Triunvirato Ejecutivo de 1811 | Historia de Venezuela
Diccionario de Historia
de Venezuela
1811-1812
Cuerpo político colegiado compuesto de 3
miembros, que ejerció el Poder Ejecutivo durante la Primera República.
Fue creado por el Congreso Constituyente, el 5 de marzo de 1811. En los
documentos de la época se le llama Poder Ejecutivo de la Confederación
(o de las Provincias Unidas) de Venezuela, pero históricamente es
conocido también como Triunvirato Ejecutivo. Los miembros nombrados por
el Congreso fueron, en este orden: el jurista Cristóbal de Mendoza, el militar Juan de Escalona y el hacendista Baltasar Padrón.
Los 3 ejercían el poder colectivamente con sede en la ciudad de
Caracas, pero se turnaban cada semana para ocupar la presidencia del
cuerpo. Por decreto legislativo del 6 de marzo la Junta Suprema que
desde abril de 1810 gobernaba a Venezuela cesó en sus funciones. Su
presidente (que era entonces Feliciano Palacios Blanco) entregó el poder
al Triunvirato, el cual empezó sus actividades en la tarde del mismo
día 6. Como Cristóbal de Mendoza se hallaba entonces en Barinas, entró
interinamente en lugar suyo el suplente Manuel Moreno de Mendoza,
militar como Escalona. El 25 de abril llegó a la capital Cristóbal de
Mendoza, quien se posesionó de inmediato del cargo. De este modo, los 3
miembros principales, Mendoza, Escalona y Padrón (así como el suplente
Moreno de Mendoza) ejercieron varias veces la presidencia del Poder
Ejecutivo y, por consiguiente, de la República. Sin embargo, se
considera primer presidente de Venezuela a Cristóbal de Mendoza, porque
él figuraba a la cabeza de los designados el 5 de marzo por el Congreso,
aunque no se posesionase de inmediato por estar ausente de la capital.
Cuando se declaró la independencia el 5 de julio de 1811, Mendoza
suscribió ese mismo día, como presidente en turno, junto con sus
colegas Escalona y Padrón, la proclama en la cual se anunciaba dicho
acontecimiento. El día 8 de julio una comisión del Congreso encabezada
por Juan Germán Roscio presentó a los triunviros el Acta de la Independencia,
la cual fue refrendada de inmediato por ellos, correspondiéndole a
Mendoza firmar como presidente en turno. Durante los meses siguientes el
Poder Ejecutivo plural continuó desempeñando sus funciones, con la
colaboración de los secretarios de Estado (o ministros), que ya existían
desde la época de la Junta Suprema. Cuando era necesario, alguno
de los triunviros o un secretario de Estado pasaba al Congreso para
informar (en sesión pública o secreta, según los casos) acerca de los
asuntos militares, políticos, fiscales, económicos, religiosos, sociales
o diplomáticos que exigían el acuerdo de los 2 poderes. En general
reinaba un ambiente de mutuo respeto, aunque no dejaron de presentarse
discrepancias, como ocurrió a propósito del juicio contra los
insurrectos de Valencia y también acerca de la conducta del general Francisco de Miranda
al debelar aquel movimiento. A partir de septiembre de 1811 el
triunviro Mendoza fue sustituido en varias oportunidades por el suplente
Moreno de Mendoza. Una de las gestiones más notables del Poder
Ejecutivo durante ese período fue la conclusión de un tratado de amistad
y alianza con el Estado de Cundinamarca, fruto de la misión diplomática
llevada a cabo en Bogotá por el canónigo José Cortés de Madariaga;
tratado que fue ratificado por el Congreso el 22 de octubre de 1811,
con modificaciones. En diciembre, al ser aprobada por el Congreso la Constitución Federal,
este mismo cuerpo dictó disposiciones para su aprobación por las
asambleas provinciales y para la elección de un nuevo Poder Ejecutivo
compuesto también de 3 miembros. Entre tanto, el que venía existiendo
desde marzo de 1811 continuó activo durante los primeros meses de 1812.
Como el Congreso había acordado trasladarse a la ciudad de Valencia (que
quedaba convertida en capital de Venezuela en lugar de Caracas), el
Poder Ejecutivo manifestó en varias oportunidades, en enero y febrero de
1812, su negativa a establecerse en dicha ciudad, lo cual suscitó una
controversia entre los 2 poderes. Finalmente, el Congreso se trasladó a
Valencia, donde reanudó sus sesiones el 16 de marzo de 1812. Pero de los
miembros del Triunvirato sólo Mendoza viajó desde Caracas a la nueva
capital. De todos modos, realizadas la elecciones en las provincias, el
Congreso escogió el 21 de marzo entre las 9 personas que habían recibido
el mayor número de sufragios a los integrantes del nuevo Poder
Ejecutivo. Fueron éstos Fernando Rodríguez del Toro, Francisco Javier Ustáriz y Francisco Espejo; como suplente quedó Francisco Javier Mayz.
Las dificultades creadas por el terremoto del 26 de marzo de 1812 y la
crisis político-militar abierta por el avance de las fuerzas realistas
al mando de Domingo de Monteverde, hicieron prácticamente nula
la actuación de este segundo Triunvirato. Ni Toro ni Ustáriz llegaron a
ir a Valencia, y no fue sino el 3 de abril cuando Francisco Espejo pudo
presentarse en esa ciudad y juramentarse junto con el suplente Mayz
(que era diputado) para dejar constituido el Triunvirato con sólo 2 de
sus miembros. El día 4, el Congreso acordó conferir al Poder Ejecutivo
de la Confederación facultades extraordinarias, y se puso en receso el 6
de abril de 1812. El 23 de ese mes el Poder Ejecutivo, mediante una
comunicación del secretario de Guerra y Marina, José de Sata y Bussy,
nombró a Miranda generalísimo de las Fuerzas Armadas de la
Confederación «…con absolutas facultades (...) para salvar nuestro
territorio invadido por los enemigos de la libertad…», según se le
decía. Miranda aceptó. El Poder Ejecutivo se estableció en La Victoria.
Fernando Rodríguez del Toro, quien aún se resentía de la herida recibida
en la batalla de Valencia en julio de 1811, se separó del Triunvirato, y
fue sustituido por Juan Germán Roscio. El 19 de mayo se celebró en la
hacienda de la Trinidad de Tapatapa, en Maracay, una conferencia a la
cual asistieron, además del generalísimo Miranda, el letrado Roscio,
representante del Ejecutivo Federal, Francisco Talavera, del Ejecutivo
de la provincia de Caracas, y José Vicente Mercader por la Cámara de
Representantes de la misma provincia. Miranda, escribe Parra Pérez,
«…recibió expresamente y además de todas las facultades delegadas por
el Congreso al Ejecutivo Federal, la de tratar directamente con las
naciones extranjeras y de América…» El Triunvirato cesó en sus
funciones, pero Roscio y Espejo permanecieron como consejeros al lado de
Miranda, quien asumió ese día el gobierno de la Confederación de
Venezuela. M.P.V.
Información recuperada de:
Diccionario de Historia de Venezuela. 2da Edición. Caracas: Fundación Polar, 1997.