¿Cómo concibe el hombre la orientación democrática?

Filosofía de la Educación

Filosofía de la Educación

La democracia hace del hombre el centro de sus preocupaciones y lo concibe como hombre concreto, que además de voluntad posee otros factores, somáticos y psíquicos que lo individualizan; como un fin en sí mismo,
— capaz de juzgar y decidir, orientador de su propio destino;
— capaz de autodominio;
— ligado a su medio social y a su época;
— dotado de capacidades susceptibles de desarrollo;
— libre, de espíritu abierto y comprensivo;
‒‒ de espíritu crítico;
— responsable de sus elecciones y de sus actos;
— promotor de transformaciones sociales;
‒‒ capaz de comprender las consecuencias de sus acciones;
— dispuesto a asumir las solidaridades que componen el destino de la especie;
‒‒ dotado de dignidad humana;
este hombre así concebido forma parte de una sociedad en la que ha de referir su propia acción a la acción de los demás, para así dar pauta y dirección a la suya. Una sociedad en la cual las barreras de clase, raza, credo o sexo, etc., han desaparecido; una sociedad concebida como comunicación, con propósitos compartidos mutuamente, es decir, una sociedad:
— solidaria - flexible
— tolerante - cooperativa
favorecedora del libre intercambio de ideas y donde la decisión de las mayorías supera las desavenencias, ya que se piensa que el gobierno de la mayoría es la única garantía de acción; una sociedad que no fija reglas férreas para indicar lo que ha de hacerse en nuevas circunstancias si no que señala principios para precisar metas, preparar actividades, etc. Dentro de esta sociedad, el Estado es un medio, especie de árbitro orientador y regulador del esfuerzo por moldear la sociedad sobre la base de la ética y el respeto por la personalidad humana, control que ejerce por medio del gobierno y que está sobre la base de principios morales sensibles, que legitiman este derecho. En esta sociedad, la educación es requisito indispensable para el ejercicio ‘le la democracia, ya que si es el pueblo mismo el que ha de gobernarse, nada más lógico que esté capacitado para cumplir tal función. Esta idea ¿e educación no significa exclusivamente alfabetización, sino educación en el sentido ético-político de la palabra.