay en ellos; y tú los estás conservando vivos a todos ellos; y el ejército de los cielos se está inclinando ante ti.”

*** w13 15/10 pág. 23 párr. 9 Lecciones de una oración bien preparada ***
La oración de los levitas continúa así: “Tú eres Jehová, tú solo; tú mismo has hecho los cielos, aun el cielo de los cielos, y todo su ejército, la tierra y todo lo que hay sobre ella, los mares y todo lo que hay en ellos; y tú los estás conservando vivos a todos ellos; y el ejército de los cielos se está inclinando ante ti” (Neh. 9:6). En efecto, Jehová creó el universo entero con sus innumerables estrellas y galaxias, comparables a un ejército. También creó todo lo que hay en nuestro precioso planeta. Rebosante de vida, la Tierra alberga una asombrosa variedad de especies que se reproducen según su género. Y hay otro “ejército de los cielos”: los santos ángeles de Dios, quienes presenciaron la creación del mundo (1 Rey. 22:19; Job 38:4, 7). Estas criaturas espirituales cumplen humildemente la voluntad de Dios ayudando a los seres humanos pecadores que “van a heredar la salvación” (Heb. 1:14). Imitemos su humildad y sirvamos a Jehová unidamente, como un ejército bien entrenado (1 Cor. 14:33, 40).

*** it-1 pág. 475 Cielo ***
“Los cielos de los cielos.” La expresión “los cielos de los cielos” parece referirse a los cielos más elevados. En vista de que los cielos se extienden desde la Tierra en todas direcciones, “los cielos de los cielos” deben abarcar todos los cielos físicos, sin importar cuán vastos sean. (Dt 10:14; Ne 9:6.)

(NEHEMÍAS 9:7)

“Tú eres Jehová el Dios [verdadero], que escogiste a Abrán y lo sacaste de Ur de los caldeos y constituiste su nombre en Abrahán.”

*** w13 15/10 págs. 23-24 párr. 10 Lecciones de una oración bien preparada ***
A continuación, los levitas se centraron en cómo trató Dios a Abrán. Este no había podido tener hijos con su esposa, Sarai, pues ella era estéril. Pero cuando tenía 99 años, Jehová le cambió el nombre y lo llamó Abrahán, que significa “Padre de una Muchedumbre” (Gén. 17:1-6, 15, 16).

*** w13 15/10 pág. 24 párr. 10 Lecciones de una oración bien preparada ***
“Tú eres Jehová el Dios verdadero, que escogiste a Abrán y lo sacaste de Ur de los caldeos y constituiste su nombre en Abrahán.

(NEHEMÍAS 9:13)

“Y sobre el monte Sinaí bajaste, y hablaste con ellos desde el cielo, y pasaste a darles decisiones judiciales rectas y leyes de verdad, disposiciones reglamentarias y mandamientos buenos.”

*** w13 15/10 pág. 24 párr. 13 Lecciones de una oración bien preparada ***
Por ejemplo, poco después de que los israelitas salieran de Egipto, se encargó de satisfacer su necesidad espiritual: les dio leyes para que supieran cómo adorarlo. Los levitas declararon: “Sobre el monte Sinaí bajaste, y hablaste con ellos desde el cielo, y pasaste a darles decisiones judiciales rectas y leyes de verdad, disposiciones reglamentarias y mandamientos” (Neh. 9:13). Jehová enseñó a su pueblo, los herederos de la Tierra Prometida, a vivir a la altura de su santo nombre. Pero ellos enseguida olvidaron lo que habían aprendido

(NEHEMÍAS 9:27)

“Debido a esto, los diste en la mano de sus adversarios, que siguieron causándoles angustia; pero en el tiempo de su angustia ellos clamaban a ti, y tú mismo oías desde los mismos cielos; y en conformidad con tu abundante misericordia les dabas salvadores que los salvaban de la mano de sus adversarios.”

*** w86 1/6 pág. 31 Preguntas de los lectores ***
Después de la muerte de Josué, Israel se apartó de la adoración verdadera y otros pueblos le causaron aflicción. Jueces 2:16 dice: “De modo que Jehová levantaba jueces, y éstos los salvaban de la mano de sus pilladores”. El primer hombre que Jehová levantó como juez o “salvador” se llamó Otniel. (Jueces 3:9.) Después de él vinieron Ehúd, Samgar, Baraq, Gedeón, Tolá, Jaír, Jefté, Ibzán, Elón, Abdón y Sansón.
Aparte de estos 12, la Biblia menciona, en lo que toca a dictar juicio, a Débora, Elí y a Samuel. (Jueces 4:4; 1 Samuel 4:16-18; 7:15, 16.) Sin embargo, a Débora primero se le llama profetisa y estuvo relacionada con el juez Baraq, quien, en particular, tomó la delantera en librar al pueblo de la opresión. De manera similar, Elí fue principalmente un sumo sacerdote, no un “salvador” que a través de una batalla condujera a Israel a la libertad. (Nehemías 9:27.)

(NEHEMÍAS 9:32)

“”Y ahora, oh Dios nuestro, el Dios grande, poderoso e inspirador de temor, que guardas el pacto y bondad amorosa, no dejes que toda la penalidad que nos ha hallado a nosotros, a nuestros reyes, a nuestros príncipes y a nuestros sacerdotes y a nuestros profetas y a nuestros antepasados y a todo tu pueblo, desde los días de los reyes de Asiria hasta este día, parezca pequeña delante de ti.”

*** w13 15/10 pág. 23 párr. 7 Lecciones de una oración bien preparada ***
Los levitas solo le hicieron una humilde petición personal a Jehová. Hacia el final de su oración le pidieron que tuviera en cuenta todos los sufrimientos por los que había pasado la nación: “Y ahora, oh Dios nuestro, el Dios grande, poderoso e inspirador de temor, que guardas el pacto y bondad amorosa, no dejes que toda la penalidad que nos ha hallado a nosotros, a nuestros reyes, a nuestros príncipes y a nuestros sacerdotes y a nuestros profetas y a nuestros antepasados y a todo tu pueblo, desde los días de los reyes de Asiria hasta este día, parezca pequeña delante de ti” (Neh. 9:32). ¿Qué aprendemos de los levitas? Que en nuestras oraciones primero debemos alabar y dar gracias a Jehová y después hacerle nuestras peticiones personales.

(NEHEMÍAS 9:38)

“”Así que, en vista de todo esto, estamos contratando un arreglo fidedigno, tanto por escrito como autenticado por el sello de nuestros príncipes, nuestros levitas [y] nuestros sacerdotes”.”

*** w98 15/10 pág. 21 párrs. 10-11 Una Jerusalén fiel a su nombre ***
Luego los levitas recordaron la misericordia que Dios le había tenido a su pueblo desviado, alabaron a Jehová con expresiones hermosas y contrataron “un arreglo fidedigno”, autenticado por el sello de los príncipes, levitas y sacerdotes (Nehemías 9:1-38).
11 El pueblo en general juró cumplir el “arreglo fidedigno” escrito. Estaban dispuestos a “andar en la ley del Dios verdadero”, y acordaron no casarse con los habitantes de “los pueblos del país” (Nehemías 10:28-30). Además, los judíos se comprometieron a guardar el sábado, a hacer una contribución económica anual para el apoyo de la adoración verdadera, a proveer leña para el altar de sacrificio, a dar el primogénito de sus rebaños y vacadas para sacrificio y a llevar las primicias del fruto de la tierra a los comedores del templo. Estaba claro que se habían resuelto a ‘no descuidar la casa de su Dios’ (Nehemías 10:32-39).

*** it-1 págs. 55-56 Adonías ***
3. Uno de “los cabezas del pueblo” cuyo descendiente, si no fue él mismo, autenticó por sello junto con ciertos príncipes y levitas el contrato de confesión que hicieron los israelitas repatriados en los días de Nehemías y Esdras. (Ne 9:38; 10:1, 14, 16.) Algunos creen que era el mismo que el Adoniqam de Esdras 2:13, cuyos descendientes, un total de 666, volvieron de Babilonia con Zorobabel en 537 a. E.C. Parece confirmar esto una comparación de los nombres de aquellos que, como representantes del pueblo, sellaron la resolución (Ne 10) y de los que figuran como cabezas de los exiliados que regresaron (Esd 2).

*** it-1 pág. 1004 Genealogía ***
El capítulo 10 de Nehemías presenta una serie de nombres que autenticaron con su sello un “arreglo fidedigno” para cumplir los mandamientos de Dios. (Ne 9:38.) Los nombres que se dan en estas listas pueden referirse a las casas implicadas en los acuerdos, representadas por su cabeza ancestral, y no necesariamente a personas individuales. (Compárese con Esd 10:16.) Puede pensarse así porque muchos de los nombres que están en la lista corresponden a los de aquellos que regresaron de Babilonia junto con Zorobabel unos ochenta años antes. Por lo tanto, aunque algunos de los implicados tuvieran el mismo nombre que el cabeza ancestral, es posible que solo hayan sido representantes de esas casas ancestrales.

*** it-2 pág. 478 Nehemías ***
Luego se extendió un contrato de confesión escrito, o “arreglo fidedigno”, que autenticaron los príncipes, los levitas y los sacerdotes. Nehemías, el “Tirsatá [gobernador]”, fue el primero en autenticarlo con su sello. (Ne 8:13–10:1.) Todo el pueblo concordó en abstenerse de celebrar matrimonios mixtos con extranjeros, en observar el sábado y apoyar el servicio del templo. A continuación, se seleccionó por suertes a una persona de cada diez para que morara permanentemente en Jerusalén. (Ne 10:28–11:1.)

*** it-2 pág. 989 Sello ***
El que una persona pusiera su sello en un documento significaría que aceptaba los términos contenidos en él. (Ne 9:38; 10:1.)

(NEHEMÍAS 10:1)

“Ahora bien, autenticándolo por sello estuvieron: Nehemías el Tirsatá, hijo de Hacalías, y Sedequías,”

*** it-1 págs. 55-56 Adonías ***
3. Uno de “los cabezas del pueblo” cuyo descendiente, si no fue él mismo, autenticó por sello junto con ciertos príncipes y levitas el contrato de confesión que hicieron los israelitas repatriados en los días de Nehemías y Esdras. (Ne 9:38; 10:1, 14, 16.) Algunos creen que era el mismo que el Adoniqam de Esdras 2:13, cuyos descendientes, un total de 666, volvieron de Babilonia con Zorobabel en 537 a. E.C. Parece confirmar esto una comparación de los nombres de aquellos que, como representantes del pueblo, sellaron la resolución (Ne 10) y de los que figuran como cabezas de los exiliados que regresaron (Esd 2).

*** it-1 pág. 1004 Genealogía ***
El capítulo 10 de Nehemías presenta una serie de nombres que autenticaron con su sello un “arreglo fidedigno” para cumplir los mandamientos de Dios. (Ne 9:38.) Los nombres que se dan en estas listas pueden referirse a las casas implicadas en los acuerdos, representadas por su cabeza ancestral, y no necesariamente a personas individuales. (Compárese con Esd 10:16.) Puede pensarse así porque muchos de los nombres que están en la lista corresponden a los de aquellos que regresaron de Babilonia junto con Zorobabel unos ochenta años antes. Por lo tanto, aunque algunos de los implicados tuvieran el mismo nombre que el cabeza ancestral, es posible que solo hayan sido representantes de esas casas ancestrales.

*** it-2 pág. 989 Sello ***
El que una persona pusiera su sello en un documento significaría que aceptaba los términos contenidos en él. (Ne 9:38; 10:1.)

(NEHEMÍAS 10:14)

“Los cabezas del pueblo: Parós, Pahat-moab, Elam, Zatú, Baní,”

*** it-1 págs. 55-56 Adonías ***
3. Uno de “los cabezas del pueblo” cuyo descendiente, si no fue él mismo, autenticó por sello junto con ciertos príncipes y levitas el contrato de confesión que hicieron los israelitas repatriados en los días de Nehemías y Esdras. (Ne 9:38; 10:1, 14, 16.) Algunos creen que era el mismo que el Adoniqam de Esdras 2:13, cuyos descendientes, un total de 666, volvieron de Babilonia con Zorobabel en 537 a. E.C. Parece confirmar esto una comparación de los nombres de aquellos que, como representantes del pueblo, sellaron la resolución (Ne 10) y de los que figuran como cabezas de los exiliados que regresaron (Esd 2).

(NEHEMÍAS 10:16)

“Adonías, Bigvai, Adín,”

*** it-1 págs. 55-56 Adonías ***
3. Uno de “los cabezas del pueblo” cuyo descendiente, si no fue él mismo, autenticó por sello junto con ciertos príncipes y levitas el contrato de confesión que hicieron los israelitas repatriados en los días de Nehemías y Esdras. (Ne 9:38; 10:1, 14, 16.) Algunos creen que era el mismo que el Adoniqam de Esdras 2:13, cuyos descendientes, un total de 666, volvieron de Babilonia con Zorobabel en 537 a. E.C. Parece confirmar esto una comparación de los nombres de aquellos que, como representantes del pueblo, sellaron la resolución (Ne 10) y de los que figuran como cabezas de los exiliados que regresaron (Esd 2).

(NEHEMÍAS 10:32)

“También, nos impusimos mandamientos de dar, cada uno de nosotros, la tercera parte de un siclo cada año para el servicio de la casa de nuestro Dios,”

*** it-1 pág. 1217 Impuestos ***
Los judíos del tiempo de Nehemías se comprometieron a pagar la tercera parte de un siclo (unos 75 centavos [E.U.A.]) cada año para el servicio del templo. (Ne 10:32.)

(NEHEMÍAS 10:34)

“También, echamos suertes respecto al suministro de la leña que los sacerdotes, los levitas y el pueblo deberían traer a la casa de nuestro Dios, según la casa de nuestros antepasados, a los tiempos señalados, año por año, para quemarla sobre el altar de Jehová nuestro Dios, conforme a lo que está escrito en la ley;”

*** w06 1/2 pág. 11 Puntos sobresalientes del libro de Nehemías ***
10:34. ¿Por qué se mandó al pueblo que proporcionara leña? La Ley mosaica no prescribía ofrendas de leña. Esta orden se dio por pura necesidad. Hacía falta mucha leña para quemar los sacrificios en el altar. Al parecer no había suficientes netineos (esclavos no israelitas que servían en el templo), por lo que fue preciso echar suertes a fin de asegurar el suministro continuo de leña.

*** w86 15/2 pág. 26 Triunfa la adoración verdadera ***
♦ 10:34—¿Mandaba la Ley hacer ofrendas de leña?
No, pero se necesitaba mucha leña para el fuego del altar. No debía haber muchos netineos —personas no israelitas que eran esclavos del templo y “recogedores de leña”— entre los que regresaron a Jerusalén. (Josué 9:23, 27.) De modo que, para asegurar que siempre hubiera suficiente leña, se echaron suertes a fin de determinar qué división tribual debería proveerla durante cierto tiempo en particular.

(NEHEMÍAS 10:39)

“Porque es a los comedores adonde los hijos de Israel y los hijos de los levitas deben traer la contribución del grano, del vino nuevo y del aceite, y allí es donde están los utensilios del santuario, y los sacerdotes que ministran, y los porteros y los cantores; y no debemos descuidar la casa de nuestro Dios.”

*** w98 15/10 págs. 21-22 Una Jerusalén fiel a su nombre ***
No debemos descuidar la casa de Dios
10 En el pueblo de Dios hay un momento y un lugar adecuados para corregir las deficiencias serias. Esdras y Nehemías pensaron que este era el momento apropiado y programaron un día de ayuno el 24 de Tisri. Se leyó de nuevo la Ley de Dios y el pueblo confesó sus pecados. Luego los levitas recordaron la misericordia que Dios le había tenido a su pueblo desviado, alabaron a Jehová con expresiones hermosas y contrataron “un arreglo fidedigno”, autenticado por el sello de los príncipes, levitas y sacerdotes (Nehemías 9:1-38).
11 El pueblo en general juró cumplir el “arreglo fidedigno” escrito. Estaban dispuestos a “andar en la ley del Dios verdadero”, y acordaron no casarse con los habitantes de “los pueblos del país” (Nehemías 10:28-30). Además, los judíos se comprometieron a guardar el sábado, a hacer una contribución económica anual para el apoyo de la adoración verdadera, a proveer leña para el altar de sacrificio, a dar el primogénito de sus rebaños y vacadas para sacrificio y a llevar las primicias del fruto de la tierra a los comedores del templo. Estaba claro que se habían resuelto a ‘no descuidar la casa de su Dios’ (Nehemías 10:32-39).
12 El pueblo de Jehová tampoco debe descuidar hoy su privilegio de ‘rendir servicio sagrado’ en los patios del gran templo espiritual de Jehová (Revelación 7:15). Este servicio incluye las oraciones sinceras y regulares por el progreso de la adoración de Jehová. A fin de vivir en armonía con tales oraciones, debemos prepararnos para las reuniones cristianas y participar en ellas, colaborar en la predicación de las buenas nuevas y ayudar a las personas interesadas volviéndolas a visitar y, si es posible, estudiando la Biblia con ellas. Muchos cristianos que no quieren descuidar la casa de Dios ofrecen donaciones materiales para la obra de predicar y el mantenimiento de los lugares de culto. Quizá también podamos colaborar en la construcción de lugares de reunión que urjan, así como en mantenerlos limpios y arreglados. Un modo importante de demostrar nuestro amor por la casa espiritual de Dios es promoviendo la paz entre los hermanos en la fe y ayudando a los necesitados en sentido material o espiritual (Mateo 24:14; 28:19, 20; Hebreos 13:15, 16).

*** it-1 pág. 663 Descuido ***
Uno de los varios términos hebreos que comunican la idea de “descuido” es el verbo fa•ráʽ, que literalmente significa “soltar”. (Nú 5:18.) En relación con el arreglo personal, se ha traducido por ‘dejar desaseado’ (Le 10:6); ‘andar desenfrenado’, cuando se refiere a la conducta, y ‘descuidar’ o ‘esquivar’, al hablar de la disciplina. (Éx 32:25; Pr 13:18; 15:32; compárese con Éx 5:4, donde se traduce por ‘desistir’.) Otro de los verbos hebreos es ʽa•záv, cuyo significado literal es ‘abandonar; dejar’. (Dt 29:25; 1Re 12:8.) Nehemías animó a los adoradores verdaderos a no “descuidar” la casa del Dios verdadero. (Ne 10:39; compárese con 13:11.)

(NEHEMÍAS 11:1)

“Ahora bien, los príncipes del pueblo tenían su morada en Jerusalén; pero en cuanto a los demás del pueblo, echaron suertes para hacer que uno de cada diez entrara a morar en Jerusalén la ciudad santa, y las otras nueve partes en las otras ciudades.”

*** it-2 pág. 72 Jerusalén ***
Jerusalén era entonces “ancha y grande, [pero] había pocas personas dentro de ella”. (Ne 7:4.) Después de la lectura pública de las Escrituras y las celebraciones que se llevaron a cabo en la “plaza pública que estaba delante de la Puerta del Agua”, al E. de la ciudad (Ne 3:26; 8:1-18), se hizo que uno de cada diez israelitas entrase a morar en Jerusalén a fin de aumentar la población de la ciudad. Se echaron suertes para tomar esta decisión, aunque hubo quienes se ofrecieron voluntarios. (Ne 11:1, 2.)

(NEHEMÍAS 11:2)

“Además, el pueblo bendijo a todos los hombres que se ofrecieron voluntariamente para morar en Jerusalén.”

*** w06 1/2 pág. 11 Puntos sobresalientes del libro de Nehemías ***
11:2. Abandonar la posesión hereditaria para mudarse a Jerusalén suponía gastos y algunas desventajas. Los que se ofrecieron voluntariamente demostraron un espíritu de abnegación. Nosotros también podemos demostrar el mismo espíritu ofreciéndonos para servir cuando se presente la oportunidad, como en las asambleas o en otras ocasiones.

*** it-2 pág. 72 Jerusalén ***
Jerusalén era entonces “ancha y grande, [pero] había pocas personas dentro de ella”. (Ne 7:4.) Después de la lectura pública de las Escrituras y las celebraciones que se llevaron a cabo en la “plaza pública que estaba delante de la Puerta del Agua”, al E. de la ciudad (Ne 3:26; 8:1-18), se hizo que uno de cada diez israelitas entrase a morar en Jerusalén a fin de aumentar la población de la ciudad. Se echaron suertes para tomar esta decisión, aunque hubo quienes se ofrecieron voluntarios. (Ne 11:1, 2.)

*** w86 15/2 pág. 26 Triunfa la adoración verdadera ***
♦ 11:2—¿Por qué se “bendijo” a los que se ofrecieron voluntariamente?
El dejar sus posesiones hereditarias y mudarse a Jerusalén pudo haber resultado en gastos y ciertamente en desventajas. Además, los que moraban en la ciudad tal vez estaban expuestos a diversos peligros. Bajo tales circunstancias, el resto del pueblo consideró que estos voluntarios eran dignos de encomio y, sin duda, oraron para que Jehová los bendijera.

(NEHEMÍAS 11:5)

“y Maaseya hijo de Baruc hijo de Colhozé hijo de Hazaya hijo de Adaya hijo de Joiarib hijo de Zacarías hijo del selanita.”

*** it-1 pág. 227 Asaya ***
4. Primogénito de los silonitas (1Cr 9:1-3, 5); su nombre figura en la lista de los que regresaron del cautiverio babilonio. Debido a la semejanza del significado de este nombre y del de Maaseya (Obra de Jehová), un “selanita” descendiente de Judá mencionado en Nehemías 11:5, hay quienes opinan que se trata de la misma persona: un descendiente de Selah, el hijo más joven de Judá y la hija de Súa el cananeo. (Gé 38:2, 5; véase MAASEYA núm. 17.)

(NEHEMÍAS 11:10)

“De los sacerdotes: Jedayá hijo de Joiarib, Jakín,”

*** it-2 pág. 22 Jedayá ***
4. Sacerdote (o, posiblemente, miembros de la casa paterna ya mencionada) que residió en Jerusalén a su regreso de Babilonia. El que a Jedayá se le llame “hijo de Joiarib” en Nehemías 11:10 tal vez se deba a una interpolación de un copista, como se infiere de una comparación con 1 Crónicas 9:10.

(NEHEMÍAS 11:11)

“Seraya hijo de Hilquías hijo de Mesulam hijo de Sadoc hijo de Merayot hijo de Ahitub, un caudillo de la casa del Dios [verdadero];”

*** it-1 pág. 261 Azarías ***
23. Sacerdote que vivió en Jerusalén después del exilio. (1Cr 9:11.) En la lista paralela de Nehemías (Ne 11:11) se le llama Seraya. Es posible que sea el mismo que el anterior, el núm. 22.

(NEHEMÍAS 11:23)

“Porque había un mandamiento del rey a favor de ellos, y había una provisión fija para los cantores según lo que cada día requería.”

*** it-2 pág. 444 Música ***
Más tarde, el rey mandó que hubiera “una provisión fija para los cantores según lo que cada día requería”. Aunque esta orden se atribuye a Artajerjes, lo más probable es que la decretara Esdras en virtud del poder que el rey le delegó. (Ne 11:23; Esd 7:18-26.)

(NEHEMÍAS 11:29)

“y en En-rimón y en Zorá y en Jarmut,”

*** it-1 pág. 78 Ain ***
Ain estaba situada cerca de la ciudad de Rimón y, según parece, cuando se repobló de nuevo después del cautiverio babilonio, ambos nombres se combinaron en uno: En-rimón. (Ne 11:29.) Este último nombre se suele identificar hoy con Khirbet Umm er-Ramamin (Horvat Remalya), ubicada a 15 Km. al N. de Beer-seba. (Véase RIMÓN núm. 2.)

(NEHEMÍAS 11:30)

“Zanóah, Adulam y sus poblados, Lakís y sus campos, Azeqá y sus pueblos dependientes. Y se pusieron a acampar desde Beer-seba hasta el mismo valle de Hinón.”

*** it-1 pág. 298 Beer-seba ***
Llegó a representar el extremo S. de la Tierra Prometida, tal como se expresa en la frase proverbial ‘desde Dan hasta Beer-seba’ (Jue 20:1), o a la inversa, “desde Beer-seba hasta Dan”. (1Cr 21:2; 2Cr 30:5.) Después de la división de la nación en dos reinos, Beer-seba siguió significando el límite meridional del reino de Judá, como se puede ver por las expresiones “desde Gueba hasta Beer-seba” (2Re 23:8) y “desde Beer-seba hasta la región montañosa de Efraín” (donde empezaba el reino septentrional de Israel). (2Cr 19:4.) En la época posterior al exilio se usó la expresión “desde Beer-seba hasta el mismo valle de Hinón” para referirse a la zona que ocuparon los repatriados de Judá. (Ne 11:27, 30.)
Había otras ciudades de la Tierra Prometida situadas al S. de Beer-seba, de la misma manera que algunas ciudades israelitas se encontraban al N. de Dan. Sin embargo, tanto Dan como Beer-seba estaban en las fronteras naturales del país. Beer-seba se hallaba al S. de las montañas de Judá, en el confín del desierto. Además, fue una de las ciudades principales de Judá (junto con Jerusalén y Hebrón), no solo por estar bien abastecida de agua para la agricultura y la cría de ganado, sino también porque era una encrucijada de caminos importantes. Una antigua ruta iba desde Egipto hasta Beer-seba por el “Camino de los Pozos” a través de Qadés-barnea, y se unía con otro camino, por el que viajaban las caravanas de camellos de los “reinos de las especias” de la península arábiga que se dirigían a Filistea o Judá. De Ezión-guéber, en el golfo de ʽAqaba, salía otra ruta que cruzaba el Arabá, luego giraba hacia el O., pasaba por la Subida de Aqrabim y conducía a Beer-seba. De Gaza, en la llanura filistea, partía una ramificación del Camino del Mar en dirección SE. que llegaba hasta Beer-seba. Por otra parte, la ciudad estaba comunicada con el resto de Judá por un camino que salía de ella en dirección NE., remontaba la meseta, se adentraba en las montañas de Judá hasta llegar a Jerusalén y continuaba hacia el N. (Gé 22:19.)

(NEHEMÍAS 11:35)

“Lod y Onó, el valle de los artífices.”

*** it-2 págs. 551-552 Onó ***
“La llanura-valle de Onó” (Ne 6:2) posiblemente se refiera al ancho valle en el que yace Kafr ʽAna. Esta “llanura-valle” también se ha vinculado al “valle de los artífices [gueh ha•jara•schím]”. (Ne 11:35.) No obstante, algunos eruditos entienden que gueh ha•jara•schím se refiere en hebreo a otra localidad, y transliteran la expresión como un nombre propio, “Gue-hajarasim”, u otra grafía similar. (BC; CI; compárese con 1Cr 4:14.)

22-28 de febrero de 2016
Nehemías 12 y 13

(NEHEMÍAS 12:11)

“Y Joiadá mismo llegó a ser padre de Jonatán, y Jonatán mismo llegó a ser padre de Jadúa.”

*** it-2 pág. 112 Johanán ***
7. Nieto de Eliasib, el sumo sacerdote contemporáneo de Nehemías. El que en Nehemías 12:11 se le llame “Jonatán” quizás se deba a un error en la transcripción, pues los nombres “Johanán” y “Jonatán” son muy similares en hebreo. Johanán (Juan) se menciona en Nehemías 12:22, 23 y en una carta hallada entre los papiros de Elefantina, en la que se le atribuye el cargo de sumo sacerdote. (Antigüedades Judías, de F. Josefo, libro XI, cap. VII, sec. 1.)

*** it-2 pág. 119 Jonatán ***
12. Hijo de Joiadá y nieto del sumo sacerdote Eliasib. (Ne 12:10, 11.) Se cree que el versículo 11 debería leer en realidad “Johanán” en lugar de “Jonatán”, pues Nehemías 12:22, 23 llama a Johanán “hijo de Eliasib”, y en este caso “hijo” puede significar “nieto”. (Véase JOHANÁN núm. 7.)

(NEHEMÍAS 12:22)

“Los levitas en los días de Eliasib, Joiadá y Johanán y Jadúa estaban registrados como cabezas de casas paternas, también los sacerdotes, hasta la gobernación real de Darío el persa.”

*** it-1 pág. 634 Darío ***
3. En Nehemías 12:22 se encuentra el registro de los cabezas de las casas paternas levitas “en los días de Eliasib, Joiadá y Johanán y Jadúa [...] hasta la gobernación real de Darío el persa”. Ya que Eliasib era el sumo sacerdote cuando Nehemías regresó a Jerusalén (Ne 3:1), y puesto que para el tiempo de la segunda visita de Nehemías a aquella ciudad (después del año trigésimo segundo de Artajerjes [443 a. E.C.]), Joiadá tenía un hijo casado (Ne 13:28), es probable que el “Darío” mencionado fuese Darío Ocos (llamado también Notos), que reinó de 423 a 405 a. E.C.
Una carta hallada entre los papiros de Elefantina, que se cree que datan de los últimos años del siglo V a. E.C., hace referencia a “Johanán” como el sumo sacerdote de Jerusalén en aquel tiempo.

*** it-1 pág. 778 Egipto, egipcio ***
Debido a este hecho, hubo una colonia judía en Elefantina (Yeb, en egipcio), isla del Nilo cercana a Asuán, a unos 690 Km. al S. de El Cairo. Un valioso hallazgo de papiros revela las condiciones existentes en ese lugar durante el siglo V a. E.C., cuando Esdras y Nehemías cumplían con su comisión en Jerusalén. Estos documentos, escritos en arameo, contienen el nombre de Sanbalat de Samaria (Ne 4:1, 2) y del sumo sacerdote Johanán. (Ne 12:22.)

*** it-2 pág. 654 Persia, persas ***
Hasta la caída y la división del imperio. Diodoro de Sicilia nos proporciona la siguiente información respecto a los sucesores de Artajerjes Longimano en el trono de Persia: “En Asia el rey Jerjes murió tras un reinado de un año o, como algunos registran, dos meses; su hermano Sogdiano le sucedió en el trono y reinó por siete meses. Este a su vez fue asesinado por Darío, quien reinó por diecinueve años”. (Biblioteca histórica, XII, 71, 1.) El verdadero nombre de este último era Ocos, pero adoptó el de Darío (Darío II) cuando subió al trono. Al parecer se trata del Darío mencionado en Nehemías 12:22.

(NEHEMÍAS 12:27)

“Y en la inauguración del muro de Jerusalén buscaron a los levitas, para traerlos de todos sus lugares a Jerusalén para tener una inauguración y un regocijo hasta con acciones de gracias y con canto, címbalos [e] instrumentos de cuerda, y con arpas.”

*** w86 15/2 pág. 26 Triunfa la adoración verdadera ***
♦ 12:27—¿Cuándo se inauguró el muro?
El muro quedó completado el día 25 del sexto mes, Elul, del año 455 a. de la E.C. y, al mes siguiente, se celebraron grandes reuniones (6:15; 8:2; 9:1). La inauguración probablemente fue el punto culminante de aquella ocasión gozosa.

(NEHEMÍAS 12:31)

“Entonces hice subir a los príncipes de Judá sobre el muro. Además, nombré dos grandes coros y procesiones de acción de gracias, [y una de ellas iba andando] a la derecha sobre el muro hacia la Puerta de los Montones de Ceniza.”

*** it-1 pág. 876 Estiércol ***
Una de las puertas de Jerusalén era la “Puerta de los Montones de Ceniza”, llamada normalmente “Puerta del Estiércol”. (Ne 2:13; 3:13, 14; 12:31.) Estaba situada a mil codos (445 m.) al E. de la Puerta del Valle y, por lo tanto, al S. del monte Sión. Es probable que recibiese este nombre debido a los desperdicios que se amontonaban en el valle de Hinón, al que se salía por esta puerta; quizás también se sacara por ella la basura de la ciudad.

*** it-2 pág. 445 Música ***
Parece ser que en Israel el canto en grupo era principalmente antifonal, ya sea porque el coro se dividía en dos grupos vocales, alternándose en cantar estrofas paralelas, o porque un solista se alternaba con un coro que contestaba. Al parecer las Escrituras se refieren a esta acción del coro con la expresión ‘responder’. (Éx 15:21; 1Sa 18:6, 7.) El mismo estilo de escritura de algunos salmos, como el Salmo 136, muestra que se practicaba este tipo de canto. El relato sobre los dos grandes coros de acción de gracias del tiempo de Nehemías y de su papel en la inauguración del muro de Jerusalén también da a entender que cantaron de este modo. (Ne 12:31, 38, 40-42; véase CANCIÓN.)

*** it-2 pág. 760 Puerta, paso de entrada ***
Puerta de los Montones de Ceniza. A esta puerta también se la conoce como la Puerta de los Tiestos, aunque por lo general se la llama la Puerta del Estiércol. (Ne 2:13; 12:31.) Según el relato de Nehemías, estaba 1.000 codos (445 m.) al E. de la Puerta del Valle (Ne 3:13, 14),

*** it-2 pág. 760 Puerta, paso de entrada ***
Aunque no se dice, parece que la procesión inaugural salió desde la Puerta del Valle: un grupo marchó hacia el E., en dirección a la Puerta de los Montones de Ceniza, y el otro hacia el NO., pasando por la Puerta de la Esquina y la Torre de los Hornos de Cocer. (Ne 12:31-40.)

(NEHEMÍAS 12:37)

“Y a la Puerta de la Fuente, y directamente enfrente de ellos, subieron por la Escalera de la Ciudad de David, por la subida del muro más arriba de la Casa de David, y hasta la misma Puerta del Agua al oriente.”

*** it-1 pág. 641 David, Ciudad de ***
Las referencias bíblicas hasta ahora examinadas permiten deducir que si bien parece que Jerusalén se extendió con el transcurso del tiempo, la Ciudad de David evolucionó por separado. Esta diferenciación se mantuvo incluso después del cautiverio babilonio, pues durante el período de reconstrucción de los muros de Jerusalén, se hizo mención de ciertos lugares de la Ciudad de David. (Ne 3:15, 16.) “La Escalera de la Ciudad de David”, por ejemplo, parece que conducía al exterior desde el extremo meridional de la ciudad. (Ne 12:37.) Las excavaciones practicadas en este lugar han puesto al descubierto vestigios de aquella escalera y aún se ve una sección de peldaños toscamente cortados en la roca que conducen desde ese punto hacia la ladera.

*** it-2 págs. 760-761 Puerta, paso de entrada ***
Puerta de la Fuente. Esta puerta se llamaba así porque daba acceso a un manantial o fuente cercano, posiblemente En-roguel, que estaba por debajo de la confluencia del valle de Cedrón con el valle de Hinón. Probablemente se hallaba en el extremo S. de la colina oriental de la ciudad (es decir, al S. de la “Ciudad de David”). (Ne 2:14; 3:15; 12:37.) Por la Puerta de la Fuente podían salir a En-roguel los que vivían en la Ciudad de David, mientras que la Puerta de los Montones de Ceniza, al SO., era la salida más conveniente para los residentes del valle de Tiropeón y de la colina sudoccidental de la ciudad.

(NEHEMÍAS 12:38)

“Y el otro coro de acción de gracias iba andando enfrente, y yo después de él, así como la mitad de la gente, sobre el muro por encima de la Torre de los Hornos de Cocer y adelante al Muro Ancho,”

*** it-1 pág. 1176 Horno ***
“La Torre de los Hornos de Cocer” de Jerusalén se reparó bajo la dirección de Nehemías durante la restauración de los muros de la ciudad. (Ne 3:11; 12:38.) El origen del nombre es incierto, pero se ha comentado que la torre se llamó así debido a que en sus cercanías había hornos comerciales.

*** it-2 pág. 593 Panadero ***
Años más tarde, cuando se reedificaron los muros de Jerusalén bajo la supervisión de Nehemías, también se reparó “la Torre de los Hornos de Cocer”. (Ne 3:11; 12:38.) No se sabe exactamente la razón de que la torre recibiera ese nombre tan poco común, pero es posible que se debiera a que allí estaban situados los hornos de los panaderos.

*** it-2 pág. 1145 Torre ***
Las torres de Jerusalén. La Torre de los Hornos de Cocer estaba situada en el extremo NO. de la ciudad, cerca o al lado de la Puerta de la Esquina. (Ne 3:11; 12:38.) No se sabe con seguridad por qué se le dio ese nombre, pero es muy posible que se deba a que los panaderos estaban por aquellos alrededores. Puede que haya sido una de las torres que Uzías edificó durante su reinado en Jerusalén, de 829 a 778 a. E.C. (2Cr 26:9.)

(NEHEMÍAS 12:39)

“y por encima de la Puerta de Efraín y adelante a la Puerta de la [Ciudad] Vieja y hasta la misma Puerta del Pescado y la Torre de Hananel y la Torre de Meah y adelante a la Puerta de las Ovejas; y se detuvieron en la Puerta de la Guardia.”

*** it-2 pág. 758 Puerta, paso de entrada ***
Puerta de las Ovejas. El sumo sacerdote Eliasib y los sacerdotes que estaban con él reedificaron La Puerta de las Ovejas (Ne 3:1, 32; 12:39), lo que parece indicar que estaba cerca del recinto del templo. Probablemente estaba ubicada en el muro del segundo barrio, en la parte que Manasés edificó (véase a continuación “Puerta del Pescado”), cerca o en la misma esquina nororiental de la ciudad. Su nombre tal vez se debía a que se pasaba por ella con las ovejas y las cabras que se llevaban al sacrificio, o quizás a algún mercado cercano. La “puerta de las ovejas” mencionada en Juan 5:2 probablemente fuera esta misma o una posterior construida en el mismo lugar, cerca del estanque de Betzata.

*** it-2 pág. 759 Puerta, paso de entrada ***
El relato de Nehemías sobre la reconstrucción del muro y la marcha inaugural sitúa la Puerta del Pescado al O. de la Puerta de las Ovejas, probablemente cerca del extremo N. del valle de Tiropeón. (Ne 3:3; 12:39.)

*** it-2 págs. 759-760 Puerta, paso de entrada ***
Puerta de la Ciudad Vieja. La Puerta de la Ciudad Vieja estaba situada en el lado noroccidental de la ciudad, entre la Puerta del Pescado y la Puerta de Efraín. (Ne 3:6; 12:39.) En hebreo su nombre es solo “Puerta de la Vieja”, al que algunos traductores añaden la palabra “ciudad”. Se cree que se llamaba así por haber sido la entrada principal a la ciudad vieja desde el N. Debió estar en la unión del Muro Ancho (el límite septentrional de la ciudad vieja) con el muro occidental del segundo barrio. Algunos comentaristas creen que esta puerta es aquella a la que Zacarías llama “Primera Puerta” en un comentario, al parecer, alusivo a los límites oriental y occidental de la ciudad, en el que menciona las puertas que había “desde [1] la Puerta de Benjamín hasta el mismo lugar de [2] la Primera Puerta, hasta la misma [3] Puerta de la Esquina”, y de ahí hacia los límites septentrional y meridional “desde la Torre de Hananel hasta las mismas tinas de lagar del rey”. (Zac 14:10.) Otros relacionan la Puerta de la Ciudad Vieja con la “Puerta del Medio” mencionada en Jeremías 39:3. Hay quien llama a la Puerta de la Ciudad Vieja “puerta Mishneh”, y la ubica en el muro occidental del segundo barrio.

*** it-2 pág. 761 Puerta, paso de entrada ***
No se menciona la Puerta de los Caballos en el relato de la procesión inaugural, seguramente debido a que las dos procesiones se desviaron, una en la Puerta del Agua y la otra en la Puerta de la Guardia, y no recorrieron la sección de la muralla que quedaba al E. del templo, donde se hallaban la Puerta de los Caballos y la Puerta de la Inspección. (Ne 12:37-40.)

*** it-2 pág. 1145 Torre ***
hacia el E., cerca de ella y de la Puerta de las Ovejas, la Torre de Meah. Tampoco se sabe por qué se llamaba Meah, que significa “Centenar”. (Ne 3:1; 12:39.)

(NEHEMÍAS 13:1)

“En aquel día hubo lectura en el libro de Moisés a oídos del pueblo; y en él se halló escrito que el ammonita y el moabita no debían entrar en la congregación del Dios [verdadero] hasta tiempo indefinido,”

*** it-1 págs. 117-118 Ammonitas ***
Se casan con israelitas. Cuando los judíos regresaron del exilio (537 a. E.C.), un ammonita llamado Tobías fue uno de los dirigentes de la oposición a que se reedificasen los muros de Jerusalén. (Ne 4:3, 7, 8.) Después, incluso tuvo la arrogante osadía de hacer uso de un comedor del recinto del templo, hasta que Nehemías, indignado, arrojó fuera sus muebles. (Ne 13:4-8; véase TOBÍAS núm. 2.) Muchos de los exiliados judíos que regresaron habían tomado esposas ammonitas y de otras naciones, pero se les reprendió con severidad por ello y, como resultado, las despidieron. (Esd 9:1, 2; 10:10-19, 44; Ne 13:23-27.)
Después de la expulsión de Tobías del recinto del templo, se leyó y aplicó la ley de Dios registrada en Deuteronomio 23:3-6, que prohibía que los ammonitas y los moabitas entrasen en la congregación de Israel. (Ne 13:1-3.) Por lo general, se entiende que esta restricción, impuesta alrededor de mil años antes debido a que los ammonitas y los moabitas se negaron a socorrer a los israelitas cuando estos se acercaban a la Tierra Prometida, significa que estos pueblos no podrían llegar a formar parte de la nación de Israel en la condición legal de verdaderos miembros que disfrutaran de todos los derechos y privilegios propios del israelita. Sin embargo, esto no significa que los ammonitas y los moabitas no pudieran asociarse con los israelitas o residir entre ellos y beneficiarse como consecuencia de las bendiciones que Dios derramaba sobre su pueblo. Algunos ejemplos son: Zéleq, quien, como se mencionó antes, estuvo entre los guerreros principales de David, y Rut la moabita. (Rut 1:4, 16-18.)
En cuanto a este último caso, del matrimonio de Rut con Boaz se desprende que cuando las mujeres de estos pueblos se convertían a la adoración del Dios verdadero, podían casarse con hombres judíos. Además, debido a que los términos “ammonita” y “moabita” están en género masculino en el texto hebreo de Deuteronomio 23:3-6, la Misná judía (Yebamot 8:3) arguye que solo estaban excluidos de Israel los varones ammonitas y moabitas. Sin embargo, el que Esdras exigiera que los hombres judíos despidieran a sus esposas extranjeras, así como la actitud similar, ya mencionada, que adoptó Nehemías, es una prueba más de que la admisión de mujeres ammonitas y moabitas en Israel dependía de su aceptación de la adoración verdadera.

(NEHEMÍAS 13:3)

“Por lo tanto aconteció que, en cuanto oyeron la ley, empezaron a separar de Israel a toda la compañía mixta.”

*** it-1 pág. 515 Compañía mixta ***
En Nehemías 13:3 y Jeremías 25:20 la expresión “compañía mixta” designa a los que no eran israelitas. La referencia de Nehemías aplica a extranjeros, como los moabitas y los ammonitas. (Ne 13:1.) Se cree que tal vez los hijos de estos extranjeros (que eran medio israelitas) también estaban incluidos en la expresión “compañía mixta”, pues los israelitas habían despedido tanto a sus esposas extranjeras como a los hijos de estas. (Esd 10:44.)

*** w86 15/2 pág. 26 Triunfa la adoración verdadera ***
♦ 13:3—¿De quiénes se componía la “compañía mixta”?
Parece que la “compañía mixta” se componía de extranjeros, como los moabitas y los ammonitas, y de los hijos de los israelitas que se habían casado con extranjeras (13:1, 2). Acuérdese que anteriormente los judíos habían despedido a las esposas extranjeras junto con sus hijos. (Esdras 10:44.) Nuevamente los judíos habían tomado esposas extranjeras, y por eso hubo la necesidad de excluir a dichas mujeres y a sus hijos de la comunidad, de la nación misma, y así del privilegio de adorar con el pueblo de Jehová. (Nehemías 13:23-31.)

(NEHEMÍAS 13:4)

“Antes de esto, sin embargo, Eliasib el sacerdote encargado de un comedor de la casa de nuestro Dios era pariente de Tobías;”

*** w13 15/8 pág. 4 párrs. 5-6 Ustedes han sido santificados ***
(Lea Nehemías 13:4-9.) No es fácil mantenerse santo en medio de tantas malas influencias. Pensemos en el caso de Eliasib y Tobías. Eliasib era el sumo sacerdote. Tobías era ammonita y, probablemente, un representante de bajo rango del gobierno persa en Judea. Anteriormente, Tobías y sus socios se habían opuesto a que Nehemías reconstruyera las murallas de Jerusalén (Neh. 2:10). Además, los ammonitas tenían prohibida la entrada al recinto del templo (Deut. 23:3). Entonces, ¿por qué le reservó el sumo sacerdote un comedor allí a un hombre como Tobías?
6 Tobías tenía una estrecha relación con Eliasib. Tobías, al igual que su hijo Jehohanán, se había casado con una mujer judía, y muchos judíos hablaban bien de él (Neh. 6:17-19). Además, un nieto de Eliasib estaba casado con la hija de Sanbalat, gobernador de Samaria, que era uno de los colaboradores más estrechos de Tobías (Neh. 13:28). Así pues, estos lazos quizás expliquen por qué el sumo sacerdote Eliasib se dejó influir por un adversario pagano

*** w13 15/8 pág. 4 párr. 8 Ustedes han sido santificados ***
Nunca olvidemos que “las malas compañías echan a perder los hábitos útiles” (1 Cor. 15:33). Algunos de nuestros parientes podrían no ser una buena influencia en nuestra vida. Eliasib había dado un buen ejemplo a los judíos al prestarle todo su apoyo a Nehemías en la reconstrucción de las murallas de Jerusalén (Neh. 3:1). Sin embargo, poco a poco se dejó influir por Tobías y otras personas, y terminó haciendo cosas que lo contaminaron a la vista de Jehová.

(NEHEMÍAS 13:5)

“y procedió a hacerle un comedor grande, donde anteriormente habían estado poniendo con regularidad la ofrenda de grano, el olíbano, y los utensilios, y el décimo del grano, del vino nuevo y del aceite, a lo cual tienen derecho los levitas y los cantores y los porteros, y la contribución para los sacerdotes.”

*** w13 15/8 pág. 4 párr. 8 Ustedes han sido santificados ***
Nunca olvidemos que “las malas compañías echan a perder los hábitos útiles” (1 Cor. 15:33). Algunos de nuestros parientes podrían no ser una buena influencia en nuestra vida. Eliasib había dado un buen ejemplo a los judíos al prestarle todo su apoyo a Nehemías en la reconstrucción de las murallas de Jerusalén (Neh. 3:1). Sin embargo, poco a poco se dejó influir por Tobías y otras personas, y terminó haciendo cosas que lo contaminaron a la vista de Jehová.

*** w13 15/8 pág. 4 párrs. 5-6 Ustedes han sido santificados ***
(Lea Nehemías 13:4-9.) No es fácil mantenerse santo en medio de tantas malas influencias. Pensemos en el caso de Eliasib y Tobías. Eliasib era el sumo sacerdote. Tobías era ammonita y, probablemente, un representante de bajo rango del gobierno persa en Judea. Anteriormente, Tobías y sus socios se habían opuesto a que Nehemías reconstruyera las murallas de Jerusalén (Neh. 2:10). Además, los ammonitas tenían prohibida la entrada al recinto del templo (Deut. 23:3). Entonces, ¿por qué le reservó el sumo sacerdote un comedor allí a un hombre como Tobías?
6 Tobías tenía una estrecha relación con Eliasib. Tobías, al igual que su hijo Jehohanán, se había casado con una mujer judía, y muchos judíos hablaban bien de él (Neh. 6:17-19). Además, un nieto de Eliasib estaba casado con la hija de Sanbalat, gobernador de Samaria, que era uno de los colaboradores más estrechos de Tobías (Neh. 13:28). Así pues, estos lazos quizás expliquen por qué el sumo sacerdote Eliasib se dejó influir por un adversario pagano

(NEHEMÍAS 13:6)

“Y durante todo este [tiempo] yo no me hallaba en Jerusalén, porque en el año treinta y dos de Artajerjes el rey de Babilonia yo fui al rey, y algún tiempo después pedí licencia del rey.”

*** w06 1/2 pág. 11 Puntos sobresalientes del libro de Nehemías ***
13:6, nota. ¿Cuánto tiempo se ausentó Nehemías de Jerusalén? La Biblia solo dice que “algún tiempo después”, o “al final de los días”, Nehemías pidió permiso al rey para volver a Jerusalén. Por lo tanto, es imposible determinar cuánto tiempo estuvo ausente. Sin embargo, al regresar, encontró que no se estaba contribuyendo materialmente para el sacerdocio ni se observaba el sábado. Muchos habían tomado esposas extranjeras, y sus hijos ni siquiera hablaban el idioma de los judíos. Para que las condiciones se deterioraran tanto, Nehemías debió de ausentarse por bastante tiempo.

*** it-1 pág. 216 Artajerjes ***
En Nehemías 13:6 se menciona el “año treinta y dos de Artajerjes”, que corresponde a 443 a. E.C., año en el que Nehemías regresó por un tiempo a la corte de este rey.

*** it-2 pág. 479 Nehemías, Libro de ***
Por consiguiente, el mes de Kislev que precedía al mes de Nisán de ese año vigésimo correspondía al año 456 a. E.C., y el año trigésimo segundo del reinado de Artajerjes (la última fecha mencionada en Nehemías [13:6]) incluiría parte del año 443 a. E.C. Por consiguiente, el libro de Nehemías abarca un período que va desde Kislev del año 456 a. E.C. hasta algún tiempo después del año 443 a. E.C.
Nehemías salió de Jerusalén en el año trigésimo segundo del reinado de Artajerjes. A su regreso, halló que los judíos no estaban contribuyendo para los sacerdotes y los levitas, se estaba infringiendo la ley del sábado, muchos se habían casado con mujeres extranjeras y la prole de los matrimonios mixtos ni siquiera sabía hablar el idioma de los judíos. (Ne 13:10-27.) El que las condiciones se hubiesen deteriorado hasta ese punto indica que la ausencia de Nehemías se prolongó por un considerable período de tiempo. No obstante, no hay forma de determinar cuánto tiempo después del año 443 a. E.C. terminó Nehemías el libro que lleva su nombre.

*** si pág. 173 párr. 3 Libro bíblico número 39: Malaquías ***
No obstante, se dice mucho acerca de los abusos que cometía el sacerdocio, lo cual relaciona a Malaquías con la situación que existía cuando por segunda vez Nehemías vino a Jerusalén, después que Artajerjes lo hubo llamado de nuevo a Babilonia en 443 a.E.C., el trigésimo segundo año del reinado del rey. (Mal. 2:1; Neh. 13:6.)

(NEHEMÍAS 13:10)

“Y llegué a enterarme de que las mismísimas porciones de los levitas no se [les] habían dado, de modo que los levitas y los cantores que hacían la obra se fueron huyendo, cada uno a su propio campo.”

*** it-2 pág. 444 Música ***
Estos hechos ayudan a entender por qué aunque todos los cantores eran levitas, la Biblia se refiere a ellos como un grupo especial: “los cantores y los levitas”. (Ne 7:1; 13:10.)

*** it-2 pág. 479 Nehemías, Libro de ***
Nehemías salió de Jerusalén en el año trigésimo segundo del reinado de Artajerjes. A su regreso, halló que los judíos no estaban contribuyendo para los sacerdotes y los levitas, se estaba infringiendo la ley del sábado, muchos se habían casado con mujeres extranjeras y la prole de los matrimonios mixtos ni siquiera sabía hablar el idioma de los judíos. (Ne 13:10-27.) El que las condiciones se hubiesen deteriorado hasta ese punto indica que la ausencia de Nehemías se prolongó por un considerable período de tiempo. No obstante, no hay forma de determinar cuánto tiempo después del año 443 a. E.C. terminó Nehemías el libro que lleva su nombre.

(NEHEMÍAS 13:11)

“Y empecé a señalar sus faltas a los gobernantes diputados y a decir: “¿Por qué se ha descuidado la casa del Dios [verdadero]?”. En consecuencia, los junté y los aposté en su lugar fijo.”

*** w13 15/8 pág. 5 párr. 9 Ustedes han sido santificados ***
(Lea Nehemías 13:10-13.) Al parecer, cuando Nehemías regresó a Jerusalén, las contribuciones para el templo prácticamente habían cesado. Al no contar con este apoyo, los levitas estaban abandonando sus labores y yéndose a cultivar sus campos. Nehemías culpó de la situación a los gobernantes del pueblo, quizás porque no recaudaban los diezmos o porque no los destinaban al templo como se les había encargado hacer (Neh. 12:44).

*** it-2 pág. 479 Nehemías, Libro de ***
Nehemías salió de Jerusalén en el año trigésimo segundo del reinado de Artajerjes. A su regreso, halló que los judíos no estaban contribuyendo para los sacerdotes y los levitas, se estaba infringiendo la ley del sábado, muchos se habían casado con mujeres extranjeras y la prole de los matrimonios mixtos ni siquiera sabía hablar el idioma de los judíos. (Ne 13:10-27.) El que las condiciones se hubiesen deteriorado hasta ese punto indica que la ausencia de Nehemías se prolongó por un considerable período de tiempo. No obstante, no hay forma de determinar cuánto tiempo después del año 443 a. E.C. terminó Nehemías el libro que lleva su nombre.

(NEHEMÍAS 13:16)

“Y en [la ciudad] moraban los tirios mismos, los cuales introducían pescado y toda suerte de mercancías, y hacían ventas en sábado a los hijos de Judá y en Jerusalén.”

*** it-2 págs. 758-759 Puerta, paso de entrada ***
Puerta del Pescado. Parece ser que Ezequías edificó una parte del muro del segundo barrio hasta la Puerta del Pescado. (2Cr 32:5; 33:14.) El relato de Nehemías sobre la reconstrucción del muro y la marcha inaugural sitúa la Puerta del Pescado al O. de la Puerta de las Ovejas, probablemente cerca del extremo N. del valle de Tiropeón. (Ne 3:3; 12:39.) En Sofonías 1:10 se menciona esta puerta en conexión con el segundo barrio. Puede que se llamase así debido a lo cerca que estaba del mercado donde los tirios vendían pescado. (Ne 13:16.)

(NEHEMÍAS 13:22)

“Y pasé a decir a los levitas que con regularidad estuvieran purificándose y entrando, estando de guardia en las puertas para santificar el día de sábado. Esto, también, recuerda a favor mío, sí, oh Dios mío, y de veras tenme lástima conforme a la abundancia de tu bondad amorosa.”

*** w96 15/9 pág. 16 párr. 2 Que Jehová le impute el bien a su cuenta ***
2 Alguien que dio buena cuenta de su vida a Dios fue Nehemías, copero del rey persa Artajerjes (Longimano). (Nehemías 2:1.) Nombrado gobernador de los judíos, Nehemías reconstruyó la muralla de Jerusalén en medio de enemigos y peligros. Con celo por la adoración verdadera, hizo cumplir la Ley de Dios y se interesó por los oprimidos. (Nehemías 5:14-19.) Ordenó a los levitas que se purificaran con regularidad, que vigilaran las puertas y que santificaran el sábado. Por ende, pudo elevar esta plegaria: “Esto, también, recuerda a favor mío, sí, oh Dios mío, y de veras tenme lástima conforme a la abundancia de tu bondad amorosa”. Fue pertinente asimismo que concluyera su libro divinamente inspirado con la súplica: “Acuérdate de mí, sí, oh Dios mío, para bien”. (Nehemías 13:22, 31.)

*** w96 15/9 pág. 16 Que Jehová le impute el bien a su cuenta ***
“Esto [...] recuerda a favor mío, sí, oh Dios mío [...]. Acuérdate de mí, sí, oh Dios mío, para bien.” (NEHEMÍAS 13:22, 31.)

(NEHEMÍAS 13:23)

“También, en aquellos días vi a los judíos que habían dado morada a esposas asdoditas, ammonitas [y] moabitas.”

*** it-1 págs. 117-118 Ammonitas ***
Se casan con israelitas. Cuando los judíos regresaron del exilio (537 a. E.C.), un ammonita llamado Tobías fue uno de los dirigentes de la oposición a que se reedificasen los muros de Jerusalén. (Ne 4:3, 7, 8.) Después, incluso tuvo la arrogante osadía de hacer uso de un comedor del recinto del templo, hasta que Nehemías, indignado, arrojó fuera sus muebles. (Ne 13:4-8; véase TOBÍAS núm. 2.) Muchos de los exiliados judíos que regresaron habían tomado esposas ammonitas y de otras naciones, pero se les reprendió con severidad por ello y, como resultado, las despidieron. (Esd 9:1, 2; 10:10-19, 44; Ne 13:23-27.)
Después de la expulsión de Tobías del recinto del templo, se leyó y aplicó la ley de Dios registrada en Deuteronomio 23:3-6, que prohibía que los ammonitas y los moabitas entrasen en la congregación de Israel. (Ne 13:1-3.) Por lo general, se entiende que esta restricción, impuesta alrededor de mil años antes debido a que los ammonitas y los moabitas se negaron a socorrer a los israelitas cuando estos se acercaban a la Tierra Prometida, significa que estos pueblos no podrían llegar a formar parte de la nación de Israel en la condición legal de verdaderos miembros que disfrutaran de todos los derechos y privilegios propios del israelita. Sin embargo, esto no significa que los ammonitas y los moabitas no pudieran asociarse con los israelitas o residir entre ellos y beneficiarse como consecuencia de las bendiciones que Dios derramaba sobre su pueblo. Algunos ejemplos son: Zéleq, quien, como se mencionó antes, estuvo entre los guerreros principales de David, y Rut la moabita. (Rut 1:4, 16-18.)
En cuanto a este último caso, del matrimonio de Rut con Boaz se desprende que cuando las mujeres de estos pueblos se convertían a la adoración del Dios verdadero, podían casarse con hombres judíos. Además, debido a que los términos “ammonita” y “moabita” están en género masculino en el texto hebreo de Deuteronomio 23:3-6, la Misná judía (Yebamot 8:3) arguye que solo estaban excluidos de Israel los varones ammonitas y moabitas. Sin embargo, el que Esdras exigiera que los hombres judíos despidieran a sus esposas extranjeras, así como la actitud similar, ya mencionada, que adoptó Nehemías, es una prueba más de que la admisión de mujeres ammonitas y moabitas en Israel dependía de su aceptación de la adoración verdadera.

(NEHEMÍAS 13:24)

“Y en cuanto a sus hijos, la mitad hablaba asdodeo, y no había ninguno de ellos que supiera hablar judío, sino en la lengua de los diferentes pueblos.”

*** w13 15/8 págs. 6-7 Ustedes han sido santificados ***
NO PERDAMOS NUESTRA IDENTIDAD CRISTIANA
16 (Lea Nehemías 13:23-27.) En tiempos de Nehemías, los israelitas se estaban casando con extranjeras. En su primera visita a Jerusalén, él se había encargado de que todos los ancianos firmaran un acuerdo escrito en el que juraban que ni ellos ni los demás judíos se casarían con mujeres paganas (Neh. 9:38; 10:30). Sin embargo, algunos años más tarde se encontró con que los israelitas no solo habían tomado esposas extranjeras, sino que estaban a punto de perder su identidad como pueblo santificado de Dios. Los hijos de aquellas mujeres paganas no sabían leer ni hablar hebreo. Cuando se hicieran adultos, ¿se identificarían como israelitas? ¿O más bien se considerarían asdoditas, ammonitas o moabitas? ¿Cómo iban a entender la Ley de Dios si no sabían hebreo? ¿Cómo podrían llegar a conocer a Jehová y elegir servirle a él en vez de a los dioses falsos que sus madres adoraban? Había que actuar rápidamente y con decisión, y Nehemías lo hizo (Neh. 13:28).
17 Hoy día debemos actuar con decisión para que nuestros hijos adquieran la identidad cristiana, para que se sientan verdaderos cristianos. Padres, pregúntense: “¿Dominan mis hijos el ‘lenguaje puro’ de la verdad? ¿Reflejan sus conversaciones la influencia del espíritu de Dios, o la del espíritu del mundo?” (Sof. 3:9). No se desanimen si ven cosas en las que ellos necesitan mejorar. Aprender un idioma toma tiempo, sobre todo cuando uno vive rodeado de distracciones. Este mundo somete a sus hijos a enormes presiones. Por lo tanto, sean pacientes y aprovechen la Noche de Adoración en Familia y otras oportunidades para ayudarlos a cultivar una estrecha relación con Jehová (Deut. 6:6-9). Destaquen los beneficios de ser diferentes de quienes pertenecen al mundo de Satanás (Juan 17:15-17). Y esfuércense por llegar a su corazón.
18 Al final, cada hijo decidirá si desea servir a Dios o no. Pero los padres pueden ayudarlos de muchas maneras. Está en su mano darles un buen ejemplo, fijar límites claros y hablar con ellos sobre las consecuencias de sus decisiones. Padres, nadie mejor que ustedes puede prepararlos para dedicarse a Jehová. Ellos necesitan su ayuda para adquirir la identidad cristiana y no perderla.

*** it-1 pág. 230 Asdodita ***
En Nehemías 13:24 aparece el vocablo “asdodeo”, que designa el lenguaje que hablaban los asdoditas. No obstante, como no hay registro alguno de este idioma, no hay manera de saber si por entonces hablaban la lengua filistea antigua o un dialecto que se hubiese formado debido al influjo de varios siglos de dominación extranjera.

*** it-2 pág. 206 Lenguaje ***
Nehemías se perturbó muchísimo cuando supo que los hijos de los judíos repatriados que se habían casado con mujeres extranjeras no sabían hablar “judío” (hebreo). (Ne 13:23-25.) Su preocupación no era otra que la de facilitar la adoración pura, pues sabía que era de primera importancia entender los Santos Escritos (por entonces solo en hebreo) cuando se leyesen y comentasen. (Compárese con Ne 13:26, 27; 8:1-3, 8, 9.) Además, la comunicación en una sola lengua sería para ellos una fuerza unificadora. No cabe duda de que las Escrituras Hebreas desempeñaron un importante papel en la estabilidad del idioma hebreo, pues durante el período de mil años que abarcó la redacción de los libros que las integran, prácticamente no se produjo ningún cambio lingüístico.

(NEHEMÍAS 13:25)

“Y empecé a señalarles sus faltas y a invocar el mal contra ellos y a golpear a algunos hombres de ellos y a arrancarles el cabello y a hacerles jurar por Dios: “No deben dar sus hijas a los hijos de ellos, y no deben aceptar a ninguna de las hijas de ellos para los hijos de ustedes ni para ustedes mismos.”

*** it-1 pág. 381 Cabello ***
y arrancar el cabello de la cabeza o de la cara de otra persona era una forma de deshonrarla, despreciarla o censurarla. (Ne 13:25; Isa 50:6.)

*** it-2 págs. 478-479 Nehemías ***
Asimismo, tomó medidas para garantizar las contribuciones para los levitas e hizo que se observara estrictamente el sábado. También administró disciplina contra aquellos que habían tomado esposas extranjeras, los hijos de cuyas mujeres ni siquiera sabían hablar el idioma judío: “Y empecé a señalarles sus faltas y a invocar el mal contra ellos y a golpear a algunos hombres de ellos y a arrancarles el cabello y a hacerles jurar por Dios: ‘No deben dar sus hijas a los hijos de ellos, y no deben aceptar a ninguna de las hijas de ellos para los hijos de ustedes ni para ustedes mismos’”.
El que Nehemías ‘señalara las faltas’ de aquellos hombres probablemente implicó censura y reprensión mediante la ley de Dios, y poner al descubierto su acción impropia. Esos hombres estaban llevando a la nación restaurada al disfavor de Dios, después de que se les había repatriado bondadosamente de Babilonia con el fin de restablecer la adoración verdadera en Jerusalén. Nehemías ‘invocó el mal contra ellos’ en el sentido de enumerar los juicios de la ley de Dios sobre los transgresores. Los ‘golpeó’: parece probable que no lo hiciese personalmente, sino que ordenase flagelarlos como medida judicial. Les ‘arrancó [una porción] de cabello’, un símbolo de indignación moral e ignominia delante del pueblo. (Compárese con Esd 9:3.) Luego Nehemías ahuyentó al nieto del sumo sacerdote Eliasib, quien había llegado a ser yerno de Sanbalat el horonita. (Ne 13:1-28.)

(NEHEMÍAS 13:31)

“aun para el suministro de leña a tiempos señalados, y para los primeros frutos maduros. Acuérdate de mí, sí, oh Dios mío, para bien.”

*** w13 15/8 pág. 7 Ustedes han sido santificados ***
JEHOVÁ NOS RECORDARÁ “PARA BIEN”
19 Un contemporáneo de Nehemías, el profeta Malaquías, reveló que “un libro de recuerdo empezó a ser escrito [...] para los que estaban en temor de Jehová y para los que pensaban en su nombre” (Mal. 3:16, 17). Así es, Dios nunca olvidará a quienes sienten un temor reverente por él y aman su nombre (Heb. 6:10).
20 Nehemías suplicó: “Acuérdate de mí, sí, oh Dios mío, para bien” (Neh. 13:31). Nuestros nombres estarán junto al de Nehemías en el libro de recuerdo de Jehová si seguimos evitando las malas compañías, apoyamos la organización de Dios, damos prioridad a las cosas espirituales y no perdemos nuestra identidad cristiana. “Sigan poniéndose a prueba para ver si están en la fe”, nos animó el apóstol Pablo (2 Cor. 13:5). Si nos esforzamos por permanecer en el pueblo santificado de Jehová, él se acordará de nosotros “para bien”.

*** w11 1/2 pág. 14 “Acuérdate de mí, sí, oh Dios mío, para bien” ***
Acérquese a Dios
“Acuérdate de mí, sí, oh Dios mío, para bien”
UNA fiel cristiana que ha tenido que luchar contra la falta de autoestima escribió: “A veces pensaba que Jehová nunca me querría ni me daría su aprobación”. ¿Alguna vez se ha sentido usted como ella? ¿Ha llegado a pensar que lo que hace no tiene valor para Dios o que él jamás se fijará en usted? Si así es, las palabras registradas en Nehemías 13:31 le darán mucho ánimo.
Nehemías fue un gobernador judío del siglo V antes de Cristo. Este hombre hizo todo lo posible por agradar a Jehová Dios: dirigió la reconstrucción de las murallas de Jerusalén pese a las amenazas de sus enemigos, hizo cumplir la Ley de Dios, veló por los desfavorecidos y fortaleció la fe de sus hermanos israelitas. ¿Se fijó Dios en sus buenas obras? ¿Le concedió su aprobación? Encontramos la respuesta en el último versículo del libro bíblico que lleva su nombre.
Nehemías oró: “Acuérdate de mí, sí, oh Dios mío, para bien”. ¿Por qué hizo esa petición? ¿Acaso temía que Dios se olvidara de él o que no prestara atención a sus buenas obras? En absoluto. Él sabía que Jehová se interesa por sus siervos y valora su lealtad, pues otros escritores bíblicos así lo habían indicado (Éxodo 32:32, 33; Salmo 56:8). Entonces, ¿qué quiso decir? Según cierta obra de consulta, el término hebreo que en este versículo se traduce “acuérdate” tiene relación con “los sentimientos de aprecio y las acciones que acompañan al recuerdo”. Con plena fe en el poder de la oración, Nehemías le estaba pidiendo a Dios que lo recordara con cariño y que lo bendijera (Nehemías 2:4).
¿Escuchó Jehová su oración? Claro que sí. El hecho de que Dios haya tenido a bien incluir la oración de Nehemías en su Palabra inspirada indica que lo recuerda con cariño. Pero Jehová, el “Oidor de la oración”, también se acordará de él en otro sentido (Salmo 65:2).
Dios lo recompensará por todo lo que hizo por la religión verdadera (Hebreos 11:6). ¿Cómo? Cuando Dios cumpla su promesa de convertir la Tierra en un paraíso, lo resucitará y le dará la oportunidad de vivir para siempre (2 Pedro 3:13; Revelación [Apocalipsis] 21:3, 4). Y entonces, este fiel siervo de Dios verá que, en efecto, Jehová se acordó de él.
La oración de Nehemías está en consonancia con estas palabras del rey David: “Bendecirás al justo, oh Jehová; como con un escudo grande, con aprobación lo cercarás” (Salmo 5:12). Así es, a Dios le complace que nos esforcemos por agradarle, y nuestros actos nunca le pasan desapercibidos. Si le servimos de todo corazón, podemos confiar en que también se acordará de nosotros y nos recompensará por nuestras buenas obras.

*** w96 15/9 pág. 16 párr. 2 Que Jehová le impute el bien a su cuenta ***
2 Alguien que dio buena cuenta de su vida a Dios fue Nehemías, copero del rey persa Artajerjes (Longimano). (Nehemías 2:1.) Nombrado gobernador de los judíos, Nehemías reconstruyó la muralla de Jerusalén en medio de enemigos y peligros. Con celo por la adoración verdadera, hizo cumplir la Ley de Dios y se interesó por los oprimidos. (Nehemías 5:14-19.) Ordenó a los levitas que se purificaran con regularidad, que vigilaran las puertas y que santificaran el sábado. Por ende, pudo elevar esta plegaria: “Esto, también, recuerda a favor mío, sí, oh Dios mío, y de veras tenme lástima conforme a la abundancia de tu bondad amorosa”. Fue pertinente asimismo que concluyera su libro divinamente inspirado con la súplica: “Acuérdate de mí, sí, oh Dios mío, para bien”. (Nehemías 13:22, 31.)

*** w96 15/9 pág. 16 Que Jehová le impute el bien a su cuenta ***
“Esto [...] recuerda a favor mío, sí, oh Dios mío [...]. Acuérdate de mí, sí, oh Dios mío, para bien.” (NEHEMÍAS 13:22, 31.)

*** it-2 pág. 479 Nehemías ***
Nehemías, un ejemplo sobresaliente. Nehemías se destaca como un ejemplo excelente de fidelidad y devoción. Fue desinteresado, pues dejó atrás una posición importante como copero de la corte de Artajerjes para emprender la reconstrucción de los muros de Jerusalén. Puesto que había muchos enemigos, se expuso voluntariamente al peligro en favor de su pueblo y de la adoración verdadera. No solo dirigió el trabajo de reparación del muro de Jerusalén, sino que tuvo también una participación personal activa en la tarea. No perdió el tiempo, fue valeroso y no tuvo temor. Confió completamente en Jehová y mostró discreción en todo lo que hacía. Nehemías tenía celo por la adoración verdadera, conocía la ley de Dios y la aplicaba. Estaba interesado en edificar la fe de sus compañeros israelitas y demostró tener el debido temor a Jehová. Aunque insistió celosamente en el cumplimiento de la ley de Dios, no ejerció dominio sobre otros para provecho propio, sino que más bien se interesó en los oprimidos. Nunca solicitó el pan que le correspondía al gobernador; al contrario, proporcionó alimento a su costa a un buen número de personas. (Ne 5:14-19.) Nehemías pudo orar apropiadamente: “Acuérdate de mí, sí, oh Dios mío, para bien”. (Ne 13:31.)


Puntos sobresalientes de: Nehemías